Seguinos

Sociedad

Lunes 13. Se celebra San Antonio de Padua en distintas localidades correntinas

TURISMO RELIGIOSO

Publicado

el

El lunes 13 de junio se celebra en la Provincia de Corrientes San Antonio de Padua. Por lo tanto las celebraciones se realizarán en los municipios de Yataiti Calle, Mburucuyá, Mariano I Loza, Ramada Paso, Isla Apipe, Berón de Astrada, Carolina, Gobernador Virasoro. Llamado “Doctor Evangélico”, escribió sermones para todas las fiestas del año.


Antonio nació en Portugal, pero adquirió el apellido por el que lo conoce el mundo, de la ciudad italiana de Padua, donde murió y donde todavía se veneran sus reliquias. León XIII lo llamó “el santo de todo el mundo”, porque su imagen y devoción se encuentran por todas partes.

 

 

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

“El gran peligro del cristiano es predicar y no practicar, creer pero no vivir de acuerdo con lo que se cree”. San Antonio

 

 

 

BIOGRAFÍA DE SAN ANTONIO DE PADUA

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Patrón de mujeres estériles, pobres, viajeros, albañiles, panaderos y papeleros. Se le invoca por los objetos perdidos y para pedir un buen esposo/a.  Es verdaderamente extraordinaria su intercesión

 

Vino al mundo en el año 1195 y se llamó Fernando de Bulloes y Taveira de Azevedo, nombre que cambió por el de Antonio al ingresar en la orden de Frailes Menores, por la devoción al gran patriarca de los monjes y patrones titulares de la capilla en que recibió el hábito franciscano.

 

Sus padres, jóvenes miembros de la nobleza de Portugal, dejaron que los clérigos de la Catedral de Lisboa se encargaran de impartir los primeros conocimientos al niño, pero cuando éste llegó a la edad de quince años, fue puesto al cuidado de los canónigos regulares de San Agustín, que tenían su casa cerca de la ciudad. Dos años después, obtuvo permiso para ser trasladado al priorato de Coimbra, por entonces capital de Portugal, a fin de evitar las distracciones que le causaban las constantes visitas de sus amistades. 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

No le faltaron las pruebas. En la juventud fue atacado duramente por las pasiones sensuales. Pero no se dejó vencer y con la ayuda de Dios las dominó. El se fortalecía visitando al Stmo. Sacramento. Además desde niño se había consagrado a la Stma. Virgen y a Ella encomendaba su pureza. 

 

Una vez en Coimbra, se dedicó por entero a la plegaria y el estudio; gracias a su extraordinaria memoria retentiva, llegó a adquirir, en poco tiempo, los más amplios conocimientos sobre la Biblia. En el año de 1220, el rey Don Pedro de Portugal regresó de una expedición a Marruecos y trajo consigo las reliquias de los santos frailes-franciscanos que, poco tiempo antes habían obtenido allá un glorioso martirio. Fernando que por entonces había pasado ocho años en Coimbra, se sintió profundamente conmovido a la vista de aquellas reliquias y nació en lo íntimo de su corazón el anhelo de dar la vida por Cristo.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Poco después, algunos frailes franciscanos llegaron a hospedarse en el convento de la Santa Cruz, donde estaba Fernando; éste les abrió su corazón y fue tan empeñosa su insistencia, que a principio de 1221, se le admitió en la orden. Casi inmediatamente después, se le autorizó para embarcar hacia Marruecos a fin de predicar el Evangelio a los moros.

 

Pero no bien llegó a aquellas tierras donde pensaba conquistar la gloria, cuando fue atacado por una grave enfermedad (hidropesía), que le dejó postrado e incapacitado durante varios meses y, a fin de cuentas, fue necesario devolverlo a Europa. La nave en que se embarcó, empujada por fuertes vientos, se desvió y fue a parar en Messina, la capital de Sicilia. 

 

Con grandes penalidades, viajó desde la isla a la ciudad de Asís donde, según le habían informado sus hermanos en Sicilia, iba a llevarse a cabo un capítulo general. Aquella fue la gran asamblea de 1221, el último de los capítulos que admitió la participación de todos los miembros de la orden; estuvo presidido por el hermano Elías como vicario general y San Francisco, sentado a sus pies, estaba presente. 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

Indudablemente que aquella reunión impresionó hondamente al joven fraile portugués. Tras la clausura, los hermanos regresaron a los puestos que se les habían señalado, y Antonio fue a hacerse cargo de la solitaria ermita de San Paolo, cerca de Forli.  Hasta ahora se discute el punto de si, por aquel entonces, Antonio era o no sacerdote; pero lo cierto es que nadie ha puesto en tela de juicio los extraordinarios dones intelectuales y espirituales del joven y enfermizo fraile que nunca hablaba de sí mismo.

 

Cuando no se le veía entregado a la oración en la capilla o en la cueva donde vivía, estaba al servicio de los otros frailes, ocupado sobre todo en la limpieza de los platos y cacharros, después del almuerzo comunal.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Mas no estaban destinadas a permanecer ocultas las claras luces de su intelecto. Sucedió que al celebrarse una ordenación en Forli, los candidatos franciscanos y dominicos se reunieron en el convento de los Frailes Menores de aquella ciudad. Seguramente a causa de algún malentendido, ninguno de los dominicos había acudido ya preparado a pronunciar la acostumbrada alocución durante la ceremonia y, como ninguno de los franciscanos se sentía capaz de llenar la brecha, se ordenó a San Antonio, ahí presente, que fuese a hablar y que dijese lo que el Espíritu Santo le inspirara.

 

El joven obedeció sin chistar y, desde que abrió la boca hasta que terminó su improvisado discurso, todos los presentes le escucharon como arrobados, embargados por la emoción y por el asombro, a causa de la elocuencia, el fervor y la sabiduría de que hizo gala el orador. En cuanto el ministro provincial tuvo noticias sobre los talentos desplegados por el joven fraile portugués, lo mandó llamar a su solitaria ermita y lo envió a predicar a varias partes de la Romagna, una región que, por entonces, abarcaba toda la Lombardía. 

 

En un momento, Antonio pasó de la oscuridad a la luz de la fama y obtuvo, sobre todo, resonantes éxitos en
la conversión de los herejes, que abundaban en el norte de Italia y que, en muchos casos, eran hombres de cierta posición y educación, a los que se podía llegar con argumentos razonables y ejemplos tomados de las Sagradas Escrituras.

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

En una ocasión, cuando los herejes de Rímini le impedían al pueblo acudir a sus sermones, San Antonio se fue a la orilla del mar y empezó a gritar: “Oigan la palabra de Dios, Uds. los pececillos del mar, ya que los pecadores de la tierra no la quieren escuchar”.  A su llamado acudieron miles y miles de peces que sacudían la cabeza en señal de aprobación.  Aquel milagro se conoció y conmovió a la ciudad, por lo que los herejes tuvieron que ceder.

 

A pesar de estar muy enfermo de hidropesía, San Antonio predicaba los 40 días de cuaresma. La gente presionaba para tocarlo y le arrancaban pedazos del hábito, hasta el punto que hacía falta designar un grupo de hombres para protegerlo después de los sermones. 

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Además de la misión de predicador, se le dio el cargo de lector en teología entre sus hermanos. Aquella fue la primera vez que un miembro de la Orden Franciscana cumplía con aquella función.  En una carta que, por lo general, se considera como perteneciente a San Francisco, se confirma este nombramiento con las siguientes palabras: “Al muy amado hermano Antonio, el hermano Francisco le saluda en Jesucristo. Me complace en extremo que seas tú el que lea la sagrada teología a los frailes, siempre que esos estudios no afecten al santo espíritu de plegaria y devoción que está de acuerdo con nuestra regla”.

 

Sin embargo, se advirtió cada vez con mayor claridad que, la verdadera misión del hermano Antonio estaba en el púlpito. Por cierto que poseía todas las cualidades del predicador: ciencia, elocuencia, un gran poder de persuasión, un ardiente celo por el bien de las almas y una voz sonora y bien timbrada que llegaba muy lejos. 

 

Por otra parte, se afirmaba que estaba dotado con el poder de obrar milagros y, a pesar de que era de corta estatura y con cierta inclinación a la corpulencia, poseía una personalidad extraordinariamente atractiva, casi magnética. A veces, bastaba su presencia para que los pecadores cayesen de rodillas a sus pies; parecía que de su persona irradiaba la santidad. A donde quiera que iba, las gentes le seguían en tropel para escucharle, y con eso había para que los criminales empedernidos, los indiferentes y los herejes, pidiesen confesión.

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

Las gentes cerraban sus tiendas, oficinas y talleres para asistir a sus sermones; muchas veces sucedió que algunas mujeres salieron antes del alba o permanecieron toda la noche en la iglesia, para conseguir un lugar cerca del púlpito. Con frecuencia, las iglesias eran insuficiente para contener a los enormes auditorios y, para que nadie dejara de oírle, a menudo predicaba en las plazas públicas y en los mercados.

 

Poco después de la muerte de San Francisco, el hermano Antonio fue llamado, probablemente con la intención de nombrarle ministro provincial de la Emilia o la Romagna. En relación con la actitud que asumió el santo en las disensiones que surgieron en el seno de la orden, los historiadores modernos no dan crédito a la leyenda de que fue Antonio quien encabezó el movimiento de oposición al hermano Elías y a cualquier desviación de la regla original; esos historiadores señalan que el propio puesto de lector en teología, creado para él, era ya una innovación.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Más bien parece que, en aquella ocasión, el santo actuó como un enviado del capítulo general de 1226 ante el Papa, Gregorio IX, para exponerle las cuestiones que hubiesen surgido, a fin de que el Pontífice manifestara su decisión. En aquella oportunidad, Antonio obtuvo del Papa la autorización para dejar su puesto de lector y dedicarse exclusivamente a la predicación. El Pontífice tenía una elevada opinión sobre el hermano Antonio, a quien cierta vez llamó “el Arca de los Testamentos”, por los extraordinarios conocimientos que tenía de las Sagradas Escrituras.

 

Desde aquel momento, el lugar de residencia de San Antonio fue Padua, una ciudad donde anteriormente había trabajado, donde todos le amaban y veneraban y donde, en mayor grado que en cualquier otra parte, tuvo el privilegio de ver los abundantísimos frutos de su ministerio. Porque no solamente escuchaban sus sermones multitudes enormes, sino que éstos obtuvieron una muy amplia y general reforma de conducta.

 

Las ancestrales disputas familiares se arreglaron definitivamente, los prisioneros quedaron en libertad y muchos de los que habían obtenido ganancias ilícitas las restituyeron, a veces en público, dejando títulos y dineros a los pies de San Antonio, para que éste los devolviera a sus legítimos dueños. Para beneficio de los pobres, denunció y combatió el muy ampliamente practicado vicio de la usura y luchó para que las autoridades aprobasen la ley que eximía de la pena de prisión a los deudores que se manifestasen dispuestos a desprenderse de sus posesiones para pagar a sus acreedores. 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

Se dice que también se enfrentó abiertamente con el violento duque Eccelino para exigirle que dejase en libertad a ciertos ciudadanos de Verona que el duque había encarcelado. A pesar de que no consiguió realizar sus propósitos en favor de los presos, su actitud nos demuestra el respeto y la veneración de que gozaba, ya que se afirma que el duque le escuchó con paciencia y se le permitió partir, sin que nadie le molestara.

 

Después de predicar una serie de sermones durante la primavera de 1231, la salud de San Antonio comenzó a ceder y se retiró a descansar, con otros dos frailes, a los bosques de Camposampiero.  Bien pronto se dio cuenta de que sus días estaban contados y entonces pidió que le llevasen a Padua. No llegó vivo más que a los aledaños de la ciudad.  El 13 de junio de 1231, en la habitación particular del capellán de las Clarisas Pobres de Arcella recibió los últimos sacramentos. Entonó un canto a la Stma. Virgen y sonriendo dijo,  “Veo venir a Nuestro Señor” y murió. Era el 13 de junio de 1231. 

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

La gente recorría las calles diciendo: “¡Ha muerto un santo! ¡Ha muerto un santo!.Al morir tenía tan sólo treinta y cinco años de edad.  Durante sus funerales se produjeron extraordinarias demostraciones de la honda veneración que se le tenía.  Los paduanos han considerado siempre sus reliquias como el tesoro más preciado.

 

San Antonio fue canonizado antes de que hubiese transcurrido un año de su muerte; en esa ocasión, el Papa Gregorio IX pronunció la antífona “O doctor optime” en su honor y, de esta manera, se anticipó en siete siglos a la fecha del año 1946, cuando el Papa Pío XII declaró a San Antonio “Doctor de la Iglesia”.

 

Se le llama el “Milagroso San Antonio” por ser interminable lista de favores y beneficios que ha obtenido del ciel
o para sus devotos, desde el momento de su muerte.  Uno de los milagros más famosos de su vida es el de la mula: Quiso uno retarle a San Antonio a que probase con un milagro que Jesús está en la Santa Hostia. El hombre dejó a su mula tres días sin comer, y luego cuando la trajo a la puerta del templo le presentó un bulto de pasto fresco y al otro lado a San Antonio con una Santa Hostia.  La mula dejó el pasto y se fue ante la Santa Hostia y se arrodilló.

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

Iconografía. Por regla general, a partir del siglo XVII, se ha representado a San Antonio con el Niño Jesús en los brazos; ello se debe a un suceso que tuvo mucha difusión y que ocurrió cuando San Antonio estaba de visita en la casa de un amigo. En un momento dado, éste se asomó por la ventana y vio al santo que contemplaba, arrobado, a un niño hermosísimo y resplandeciente que sostenía en sus brazos. 

 

En las representaciones anteriores al siglo XVII aparece San Antonio sin otro distintivo que un libro, símbolo de su sabiduría respecto a las Sagradas Escrituras.  En ocasiones se le representó con un lirio en las manos y también junto a una mula que, según la leyenda, se arrodilló ante el Santísimo Sacramento que mostraba el santo; la actitud de la mula fue el motivo para que su dueño, un campesino escéptico, creyese en la presencia real.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

San Antonio es el patrón de los pobres y, ciertas limosnas especiales que se dan para obtener su intercesión, se llama “pan de San Antonio”; esta tradición comenzó a practicarse en 1890.  No hay ninguna explicación satisfactoria sobre el motivo por el que se le invoca para encontrar los objetos perdidos, pero es muy posible que esa devoción esté relacionada con un suceso que se relata entre los milagros, en la “Chronica XXIV Generalium” (No. 21):  un novicio huyó del convento y se llevó un valioso salterio que utilizaba San Antonio; el santo oró para que fuese recuperado su libro y, al instante, el novicio fugitivo se vio ante una aparición terrible y amenazante que lo obligó a regresar al convento y devolver el libro.

En Padua hay una magnífica basílica donde se veneran sus restos mortales.

Seguir leyendo
Publicidad
Clic para comentar

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sociedad

Canteros entregó distinción a los autores de la Marcha a Belgrano

“HACEDORES DEL BIEN COMÚN”

Publicado

el

El vicegobernador, Gustavo Canteros hizo entrega del reconocimiento “Hacedores del Bien Común” a Thierry Calderón de la Barca y Silvia Beatriz Romero, autores de la marcha al General Manuel Belgrano llamada “Forjado en bronce y macerado en plata”.


“Es loable el trabajo que desempeñaron estos docentes al destacar la figura de uno de nuestros próceres, un hombre inmenso como fue el General Manuel Belgrano, que en 1810 durante la campaña hacia el Paraguay pasó por Corrientes y fundó dos pueblos: Curuzú Cuatiá, Concepción de Yaguareté Corá”, expresó Canteros y destacó “la creatividad y el compromiso de Thierry Calderón de la Barca y Silvia Romero, de crear una marcha para homenajearlo”.

 

Durante el acto de entrega de la distinción los autores intercambiaron sus experiencias y anécdotas del proceso creativo y la repercusión que ha tenido. También se refirieron a las experiencias y desafíos en el ámbito educativo durante este año y las dificultades por las que atravesaron los alumnos y sus familias en momentos de pandemia.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Vale recordar que la marcha “Forjado en bronce y macerado en plata”, que ya tiene media sanción de la Cámara de Diputados, se encuentra en la Cámara de Senadores para su tratamiento. La aprobación permitirá que la misma se incorpore al Himnario Oficial.

 

Thierry Calderón de la Barca es dramaturgo, poeta, narrador y pedagogo de teatro. Es docente de la Escuela Nº 1 "Juana Manso" y en el Colegio Polimodal "Presidente Hipólito Irigoyen". Tiene en su haber premios nacionales e internacionales y diversas publicaciones, siempre referidas a la temática regional y sus personajes. Y fue el autor de la letra de la marcha.

 

Silvia Romero es bachiller con orientación docente, Profesora de Música en Enseñanza Primaria, Profesora Secundaria en especialización de piano y Post-título en Educación Musical, títulos docentes obtenidos dentro y fuera de la provincia. Es la compositora de esta esta canción patria en honor a Manuel Belgrano. Ejerce en las Escuelas Técnicas Nº 1 "Juana Manso" y Nº 2 "Bernardino Rivadavia", como así también en San Luis del Palmar.

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

El reconocimiento Hacedores del Bien Común se otorga a los ciudadanos y ciudadanas y ONGs que contribuyen a la sociedad, con actividades solidarias y creativas.

Seguir leyendo

Sociedad

Valdés firmó un acuerdo con el intendente de Ituzaingó por regalías de Yacyretá

“HACEDORES DEL BIEN COMÚN”

Publicado

el

El gobernador Gustavo Valdés firmó un acuerdo con el intendente de Ituzaingó, Eduardo Burna. El mandatario provincial informó que la rúbrica se vincula a "una deuda histórica de la Nación" por las regalías de Yacyretá. De este modo, "finalizamos con 10 años de gestiones para que reconozcan un derecho de Corrientes", sostuvo luego, indicando que también hará lo propio con Isla Apipé y Villa Olivari.


“Es loable el trabajo que desempeñaron estos docentes al destacar la figura de uno de nuestros próceres, un hombre inmenso como fue el General Manuel Belgrano, que en 1810 durante la campaña hacia el Paraguay pasó por Corrientes y fundó dos pueblos: Curuzú Cuatiá, Concepción de Yaguareté Corá”, expresó Canteros y destacó “la creatividad y el compromiso de Thierry Calderón de la Barca y Silvia Romero, de crear una marcha para homenajearlo”.

 

Durante el acto de entrega de la distinción los autores intercambiaron sus experiencias y anécdotas del proceso creativo y la repercusión que ha tenido. También se refirieron a las experiencias y desafíos en el ámbito educativo durante este año y las dificultades por las que atravesaron los alumnos y sus familias en momentos de pandemia.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Vale recordar que la marcha “Forjado en bronce y macerado en plata”, que ya tiene media sanción de la Cámara de Diputados, se encuentra en la Cámara de Senadores para su tratamiento. La aprobación permitirá que la misma se incorpore al Himnario Oficial.

 

Thierry Calderón de la Barca es dramaturgo, poeta, narrador y pedagogo de teatro. Es docente de la Escuela Nº 1 "Juana Manso" y en el Colegio Polimodal "Presidente Hipólito Irigoyen". Tiene en su haber premios nacionales e internacionales y diversas publicaciones, siempre referidas a la temática regional y sus personajes. Y fue el autor de la letra de la marcha.

 

Silvia Romero es bachiller con orientación docente, Profesora de Música en Enseñanza Primaria, Profesora Secundaria en especialización de piano y Post-título en Educación Musical, títulos docentes obtenidos dentro y fuera de la provincia. Es la compositora de esta esta canción patria en honor a Manuel Belgrano. Ejerce en las Escuelas Técnicas Nº 1 "Juana Manso" y Nº 2 "Bernardino Rivadavia", como así también en San Luis del Palmar.

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

El reconocimiento Hacedores del Bien Común se otorga a los ciudadanos y ciudadanas y ONGs que contribuyen a la sociedad, con actividades solidarias y creativas.

Seguir leyendo

Sociedad

El Consejo Hídrico Federal prorrogó la elección de autoridades

“HACEDORES DEL BIEN COMÚN”

Publicado

el

Se realizó de manera virtual, la Asamblea Ordinaria N° 36 del Consejo Hídrico Federal (COHIFE) donde se aprobó la propuesta de prorrogar la elección de autoridades 2020-2021 hasta la próxima Asamblea Ordinaria de mayo de 2021, donde la provincia de Corrientes integra el Comité Ejecutivo.


“Es loable el trabajo que desempeñaron estos docentes al destacar la figura de uno de nuestros próceres, un hombre inmenso como fue el General Manuel Belgrano, que en 1810 durante la campaña hacia el Paraguay pasó por Corrientes y fundó dos pueblos: Curuzú Cuatiá, Concepción de Yaguareté Corá”, expresó Canteros y destacó “la creatividad y el compromiso de Thierry Calderón de la Barca y Silvia Romero, de crear una marcha para homenajearlo”.

 

Durante el acto de entrega de la distinción los autores intercambiaron sus experiencias y anécdotas del proceso creativo y la repercusión que ha tenido. También se refirieron a las experiencias y desafíos en el ámbito educativo durante este año y las dificultades por las que atravesaron los alumnos y sus familias en momentos de pandemia.

 

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

Vale recordar que la marcha “Forjado en bronce y macerado en plata”, que ya tiene media sanción de la Cámara de Diputados, se encuentra en la Cámara de Senadores para su tratamiento. La aprobación permitirá que la misma se incorpore al Himnario Oficial.

 

Thierry Calderón de la Barca es dramaturgo, poeta, narrador y pedagogo de teatro. Es docente de la Escuela Nº 1 "Juana Manso" y en el Colegio Polimodal "Presidente Hipólito Irigoyen". Tiene en su haber premios nacionales e internacionales y diversas publicaciones, siempre referidas a la temática regional y sus personajes. Y fue el autor de la letra de la marcha.

 

Silvia Romero es bachiller con orientación docente, Profesora de Música en Enseñanza Primaria, Profesora Secundaria en especialización de piano y Post-título en Educación Musical, títulos docentes obtenidos dentro y fuera de la provincia. Es la compositora de esta esta canción patria en honor a Manuel Belgrano. Ejerce en las Escuelas Técnicas Nº 1 "Juana Manso" y Nº 2 "Bernardino Rivadavia", como así también en San Luis del Palmar.

Publicidad
Invitanos un café en cafecito.app

 

El reconocimiento Hacedores del Bien Común se otorga a los ciudadanos y ciudadanas y ONGs que contribuyen a la sociedad, con actividades solidarias y creativas.

Seguir leyendo
Publicidad

Más vistos