El río Corriente, ubicado en jurisdicción de la provincia de Corrientes,  forma parte  de la cuenca hidrográfica del río Paraná. Nace de la laguna Itatí, la más austral de los Esteros del Iberá, y funciona como desagüe natural del humedal.

 

Su curso recorre desde el noreste hacia el sudoeste de la provincia, desembocando finalmente en el Paraná cerca de la ciudad de Esquina.

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Tomando como línea divisoria la Laguna del Iberá y su prolongación en el río Corriente,  de nordeste a sudeste, es posible separar la provincia de Corrientes,  en dos regiones de características peculiares: la zona occidental más árida y la zona oriental, de características más similares al relieve entrerriano.

 

En la actualidad, es escasa la información que se dispone respecto de la calidad mineral de las aguas del río Corriente.

 

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En ese sentido, un trabajo realizado por investigadores de la Cátedra de Química Analítica de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE (FACENA) y del Conicet, logró caracterizar muestras del río Corriente a través de su composición mineral.

 

En la investigación, se estudió la presencia de los minerales  boro (B), calcio (Ca), cobalto (Co), cobre (Cu), hierro (Fe), potasio (K), magnesio (Mg), manganeso (Mn), molibdeno (Mo), sodio (Na), níquel (Ni), silicio (Si) y cinc (Zn) (B, Ca, Co, Cu, Fe, K, Mg, Mn, Mo, Na, Ni, Si y Zn), mediante el uso de técnicas de análisis exploratorio de datos.

 

La base de datos de resultados multielementales, determinados mediante Espectrometría de Masas con Plasma Acoplado Inductivamente (ICP-MS), corresponde a 25 muestras tomadas en 4 puntos geográficos a lo largo del curso del río, en 5 momentos diferentes durante un periodo de dos años, y se complementa con los datos de caracterización fisicoquímica que se registraron durante ocho años consecutivos en cuatro puntos a lo largo del río.

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Así, en primer término se utilizó análisis de componentes principales (ACP) con el objeto de representar las variaciones presentes en un espacio de dimensiones reducidas.

 

De acuerdo a lo observado, el gráfico de scores correspondiente a las dos primeras componentes principales (82,2% de la varianza total) muestra una fuerte influencia del origen geográfico en la distribución de estos.

 

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Dicha tendencia pudo confirmarse mediante un análisis de conglomerados, que es una técnica estadística multivariante que busca agrupar elementos (o variables) tratando de lograr la máxima homogeneidad en cada grupo y la mayor diferencia entre los grupos.

 

Las técnicas de análisis exploratorio de datos permitieron observar la presencia de agrupamientos debido a los niveles de los elementos químicos determinados a través de la Espectrometría de Masas con Plasma Acoplado Inductivamente  (ICP-MS) en las muestras.

 

Así lo explicó la Dra. Lucía Moresi, tesista a cargo del estudio bajo la dirección del Dr. Roberto Pellerano, quien destacó que el estudio posibilitó aportar al conocimiento del río Corriente en cuanto a su composición mineral y la variación de dichos componentes.

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Se logró generar una herramienta que permite tomar como precedente el estado del cuerpo de agua en vistas de nuevos proyectos productivos en la zona de influencia del mismo que pudieran afectar la naturaleza del río o de su cuenca.

 

Este análisis pormenorizado de la composición desde el punto de vista temporal y espacial aplicando técnicas estadísticas de minería de datos como es el análisis de CART y RF (random forest) deja un instrumento que permite identificar muestras de agua según su procedencia por comparación con otros cuerpos de agua de la provincia.

 

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Sostuvo que el río Corriente, pese a no ser un curso de agua de grandes dimensiones, reviste relevancia por constituir el desagüe natural de los Esteros del Iberá y además por su vínculo con el río Paraná al ser afluente del mismo.

 

“La caracterización físico química del río Corriente contribuye a su reconocimiento e identificación dentro del sistema hídrico correntino” expresó Moresi, quien realizó su tesis de formación doctoral en el estudio de este río.

 

La investigadora agradeció el acompañamiento de la Universidad Nacional del Nordeste y de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE (FACENA) en la concreción del estudio.

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