Nacionales
La otra cara del conflicto. Los argentinos que no entraron al canje
“HOLDOUTS” CRIOLLOS
Pierino Garrafa lleva 13 años esperando cobrar por haberle prestado al Estado argentino. Es contador, vive en Caballito y antes del default de fines de 2001, llevaba dos décadas de ahorros depositados en títulos públicos locales. Por una sugerencia de su banco, el Provincia, suscribió los Global 2017. “Los empleados del Provincia me dijeron que tenía legislación afuera, en Nueva York y les hice caso. Estaba invirtiendo mi plata en prestarle a mi país, no creo que eso me convierta en buitre”, enfatiza.
(www.clarin.com) Con la decisión de la Corte Suprema estadounidense de confirmar los fallos del juez Thomas Griesa, un grupo de ahorristas argentinos quedó en condiciones de pedirle al Gobierno argentino que les pague lo que les deben. “Tenía mi dinero invertido en la Argentina, creí en el país y me estafaron”, agrega Horacio Vázquez, quien se encuentra en la misma situación legal que Garrafa.
Ambos son argentinos que tenían deuda pública de su país y quieren percibir lo suyo, sin ninguna relación con los fondos especulativos. “Un estudio de abogados locales nos contactó con abogados de Estados Unidos”, detalla Vázquez, que antes fue tesorero de la asociación “Damnificados por la pesificación y default”, en la que Garrafa era presidente.
Las historias de Garrafa y Vázquez también podrían ser la de los miles de ahorristas que tenían plazos fijos y, una mañana, amanecieron con que un 70% de sus ahorros se había evaporado. La diferencia es que ellos esperaron que algún juez les prestara atención y escuchara sus argumentos.
Lejos de los buitres, con residencia en Buenos Aires, sin ninguna vida de lujo ni nada que se le parezca, son dos personas que quisieran recuperar lo que era de ellos. Saben que el accionar de los abogados de los fondos los benefició, pero habían iniciado sus causas judiciales mucho antes, hace más de 10 años. Con los fallos de Griesa, quedaron habilitados para cobrarle al Estado una vez que pague o arregle lo que debe.
Garrafa consiguió “sentencia firme” para que le abonen por sus títulos públicos en la Argentina. La Corte Suprema rechazó ese pago. Corrió mejor suerte en Nueva York, donde también obtuvo sentencia y todo indicará que el Estado argentino sí tendrá que cumplir. “Yo tampoco podía creer que la Corte Suprema de Estados Unidos decidiera no tomar el caso, luego del terrible lobby internacional para que lo hiciera”, puntualiza Vázquez.
“Tengo alegría y sorpresa por encontrar que quedan lugares donde la Justicia es independiente del poder político. Me da esperanza en la existencia de verdaderas repúblicas donde un ‘don nadie’ no es menos que un Presidente”, señala.
En el derrotero de todos estos años, Garrafa y Vázquez pasaron vaivenes que les dejaron sabor amargo. “Me junté con casi todo el arco político, con Ricardo López Murphy, Mauricio Macri, Elisa Carrió. Pero el único que me prestó atención y quiso hacer algo fue Jorge Altamira (dirigente del Partido Obrero). Él nos quiso hacer entrar al Congreso cuando se trataba uno de los canjes de la deuda, porque quería que se escuchara nuestra posición”, recuerda Garrafa.
“Tuve que aguantar mucho, pero ¿sabés la de jubilados que tuvieron que vender sus bonos de deuda argentina a mal precio para pagar sus medicamentos?”, se indigna Vázquez. Garrafa asegura que el exsecretario de Finanzas Guillermo Nielsen lo llamó –en tono poco amistoso– para desalentarlo de una pelea judicial y que adhiriera a un canje de deuda.
“Trabajé en Price Waterhouse, en el Banco Ciudad, en el Finansur. Toda mi vida fui empleado”, reconstruye Garrafa. “En el Banco Central fui Inspector de Bancos. En la Superintendencia de Entidades Financieras Roberto Feletti tenía mi mismo puesto. El luego fue presidente del Banco Ciudad, hoy es senador del Frente para la Victoria y estuvo en la comitiva que fue a Estados Unidos para que la Corte decidiera aceptar el caso”.
“En mi época, yo laburaba y él estaba en la gremial Interna como representante de La Bancaria”, reconstruye Garrafa, que se define como un “laburante”. “Creía que sabía ahorrar, porque es lo que hice 20 años. Pero mirá todo el tiempo que me tomó la posibilidad de poder cobrar.
“No hice nada mal ni ilegal”, bromea entre autocrítico con sus decisiones y enfadado por un país que dejó un millón de argentinos heridos en sus bolsillos tras el default.
El presidente chino Xi Jinping visitó la Rosada. Se anunció un mecanismo para reforzar las reservas del BCRA. También habrá créditos para represas y el Belgrano Cargas. China quiere ganar peso comercial y financiero en la región. Acuerdos que generan deudas.
(www.clarin.com) Fueron palabras del presidente Xi Jinping: este es el año del Caballo, y la Argentina es conocida -dijo- como el país de los caballos. Por eso, formuló sus deseos de que sea un “caballo galopante” la profundizada relación estratégica con la Argentina.
De estilo muy sobrio, con esta gráfica alusión al calendario chino sorprendió Xi a la hora de los discursos, tras encabezar con Cristina Kirchner el acto de firma de acuerdos bilaterales por más de US$ 7 mil millones, que aportarán los chinos para financiar obras de infraestructura.
Estos aportes eran muy ansiados por el Gobierno, con problemas para financiarse, caída de reservas y el fallo adverso de la Justicia de EE.UU. que obliga a pagarle a los fondos buitre y al menos demoró el plan oficial de “regreso al mundo” para buscar fondos en los mercados internacionales de crédito.
Los acuerdos con China incluyen, tal como se había anticipado, US$ 2.099 millones para revitalizar el Belgrano Cargas (el Estado nacional aportará otros US$ 370 millones); y US$ 4.714 millones para la construcción de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic en Santa Cruz, obras largamente postergadas y acaso último megaproyecto de la era kirchnerista. El otro acuerdo con números a la vista es el aporte chino para la compra de 11 buques de dragado, por 423 millones de dólares.
En total se suscribieron una veintena de acuerdos, y una declaración conjunta que elevó el vínculo bilateral a “asociación estratégica integral”, un estatus que China sólo tenía en América latina con Brasil, México y Perú, y supone la decisión de profundizar la cooperación mutua.
A estos acuerdos se sumó más temprano –sin presencia de los presidentes– la firma de un segundo swap (el primero fue en 2009), un intercambio de yuanes y pesos por US$ 11 mil millones que podrán usarse para reforzar las reservas del Banco Central. Cristina celebró este punto en un momento de “ataques especulativos” de los fondos buitre.
Xi Jinping llegó a las 17.20 a la Casa Rosada, donde fue recibido con honores militares por los Granaderos. Caminó por la alfombra roja y en el Salón Blanco lo aguardaba Cristina para el saludo, los himnos nacionales y la presentación de delegaciones. Luego pasaron al despacho presidencial, donde estuvieron reunidos a solas y luego sumaron a sus ministros, durante una hora.
La última visita de un presidente chino fue la de Hu Jintao, en 2004. Allí se estableció una asociación estratégica, se firmaron memorándums de entendimiento y el gobierno kirchnerista había generado un singular clima de furor previo al propalar la versión de que llegarían US$ 20 mil millones, que nunca se concretaron.
Ayer, el presidente Xi tuvo su inmersión en el estilo de los actos K: hubo una videoconferencia con El Calafate, por las represas santacruceñas, con el gobernador Daniel Peralta; y otra con Maciel, Santa Fe, donde el secretario de Transporte Alejandro Ramos y Wang Hong, vicepresidenta de la empresa estatal china que canalizará los créditos, hablaron de las obras del Belgrano Cargas.
La jornada terminó con una cena en el Museo del Bicentenario. A la hora de los regalos volvieron los caballos. Cristina mostró las fotos –“No podíamos traerlos acá”, se excusó– de los que regaló. A la primera dama china, un caballo de silla, y a Xi, uno de polo. “Ambos son reproductores, sementales”, enfatizó. “Ahora sí, brindo por el año del Caballo de Madera, a brindar por la Argentina, por la amistad con China”, cerró la Presidenta antes de chocar copas con Xi.
Nacionales
Municipio de la Costa. Otra denuncia contra Boudou de sus días como funcionario municipal
CASAS QUE NUNCA SE REALIZARON
La denuncia tomó nuevo impulso cuando en las últimas semanas la oposición del Concejo Deliberante de la Municipalidad de la Costa impulsó una denuncia contra Amado Boudou (secretario de Hacienda local en 2005), Juan de Jesús (por entonces intendente y actual diputado provincial) y su hijo Juan Pablo (ahora a cargo de la comuna) por presunta “defraudación al Estado nacional”.
(www.perfil.com) Según reseña la publicación La Tecla, en 2005 se firmó un convenio para la construcción de viviendas con Nación, el cual fue firmado por los funcionarios mencionados, entre ellos vicepresidente procesado en la actualidad por la causa Ciccone.
La licitación la ganó la firma Cantera FC y debía terminar la obra en 2006; pero para agosto de 2007 se había abonado más de dos tercios del monto total y más de la mitad de las casas estaba sin terminar, según consigna la revista.
Proveedores de Cantera FC denunciaron haber recibido cheques sin fondos. Tras esto, la empresa entró en convocatoria de acreedores pese a presuntamente haber cobrado hasta ese momento unos 24 millones de pesos.
Cantera cedió los créditos al Banco Hipotecario, y éste emprendió una causa judicial contra el municipio para cobrar la supuesta deuda de 1.930.000 pesos” por las casas que nunca se terminaron”, dicen desde la oposición. Y éste fue el puntapié para su tratamiento y denuncia la cual fue impulsada por Marcos García, concejal del bloque A toda Costa.
Según García, Boudou “fue quien firmó los cheques, que además no estaban a la orden, cuando los cheques en la administración pública deben estar cruzados” y porque “él firmó eso y firmó los cheques por 24 millones de pesos”, sostuvo García. Los denunciantes buscan investigar hasta qué punto llegaba la relación entre Cantera FC y el vice.
Familiares acusaron al canciller por negociar en secreto con Irán y dijeron que “nuestros muertos piden justicia, no acuerdos”. Del piquetero K aseguraron que “debería ocupar un banquillo ante la Justicia”. Y criticaron que tenga espacios en TV y radio.
(www.clarin.com) El vicepresidente de la AMIA, Thomas Saiegh, exigió hoy al Gobierno nacional “medidas concretas” para conseguir la captura de los iraníes acusados del atentado contra la mutual judía AMIA y que “sean sometidos a juicio en Argentina”.
También reclamó al Congreso de la Nación “la derogación expresa” de la ley que habilitó el memorándum con Irán, que fue declarado inconstitucional por la Cámara Federal. Fue el primer orador de un acto que incluyó duras críticas al canciller Héctor Timerman y al piquetero oficialista Luis D’Elía.
Luego de Saiegh habló el periodista Alfredo Leuco, quien comenzó diciendo que “los muertos no tienen ni paz ni justicia”. El conductor de Radio Mitre recordó diferentes historias de víctimas del atentado, como la de Sebastián, un niño de 5 años y repasó la evocación de sus compañeros en el colegio.
“La impunidad no es producto de un fenómeno natural sino producto de la ineficacia de ocho presidentes que pasaron y pasaron”, dijo Leuco. Y acusó al ministro Timerman por el memorándum con Irán.
“Será recordado como el canciller responsable del delito de lesa impunidad. Quedará grabado en la historia por esta traición al pueblo hebreo y argentino”. Y también le apuntó a Luis D’Elía, a quien acusó de antisemita.
Finalmente, habló el familiar Luis Czyzewski, quien perdió a su hija en la masacre. Czyzewski dijo que, “En cada una de nuestras casas hay una silla vacía”. Luego, criticó el acuerdo del Gobierno nacional con Irán y calificó de “mal gusto” al denominar ese arreglo como un memorándum de entendimiento.
“Señor ministro Timerman, si el memorándum fuera tan bueno ¿por qué lo negoció en secreto? Usted parece que no tuvo en cuenta que negociaba con un gobierno repudiado por la comunidad internacional”, fustigó el familiar. “Parece que para usted, señor canciller, esto no era trascendente. El gravísimo error diplomático de acordar con Irán no es gratuito”, indicó.
Czyzewski agregó que, “Nuestros muertos piden justicia, no acuerdos”. Y se preguntó: “¿Por qué nunca se denunció a Irán como un país terrorista?”. También criticó al gobierno menemista y dijo que “´¿Cómo la Justicia no pudo encontrar pruebas contra Corach?”, en referencia al ex ministro del Interior de Carlos Menem, bajo cuyo mandato sucedió el atentado.
Y criticó que Luis D’Elía tenga espacios en radio y televisión para difundir su pensamiento antisemita. “D’Elia debería ocupar un banquillo ante la Justicia”. Y también dijo que en el programa “Fútbol para Todos” no mostró un homenaje hecho por las víctimas de la AMIA y agradeció, por el contrario, a los clubes Boca y Estudiantes.
Además, Czyzewski pidió a Julio Schlosser (presidente de la DAIA) que aclare los contactos que tuvo con Timerman antes de la firma del memorándum de entendimiento con Irán. Y también añadió que, “Apoyamos la creación de una CONADEP para la causa AMIA”.
Minutos antes de las 11, se emitió un mensaje en video grabado del Papa Francisco.
El año pasado los cuestionamientos pasaron por el memorándum firmado por el Gobierno con Irán, que prometía poder tomarles declaración a los funcionarios iraníes sospechosos de ser autores intelectuales de la masacre pero a cambio de hacer caer las circulares rojas de Interpol. El pacto fue declarado inconstitucional por la Cámara Federal y el Gobierno apeló a la Corte empantanando la polémica idea de Cristina.
Con el sonar de la sirena, comenzó a las 9.53 el acto central para recordar a las víctimas del atentado que en 1994 destruyó la sede de la AMIA, provocando la muerte de 85 personas y más de 300 heridos.
Bajo el lema “Ni un día de olvido”, se recordó a las víctimas del ataque perpetrado hace 20 años en la mutual judía ubicada en Pasteur 633, en pleno barrio de Once. Mario Pergolini fue el maestro de ceremonias.