Opinión
Ecoterrorismo en acción: El falso trasvase del Iberá y los ataques al Centro Atómico Ezeiza
CARLOS ANDRÉS ORTIZ (*)
Resulta notorio que las ideas como las expuestas en este artículo son calificadas como “inconvenientes” o “políticamente incorrectas” incluso en determinados ámbitos de las Universidades Nacionales Argentinas, generando desde censuras encubiertas a persecuciones descarnadas a los “díscolos incorregibles” que nos atrevemos a pensar por nuestra cuenta y con clara orientación nacional; ¡y lo afirmo con conocimiento de causa!.
ACERCA DEL “ECOTERRORISMO Y SUS METODOLOGÍAS Seguramente la mayoría de los lectores recordará las rimbombantes denuncias de los “catastróficos efectos potenciales del trasvase de agua que “estaría” produciendo la elevación de la cota de Yacyretá sobre el ecosistema del Iberá”. También debe acordarse del caso de “las algas verdosas azuladas del Río Paraná que “serían” consecuencia del embalse de Yacyretá. A ello puede sumarse la presunta y nunca demostrada “extinción de nueve especies de felinos, entre ellos el Yaguareté, que “sería” consecuencia de ciertos desmontes parciales de las yungas, que son territorios selváticos en zonas montañosas del noroeste argentino. En Misiones hace años soportamos las estentóreas y nunca demostradas “afirmaciones” de presuntos “desastres ambientales” que se les endilgan a represas hidroeléctricas, efectuadas por unos pocos pero muy ruidosos y activos militantes de ONGs y grupos de neto corte ultra ecologista. Recientemente se desató una fuerte campaña mediática, con nunca científicamente probadas denuncias de “contaminación radioactiva” en las aguas subterráneas cercanas al Centro Atómico Ezeiza. Adviértase que las acusaciones y denuncias por regla general son hechas “a título preventivo”, (sería, habría, podría, etc.), y terminan desvaneciéndose en la nada; pero las constataciones de las falsedades de aquellas denuncias usualmente “tienen poca prensa”, por lo que sus desmentidas pasan casi desapercibidas; y el daño de las mentiras sistemáticas no se repara en el subconsciente colectivo ni en las creencias populares. Ese método de las “denuncias” escandalosas, con características fuertemente emotivas pero huérfanas de todo sustento científico, y en muchos casos totalmente reñidas con la más elemental lógica, es usual en los procedimientos del “ecoterrorismo”; al cual podemos definir como el terrorismo ideológico basado en falsas premisas ecologistas, y ampliamente fogoneado por medio de amplias y muy costosas campañas mediáticas, con fuertes contenidos subliminales. Esas campañas mediáticas, con gran preponderancia televisiva, funcionan como “trampas cazabobos” creando la confusión mental en la gente, al instalar como “verdades científicas reveladas” a burdos dogmatismos incoherentes, o -lo que es peor aún-, a verdades a medias, que son la más nociva forma de desinformación sistemática masiva. Aclaremos que el concepto de “trampas cazabobos” tiene origen militar, y se refiere a los explosivos u otros artefactos ocultos, que más apropiadamente deberían llamarse “caza incautos”. El tema es que las campañas de los “ecoterroristas” se basan en estruendosas manifestaciones con gran escenografía prefabricada; el uso de rimbombantes “frases hechas” de alto impacto emocional pero bajo o nulo sustento científico; en la instalación de miedos subliminales; y otras “lindezas” por el estilo. EL “TRASVASE” DEL AGUA AL IBERÁ Después de los masivos escandaletes que con mucha prensa afirmaban la “culpabilidad” de Yacyretá en el incremento del nivel de la laguna y esteros circundantes del Iberá; una intensa sequía en la zona permitió poner fin al mito: el nivel del Iberá se redujo sustancialmente -por la sequía- mientras el nivel del embalse permanece constante. Un informe del Departamento de Hidráulica de la Facultad de Ingeniería de la UNNE (Resistencia) lo afirma categóricamente, encontrando incluso serias inconsistencias técnicas en el informe elaborado por la Universidad del Centro de Buenos Aires (UNICEN), auspiciado por grupos ecologistas. Tal como lo afirmó y sostuvo técnicamente el veterano, experimentado y luchador Ing. Manuel Vassallo, el virtual taponamiento del cauce del Río Corrientes -que es el principal desaguadero del sistema del Iberá-, debe ser considerado la principal causa del anterior aumento de los niveles hídricos del Iberá. En forma similar, con conocimientos empíricos de experimentado navegante y lúcido analista, opinó nuestro coprovinciano por adopción, Don Osvaldo Vogler. Pero mientras tanto el incidente fue pieza clave para demorar el llenado total del vaso de la presa de Yacyretá, impidiendo la generación del 40 % de la capacidad instalada (aproximadamente 7.500 millones de KWh año) favoreciendo por ende a las generadoras termoeléctricas (hoy casi totalmente en manos extranjeras) y a sus proveedores de gas (también hoy en manos foráneas). Queda en claro que la generación termoeléctrica (con gas o petróleo) es mucho más contaminante que la limpia generación hidroeléctrica… pero ese “detalle” no parece importarle a los ecoterroristas y a los políticos de bajo vuelo que los acompañan. LAS ALGAS “VENENOSAS” DEL EMBALSE DE YACYRETÁ Este “globo de ensayo del ecoterrorismo” también se desinfló prontamente, a la luz de estudios científicos serios, como los realizados por especialistas de la UNaM, y que también fueran desmentidos por la añosa experiencia de Don Vogler, quien también había observado esas formaciones algales en determinadas épocas del año en el Río Paraguay… en el que no hay represas. LOS “DESASTRES AMBIENTALES” DE LAS REPRESAS HIDROELÉCTRICAS En muchos de mis numerosos artículos precedentes, así como en mis cinco libros referentes a la temática energética, me he referido abundantemente al tema; por lo que, en mérito a la brevedad, a ellos me remito. La peor de las contaminaciones es la generada por la miseria extrema (caso Haití por ejemplo), para salir de la miseria necesitamos desarrollarnos, la energía eléctrica es un prerrequisito necesario pero no suficiente para el desarrollo socioeconómico. La generación hidroeléctrica es -por lejos- la de menor impacto ambiental. LA CONTAMINACIÓN DE LAS AGUAS SUBTERRÁNEAS DE EZEIZA Fue el último “circo mediático” montado por Greenpeace, del cual prontamente quedó demostrada su falsedad. Prácticamente toda el agua dulce del mundo está impregnada con dosis mínimas -inocuas- de diversos minerales radioactivos, como el uranio, el radón y otros que existen abundantemente en la corteza terrestre. Por ejemplo ¿sabía Ud. que el cemento es radioactivo -con muy baja intensidad-? ¿Se mudará ahora Ud. a una choza o a una caverna, o seguirá viviendo en su casa o departamento construido con abundante cemento?Los propios hijos de los calificados profesionales y técnicos del Centro Atómico Ezeiza (C.A.E.), durante el día permanecen en la guardería de la institución. ¿Estarían allí si el C.A.E. fuese peligroso, o sus padres les buscarían otra guardería alejada? Este ataque al Centro Atómico Ezeiza es en realidad otro intento de Greenpeace por entorpecer el ya ratificado acuerdo de venta de tecnología nuclear a Australia, operando claramente esa “multinacional de la ecología” al servicio y en forma muy funcional a los intereses de otros entes atómicos del Primer Mundo, a los que sin duda molesta la competencia que representa el excelente grado de desarrollo científico e industrial del Sector Nuclear Argentino. Pero lo que en realidad buscan ¡y exigen! los cipayos de Greenpeace, es nada menos que desmantelar todo el Sector Nuclear Argentino, liquidando de ese modo el más importante centro de investigación pura y aplicada del país, con todas sus instalaciones industriales de altísimo nivel tecnológico. Todo ello perfectamente “en línea” con los cultores del neoliberalismo a ultranza y de la consecuente “globalización salvaje” que pregonan economistas, politicólogos, periodistas y políticos afines a esa filosofía; sea esa afinidad por espurias conveniencias, por domesticación cultural o por conformismo y derrotismo espiritual. (*) Recibido por Corrientes al Día del Contador Carlos Ortiz, que es docente e investigador de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Misiones.
Dijo en San Juan el presidente Fernández: “lo que nos hace evolucionar o crecer no es el mérito, como nos han hecho creer en los últimos años, porque el más tonto de los ricos tiene muchas más posibilidades que el más inteligente de los pobres”.
Esto es tan falso, tan terriblemente insultante para la inteligencia, que es difícil decidir por dónde empezar a analizarlo. Sólo diré que Steve Jobs (Apple), Bill Gates (Windows), Jeff Bezos (Amazon) y Marcos Galperin (Mercado Libre), son algunas de las fortunas más grandes del mundo y de Argentina, y NINGUNO fue hijo de rico. Este pelotudismo socrático y retrógrado ha sido totalmente superado en los países desarrollados… ¡Y PRECISAMENTE PORQUE LO SUPERARON SON DESARROLLADOS!
Luego invocó a Alberdi y Sarmiento, reinterpretándolos con un pensamiento tan retorcido que los vuelve irreconocibles. Dijo admirarlos porque “vislumbraron la importancia de la educación pública, que nada es más importante que el conocimiento humano” y del sanjuanino aseguró que “en un gesto inigualable de igualdad, resolvió que todos los que estudian en la escuela pública calcen un guardapolvo blanco para que las diferencias sociales allí donde se aprende no aparezcan. Con todo eso nos dijo que el estado debe estar muy presente en el desarrollo humano y que finalmente lo que más vale es la igualdad, es propender a un sistema más igualitario”.
Pobres Alberdi y Sarmiento. Si pensamos cuales referentes históricos argentinos estuvieron absolutamente en contra de la intromisión del estado (que debía ser pequeño) en el quehacer cotidiano de los ciudadanos, fueron sin dudas estas dos inmensas figuras de nuestra patria. Hacer semejantes distorsiones de su pensamiento es una ofensa a sus memorias y, como se hacía en la escuela, debería lavarse la boca con jabón para limpiar sus palabras.
Alberdi decía que “la omnipotencia del Estado es la negación de la libertad individual” y que “la grandeza del vecino, forma parte elemental e inviolable de la nuestra”, LO OPUESTO al igualitarismo y el desconocimiento del mérito.
¿Y qué pensaba Sarmiento?, al que dijo admirar. El sanjuanino dijo: “las cumbres se alcanzan doblando el empeño” y “toda la historia de los progresos humanos es la simple imitación del genio”; Don Domingo era un ferviente defensor del mérito, concepto que el señor presidente denigra.
Es increíble que en la actualidad, con lo fácil que es conocer la realidad de otros países, todavía existan personas “educadas” (en realidad son apenas instruidas, la educación implica pensamiento crítico algo que les es ajeno) que sean tan ciegas como para dejarse engañar así.
El presidente habla de defender el federalismo y a las provincias del “pulpo” del puerto, cuándo el mayor héroe de esta gente fue Rosas, quien prohibió los puertos del Paraná para que todo el comercio exterior pasara por Buenos Aires, empobreciendo a las otras provincias. Obsesión rosista por el monopolio del puerto porteño que condujo a la muerte a valerosos patriotas en la Vuelta de Obligado, sacrificio disfrazado con la mentira de la “defensa de soberanía”.
Valga la apostilla: ese fue el mismo Rosas que le quitó los sueldos a los docentes de las escuelas y universidades estatales, hundiendo en la ignorancia a los pobres y yendo en contra de la tan mentada “igualdad de oportunidades” con la que se llenan la boca.
¿Habla del federalismo y de trato igualitario para todas las provincias?, cuando el peronismo fue el mayor promotor del crecimiento del conurbano bonaerense y que le otorgó tantos subsidios a la luz, el gas y a los combustibles, que hacía que en Buenos Aires se pagara hasta 5 veces más barato los servicios públicos que en el resto del país. ¿En serio? ¿Se puede ser tan caradura? Y lo peor, ¿se puede ser tan idiota como para creerles?
También dijo Fernández: “lo que uno más debería desear como argentino, es que cada argentino tenga la oportunidad de nacer…”, ¿oportunidad de nacer?, ¿de qué oportunidad de nacer habla quien defiende el aborto?, ¿se puede ser más cínico y contradictorio? “…Y de morirse feliz después de haber vivido bien, en la provincia donde ha nacido”, ¿morirse feliz?, ¿Cómo Solange que murió sin ver a su padre?, ¿o Facundo Astudillo?, ¿o Franco Martínez?, ¿o Franco Isorni?, ¿o Luis Espinoza?, todos desaparecidos y muertos en democracia en este 2020.
Entiendo (no comparto) que los que “están prendidos” defiendan “el modelo”… ¿pero el resto?, ¿el laburante que deja más de la mitad de su sueldo en impuestos para mantener punteros y para que le den por sus impuestos la porquería de salud, educación, seguridad y justicia que tenemos?, ¿el profesional que como universitario debería ser capaz de ver más allá de las mentiras de los demagogos? Cómo decía Sarmiento y se aplica a los “educados” que egresan de la universidad: “era el que más sabia… Pero el que menos entendía”.
Lo cierto es que a decir del gran sanjuanino: “la ignorancia es atrevida”, pero aún es más atrevida la avaricia, la soberbia y el despotismo de quienes conducen hoy el destino de nuestra patria y que lejos están de seguir el siguiente principio rector del cuyano: “fui criado en un santo horror por la mentira, al punto que el propósito de ser siempre veraz ha entrado a formar el fondo de mi carácter y de ello dan testimonio todos los actos de mi vida”.
Quienes creemos en la Libertad, en la igualdad ante la Ley y no por la Ley, y en el Respeto por la vida y la propiedad del prójimo, no solo tenemos el deber ético y moral, sino también la impostergable necesidad de oponernos y manifestarnos en contra de los atropellos que se están cometiendo contra los argentinos y contra la República.
El momento es YA… antes de que terminen de hundirnos y de someternos, antes de que no quede nada por salvar.
(*) Rogelio López Guillemain
La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto profundo en nuestras sociedades. Además de la crisis sanitaria, ha afectado la educación, la vida social y los medios de subsistencia. A una economía difícil, esto lo ha profundizado aún más.
Para nuestros jóvenes muchos de estos impactos será a largo plazo y multidimensionales: Por ejemplo, 191 países han implementado el cierre de escuelas a nivel nacional o local, y 1,5 mil millones de personas no pueden asistir a la escuela ya que no disponen de tecnología básica para acceder a las plataformas educativas.
Sin embargo, hay muchos jóvenes liderando esta crisis y no se han quedado de brazos cruzados. Hay una Juventud que está apoyando el diseño y la ejecución de programas sociales pensando en caminos creativos y de respuesta.
También debemos destacar la variedad de emprendimientos que han surgido adaptando propuestas comerciales a estos nuevos tiempos donde se pudo ver la creatividad y el desarrollo de productores locales.
Es fundamental continuar apoyando estos proyectos para que tengan continuidad formulando estrategias competitivas, incentivando y se conviertan en micro empresas sustentables económicamente.
Sumar programas de recuperación en base a economías locales y ver como su fuerza creativa comienza a enriquecer a instituciones, proyectos sustentables y caminos nuevos para salir adelante.
Pienso que un camino de desarrollo es no solo fortalecer las economías regionales sino volver a los oficios, capacitarnos y tener herramientas prácticas para generar recursos propios.
Estamos atravesando un momento de reinvención muy grande y donde más que nunca necesitamos estar unidos, sacar nuestras fortalezas y trabajar juntos como sociedad pensando en lo que queremos construir, diseñando la sociedad futura, poniendo foco en nuestros recursos y liderar.
Es fundamental generar herramientas para crear una sociedad más igualitaria y solidaria y no solo como respuesta a la pandemia sino también pensando a largo plazo y abordando todos el compromiso de crear un cambio duradero.
Recuerda una crónica del diario perfil: “Eduardo Lorenzo Borocotó el 23 octubre de 2005 obtuvo una banca. Pero antes de asumir algo cambió. El 9 de noviembre visitó la Casa Rosada, acompañado por su hijo. ¿Con quién tenía cita? Con el actual presidente Alberto Fernández, quien era jefe de gabinete de Néstor Kirchner. Borocotó se reunió con los dos. A Kirchner no lo conocía. A Fernández, sí.
El mismo día del encuentro en la Rosada, Borocotó anunció su partida del bloque macrista: armó un mono-bloque independiente, afín al kirchnerismo. Alberto Fernández explicó la jugada: "Tenemos que ser amplios. Hay muchos votantes y dirigentes de ARI que están descontentos con Carrió, por ejemplo. Y nosotros estamos abiertos a recibirlos, así como a los radicales, peronistas y a todos los que crean en el proyecto del Presidente".
En nuestras democracias actuales, se debería empezar a pensar en que los ciudadanos, en vez de elegir a personas que encarnen proyectos, ideologías, o letras muertas de lo establecido en partidos políticos, votemos directamente, proyectos, propuestas, modelos o formas de hacer las cosas y que la ejecución de las mismas, pase a ser un tema totalmente secundario, esto sí podría denominarse algo que genere una revalidación de lo democrático, pero no estamos en condiciones de hacerlo actualmente, primordialmente porqué el gobierno de ese pueblo, está en manos de uno sólo, a lo sumo, en cogobierno por un legislativo (con flagrantes problemas en relación a la representatividad, que sería todo un capítulo aparte el analizarlo) y supeditado a un judicial, que siempre falla, de fallar en todas sus acepciones, liberar la opción de ese pueblo, para que elija su gobierno, mediante las ideas que se le propongan, sin que sea esto eclipsado por la figura de un líder o lo que fuere, en tanto y en cuanto siga siendo uno, recién podrá ser posible, cuando su vínculo con la vida y la muerte, no tenga que ser anatematizado mediante la creencia o no creencia, que como vimos son las dos caras de una misma moneda, en un ser único y todo poderoso, creador de este mundo y de todos los otros, los posibles como los imposibles.
La violencia del estado que en la actualidad se traduce en su sobre-presencia en ciertos sectores a costa de la ausencia del mismo en vastas áreas y bolsones, la sobreactuación de un supuesto sentir o hacer democrático, en donde sólo se ejerce una dudosa aclamatoria de mayorías (sistemas de preselección de candidatos cerrada, como internas que no se llevan a cabo, que transfieren el sentido de elegir por el de optar, entre quiénes ellos, de acuerdo a sus reglas disponen que tengamos que optar, es decir elegir condicionados) debería estar tipificado en la normativa, como uno de los delitos más flagrantes contra las instituciones y el pleno ejercicio de la libertad, de tal manera, la ciudadanía no tendría excusas como para no levantarse en puebladas, en manifestaciones que dan cuenta de la total y absoluta anomia, en que la incapacidad de cierto sector de la clase política nos puede volver a conducir en cualquier otro momento u oportunidad. Propuestas es lo que sobra, se precisa de predisposición de estos para hacerles sentir a la ciudadanía que algo determinan, con el pago de sus impuestos y con sus votos. En tiempos electorales, una práctica que debería ser desterrada y que es una muestra expresa del democraticidio, es la compra de votos, sea mediante una dádiva, prebenda, por intermedio de corte de chapas, dinero, mercadería, merca o lo que fuere, como de las mentiras flagrantes e inconsistentes las que ofrecen por doquier. Como también lo es la no sanción de los hechos de corrupción, o la dilación en demasía para resolver los mismos, perpetrados por hombres que hayan pertenecido al funcionariado público.
Si somos presa de políticos corruptos seguiremos encarcelados en el imperativo de una sociedad penalizada y penalizante para sancionar delitos y no para reconvertir conductas que no nos lleven a ellas.
Hasta aquí sí se quiere, nada nuevo bajo el sol, o desconocido para todos aquellos a quiénes, Alfonsín nos prometió que con “la democracia se educa, se come, se cura, no necesitamos nada más, que nos dejen de mandonear…” la nueva modalidad, de estas suertes de “democraticidios” que nos afectan, es que el poder unipersonal del ejecutivo nacional, pasó a un sistema, tal como lo definió un constitucionalista “vicepresidencialista” y por tanto, Alberto, el creador del “borocotismo”, tal como Víctor Frankenstein, pasó a ser víctima de su propia creación, de su mutación práctica de lo representativo.
En la aceleración, profundización o intensificación del cristinismo, camporismo o kirchnerismo recargado, en el que recayó Alberto, no quedaría otro espacio en la historia para él, que un título de un libro escrito por Miguel Bonasso, acerca de Héctor Cámpora; “El presidente que no fue”.
La mayoría que se construyó a tales efectos, con una propagación mayor que la de un virus desconocido y contagioso, se reconstituye con proverbial dinámica y en las próximas elecciones demostrará cuán cerca o lejos puede estar de un poder político, en la actualidad, “borocotizado”.
(*) Por Francisco Tomás González Cabañas.