Opinión
150 años no es poca cosa
HISTORIA FERROVIARIA
Tal vez para países con centenares o miles de años de historia 150 años no sea mucho. Pero para la Argentina, que aun no ha llegado a su segundo centenario, un siglo y medio de historia es mucho… es casi todo. Para bien o para mal. O ambas cosas a la vez, ya que la historia de los pueblos y las naciones cobra forma con todos sus hechos.
Nos gusta la historia como cimiento del porvenir; no nos gusta la mera nostalgia llorosa de lo perdido. Nos interesa el análisis crítico responsable; nos causa fastidio la superficialidad del pensamiento infundado. Respetamos enormemente a quienes siguieron sus vocaciones y nos legaron lo bueno; repudiamos a los mentirosos, oportunistas, caraduras y polizones, quienes causaron daños irreparables; o aunque fuesen reparables da igual. Así, el 29 y el 30 de Agosto de 2007 la Argentina cumple 150 años de historia ferroviaria… que no es tan argentina en realidad, ya que en ese momento Buenos Aires no formaba parte de la naciente Argentina. Tampoco hay pleno acuerdo con la fecha. ¿El 29 fue el viaje de prueba del primer tren y el 30 fue la inauguración? ¿O el 29 fue la inauguración y el 30 se inició el servicio regular? Los historiadores no se ponen totalmente de acuerdo. Es la historia argentina misma. Tal como este presente en el que se entremezclan prestigiosas y respetables personalidades de los ferrocarriles de la Argentina, con despreciables sujetos que no merecen honra alguna en la memoria ferroviaria nacional. Y sin embargo están allí, ocupando lugares protagónicos en la no tan magna celebración de 150 años de historia. Usurpando el lugar de dignos representantes excluidos sin explicación alguna… que puede ser lo más inexplicable. Hace muchos años el IAF tomó una decisión. En 1992 y 1993 trabajamos con el gobierno chubutense para evitar la desaparición de la célebre “Trochita”. Hoy funciona. En 1993 y 1994 trabajamos con Río Negro para evitar que la “Línea Sur” a Bariloche fuese cerrada. Hoy opera. Desde 1992 trabajamos con el gobierno santacruceño para evitar el levantamiento y procurar la rehabilitación del ramal de Puerto Deseado a Las Heras. Hoy permanece casi intacto y ya hay un pliego licitatorio para contratar las obras de rehabilitación. Entre 1993 y 1998 acusamos al gobierno de entonces de pretender destruir el sistema ferroviario de Retiro y sus magníficas estaciones. Hoy permanecen en operación y fueron restauradas. Desde 1999 trabajamos con gobiernos municipales de Mendoza, San Luis y La Pampa para evitar que el ramal Chamaicó a Bowen fuese levantado. Hoy formamos parte del primer Consorcio Ferroviario del país y estamos reabriendo su trazado en dos frentes, además de estar reconstruyendo un tramo de vía en San Rafael (desmantelado por ALL). Desde 1994 a 2007 realizamos 24 seminarios, congresos, encuentros y exposiciones profesionales sobre ferrocarriles en 11 ciudades argentinas. Tenemos en preparación 18 eventos desde 2007 hasta 2011 en 17 ciudades argentinas. Publicamos entre 1997 y 2001 la única revista ferroviaria profesional de Argentina e iniciamos los primeros boletines electrónicos (hoy copiados en exceso). Hoy estamos preparando una nueva publicación. En 1999 organizamos la única beca profesional internacional ferroviaria otorgada en la Argentina (Italferr). Creamos la primera universidad virtual ferroviaria argentina, hoy en proceso de implementación, mediante convenio con universidades internacionales. Generamos los primeros cursos de capacitación y formación ferroviaria básica, hoy en convenios de implementación con los Ministerios de Trabajo y de Desarrollo Social. Llevamos a los cuatro puntos cardinales del país los Encuentros Ferroviarios, iniciativa copiada ahora en casi todo el país, para honrar a los ferroviarios “olvidados” y para recrear el espíritu ferroviario argentino en cada rincón de nuestro suelo. En 2003 generamos “Encarrilando Argentina” como el único plan ferroviario integral hasta ahora presentado para la recuperación del sistema ferroviario argentino. 19 Convenios nacionales e internacionales. Más de 55 proyectos elaborados, gestionados y desarrollados. 250 estudiantes universitarios de 5 carreras diferentes asesorados y capacitados en nuestra materia. Y mucho más. Es el aporte del INSTITUTO ARGENTINO DE FERROCARRILES (c.l.) a la honra de los 150 años de la inauguración del servicio ferroviario nacional. Trabajamos por los siguientes 150 años de transporte guiado en la Argentina. En 2005 propusimos la celebración del 150º Aniversario del Ferrocarril en la Argentina. Propusimos declarar a 2007 como el “Año del Ferrocarril”; sin embargo resultó ser el año de la seguridad vial… Propusimos un amplio programa de actividades en todo el país a lo largo de 2006 y 2007 para converger en este 30 de Agosto. Todavía esperamos respuesta. Sin embargo, hoy hay quienes están haciendo un extraño y lánguido homenaje. Con llamativas exclusiones y discriminaciones. La oportunidad perdida de hacer lo que hubiese sido digno. No habrá otra similar en 50 años más. Ante la proliferación de actos de toda suerte en forma casi simultánea por parte de muchas organizaciones y asociaciones, el IAF tomó la decisión, hace varios meses atrás, de alterar por completo sus planes de Encuentros Ferroviarios. En el 2º Encuentro Ferroviario Patagónico en Puerto Deseado (2004) lanzamos la idea de iniciar las celebraciones del futuro Sesquicentenario. En el Primer Encuentro Ferroviario del Corredor Andino-Pampeano en Colonia Alvear Oeste (Abril de 2006) inauguramos el ciclo de eventos para celebrar los 150 años, lo que repetimos en el 2º Encuentro en San Rafael (30 de Agosto de 2006), en el 2º Encuentro Ferroviario de Alta Gracia (noviembre de 2006) y en el 4º Encuentro Ferroviario Patagónico en Pico Truncado (1º de Diciembre de 2006). Las Declaraciones de estos dos últimos eventos, suscriptas por representantes de numerosas instituciones, incluyeron el compromiso de organizar en sus respectivas localidades las celebraciones del Sesquicentenario; muchas lo han estado haciendo dignamente y las felicitamos. En lo que resta de 2007 continuaremos con estas actividades en Noviembre y Diciembre en San Rafael y Alta Gracia. En 2008 continuarán en Neuquén-Cipolletti y en otros puntos del país. El IAF sigue apuntando al futuro del ferrocarril, desde la cimentación de la historia, desde la crítica responsable, desde el respeto y la seriedad. No nos sumamos a lo que no es serio y no compartimos espacios con impresentables, que los hay. Estaremos apoyando lo que esté bien y honraremos siempre a las respetables personalidades que desde la memoria histórica, lejana o reciente, o desde sus vidas presentes, también nos honran a nosotros con sus legados que superan ampliamente la acumulación de conocimientos y experiencias. Schneidewind, Jacobacci, Briano, Nogués, Belfiore, Zurini, Bernardini, Tobar, Cappa, Sacaggio, Vittone, Porta (Livio), Porta (Enrique), Repetto, De Marchi, Rattazzi… y tantos otros tal vez menos conocidos que nos legaron sus saberes y sus hechos. El compromiso del IAF permanece intacto. Nuestro mejor homenaje es nuestro trabajo. Por eso para nosotros 150 años no es poca cosa. (*) Recibido por Corrientes al Día de Pablo Martorelli, Presidente del INSTITUTO ARGENTINO DE FERROCARRILES c.l. Única ONG ferroviaria profesional independiente de América Latina M.I.30390 Miembro COMAPH-COPUA 1996 Miembro recíproco UITP 1998 Miembro COPE 2003 Miembro FCUP 2005 Miembro TUR100-SECTUR 2006 Miembro SIMAAS 2007 Miembro COMTUR-CAC 2007
Dijo en San Juan el presidente Fernández: “lo que nos hace evolucionar o crecer no es el mérito, como nos han hecho creer en los últimos años, porque el más tonto de los ricos tiene muchas más posibilidades que el más inteligente de los pobres”.
Esto es tan falso, tan terriblemente insultante para la inteligencia, que es difícil decidir por dónde empezar a analizarlo. Sólo diré que Steve Jobs (Apple), Bill Gates (Windows), Jeff Bezos (Amazon) y Marcos Galperin (Mercado Libre), son algunas de las fortunas más grandes del mundo y de Argentina, y NINGUNO fue hijo de rico. Este pelotudismo socrático y retrógrado ha sido totalmente superado en los países desarrollados… ¡Y PRECISAMENTE PORQUE LO SUPERARON SON DESARROLLADOS!
Luego invocó a Alberdi y Sarmiento, reinterpretándolos con un pensamiento tan retorcido que los vuelve irreconocibles. Dijo admirarlos porque “vislumbraron la importancia de la educación pública, que nada es más importante que el conocimiento humano” y del sanjuanino aseguró que “en un gesto inigualable de igualdad, resolvió que todos los que estudian en la escuela pública calcen un guardapolvo blanco para que las diferencias sociales allí donde se aprende no aparezcan. Con todo eso nos dijo que el estado debe estar muy presente en el desarrollo humano y que finalmente lo que más vale es la igualdad, es propender a un sistema más igualitario”.
Pobres Alberdi y Sarmiento. Si pensamos cuales referentes históricos argentinos estuvieron absolutamente en contra de la intromisión del estado (que debía ser pequeño) en el quehacer cotidiano de los ciudadanos, fueron sin dudas estas dos inmensas figuras de nuestra patria. Hacer semejantes distorsiones de su pensamiento es una ofensa a sus memorias y, como se hacía en la escuela, debería lavarse la boca con jabón para limpiar sus palabras.
Alberdi decía que “la omnipotencia del Estado es la negación de la libertad individual” y que “la grandeza del vecino, forma parte elemental e inviolable de la nuestra”, LO OPUESTO al igualitarismo y el desconocimiento del mérito.
¿Y qué pensaba Sarmiento?, al que dijo admirar. El sanjuanino dijo: “las cumbres se alcanzan doblando el empeño” y “toda la historia de los progresos humanos es la simple imitación del genio”; Don Domingo era un ferviente defensor del mérito, concepto que el señor presidente denigra.
Es increíble que en la actualidad, con lo fácil que es conocer la realidad de otros países, todavía existan personas “educadas” (en realidad son apenas instruidas, la educación implica pensamiento crítico algo que les es ajeno) que sean tan ciegas como para dejarse engañar así.
El presidente habla de defender el federalismo y a las provincias del “pulpo” del puerto, cuándo el mayor héroe de esta gente fue Rosas, quien prohibió los puertos del Paraná para que todo el comercio exterior pasara por Buenos Aires, empobreciendo a las otras provincias. Obsesión rosista por el monopolio del puerto porteño que condujo a la muerte a valerosos patriotas en la Vuelta de Obligado, sacrificio disfrazado con la mentira de la “defensa de soberanía”.
Valga la apostilla: ese fue el mismo Rosas que le quitó los sueldos a los docentes de las escuelas y universidades estatales, hundiendo en la ignorancia a los pobres y yendo en contra de la tan mentada “igualdad de oportunidades” con la que se llenan la boca.
¿Habla del federalismo y de trato igualitario para todas las provincias?, cuando el peronismo fue el mayor promotor del crecimiento del conurbano bonaerense y que le otorgó tantos subsidios a la luz, el gas y a los combustibles, que hacía que en Buenos Aires se pagara hasta 5 veces más barato los servicios públicos que en el resto del país. ¿En serio? ¿Se puede ser tan caradura? Y lo peor, ¿se puede ser tan idiota como para creerles?
También dijo Fernández: “lo que uno más debería desear como argentino, es que cada argentino tenga la oportunidad de nacer…”, ¿oportunidad de nacer?, ¿de qué oportunidad de nacer habla quien defiende el aborto?, ¿se puede ser más cínico y contradictorio? “…Y de morirse feliz después de haber vivido bien, en la provincia donde ha nacido”, ¿morirse feliz?, ¿Cómo Solange que murió sin ver a su padre?, ¿o Facundo Astudillo?, ¿o Franco Martínez?, ¿o Franco Isorni?, ¿o Luis Espinoza?, todos desaparecidos y muertos en democracia en este 2020.
Entiendo (no comparto) que los que “están prendidos” defiendan “el modelo”… ¿pero el resto?, ¿el laburante que deja más de la mitad de su sueldo en impuestos para mantener punteros y para que le den por sus impuestos la porquería de salud, educación, seguridad y justicia que tenemos?, ¿el profesional que como universitario debería ser capaz de ver más allá de las mentiras de los demagogos? Cómo decía Sarmiento y se aplica a los “educados” que egresan de la universidad: “era el que más sabia… Pero el que menos entendía”.
Lo cierto es que a decir del gran sanjuanino: “la ignorancia es atrevida”, pero aún es más atrevida la avaricia, la soberbia y el despotismo de quienes conducen hoy el destino de nuestra patria y que lejos están de seguir el siguiente principio rector del cuyano: “fui criado en un santo horror por la mentira, al punto que el propósito de ser siempre veraz ha entrado a formar el fondo de mi carácter y de ello dan testimonio todos los actos de mi vida”.
Quienes creemos en la Libertad, en la igualdad ante la Ley y no por la Ley, y en el Respeto por la vida y la propiedad del prójimo, no solo tenemos el deber ético y moral, sino también la impostergable necesidad de oponernos y manifestarnos en contra de los atropellos que se están cometiendo contra los argentinos y contra la República.
El momento es YA… antes de que terminen de hundirnos y de someternos, antes de que no quede nada por salvar.
(*) Rogelio López Guillemain
La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto profundo en nuestras sociedades. Además de la crisis sanitaria, ha afectado la educación, la vida social y los medios de subsistencia. A una economía difícil, esto lo ha profundizado aún más.
Para nuestros jóvenes muchos de estos impactos será a largo plazo y multidimensionales: Por ejemplo, 191 países han implementado el cierre de escuelas a nivel nacional o local, y 1,5 mil millones de personas no pueden asistir a la escuela ya que no disponen de tecnología básica para acceder a las plataformas educativas.
Sin embargo, hay muchos jóvenes liderando esta crisis y no se han quedado de brazos cruzados. Hay una Juventud que está apoyando el diseño y la ejecución de programas sociales pensando en caminos creativos y de respuesta.
También debemos destacar la variedad de emprendimientos que han surgido adaptando propuestas comerciales a estos nuevos tiempos donde se pudo ver la creatividad y el desarrollo de productores locales.
Es fundamental continuar apoyando estos proyectos para que tengan continuidad formulando estrategias competitivas, incentivando y se conviertan en micro empresas sustentables económicamente.
Sumar programas de recuperación en base a economías locales y ver como su fuerza creativa comienza a enriquecer a instituciones, proyectos sustentables y caminos nuevos para salir adelante.
Pienso que un camino de desarrollo es no solo fortalecer las economías regionales sino volver a los oficios, capacitarnos y tener herramientas prácticas para generar recursos propios.
Estamos atravesando un momento de reinvención muy grande y donde más que nunca necesitamos estar unidos, sacar nuestras fortalezas y trabajar juntos como sociedad pensando en lo que queremos construir, diseñando la sociedad futura, poniendo foco en nuestros recursos y liderar.
Es fundamental generar herramientas para crear una sociedad más igualitaria y solidaria y no solo como respuesta a la pandemia sino también pensando a largo plazo y abordando todos el compromiso de crear un cambio duradero.
Recuerda una crónica del diario perfil: “Eduardo Lorenzo Borocotó el 23 octubre de 2005 obtuvo una banca. Pero antes de asumir algo cambió. El 9 de noviembre visitó la Casa Rosada, acompañado por su hijo. ¿Con quién tenía cita? Con el actual presidente Alberto Fernández, quien era jefe de gabinete de Néstor Kirchner. Borocotó se reunió con los dos. A Kirchner no lo conocía. A Fernández, sí.
El mismo día del encuentro en la Rosada, Borocotó anunció su partida del bloque macrista: armó un mono-bloque independiente, afín al kirchnerismo. Alberto Fernández explicó la jugada: "Tenemos que ser amplios. Hay muchos votantes y dirigentes de ARI que están descontentos con Carrió, por ejemplo. Y nosotros estamos abiertos a recibirlos, así como a los radicales, peronistas y a todos los que crean en el proyecto del Presidente".
En nuestras democracias actuales, se debería empezar a pensar en que los ciudadanos, en vez de elegir a personas que encarnen proyectos, ideologías, o letras muertas de lo establecido en partidos políticos, votemos directamente, proyectos, propuestas, modelos o formas de hacer las cosas y que la ejecución de las mismas, pase a ser un tema totalmente secundario, esto sí podría denominarse algo que genere una revalidación de lo democrático, pero no estamos en condiciones de hacerlo actualmente, primordialmente porqué el gobierno de ese pueblo, está en manos de uno sólo, a lo sumo, en cogobierno por un legislativo (con flagrantes problemas en relación a la representatividad, que sería todo un capítulo aparte el analizarlo) y supeditado a un judicial, que siempre falla, de fallar en todas sus acepciones, liberar la opción de ese pueblo, para que elija su gobierno, mediante las ideas que se le propongan, sin que sea esto eclipsado por la figura de un líder o lo que fuere, en tanto y en cuanto siga siendo uno, recién podrá ser posible, cuando su vínculo con la vida y la muerte, no tenga que ser anatematizado mediante la creencia o no creencia, que como vimos son las dos caras de una misma moneda, en un ser único y todo poderoso, creador de este mundo y de todos los otros, los posibles como los imposibles.
La violencia del estado que en la actualidad se traduce en su sobre-presencia en ciertos sectores a costa de la ausencia del mismo en vastas áreas y bolsones, la sobreactuación de un supuesto sentir o hacer democrático, en donde sólo se ejerce una dudosa aclamatoria de mayorías (sistemas de preselección de candidatos cerrada, como internas que no se llevan a cabo, que transfieren el sentido de elegir por el de optar, entre quiénes ellos, de acuerdo a sus reglas disponen que tengamos que optar, es decir elegir condicionados) debería estar tipificado en la normativa, como uno de los delitos más flagrantes contra las instituciones y el pleno ejercicio de la libertad, de tal manera, la ciudadanía no tendría excusas como para no levantarse en puebladas, en manifestaciones que dan cuenta de la total y absoluta anomia, en que la incapacidad de cierto sector de la clase política nos puede volver a conducir en cualquier otro momento u oportunidad. Propuestas es lo que sobra, se precisa de predisposición de estos para hacerles sentir a la ciudadanía que algo determinan, con el pago de sus impuestos y con sus votos. En tiempos electorales, una práctica que debería ser desterrada y que es una muestra expresa del democraticidio, es la compra de votos, sea mediante una dádiva, prebenda, por intermedio de corte de chapas, dinero, mercadería, merca o lo que fuere, como de las mentiras flagrantes e inconsistentes las que ofrecen por doquier. Como también lo es la no sanción de los hechos de corrupción, o la dilación en demasía para resolver los mismos, perpetrados por hombres que hayan pertenecido al funcionariado público.
Si somos presa de políticos corruptos seguiremos encarcelados en el imperativo de una sociedad penalizada y penalizante para sancionar delitos y no para reconvertir conductas que no nos lleven a ellas.
Hasta aquí sí se quiere, nada nuevo bajo el sol, o desconocido para todos aquellos a quiénes, Alfonsín nos prometió que con “la democracia se educa, se come, se cura, no necesitamos nada más, que nos dejen de mandonear…” la nueva modalidad, de estas suertes de “democraticidios” que nos afectan, es que el poder unipersonal del ejecutivo nacional, pasó a un sistema, tal como lo definió un constitucionalista “vicepresidencialista” y por tanto, Alberto, el creador del “borocotismo”, tal como Víctor Frankenstein, pasó a ser víctima de su propia creación, de su mutación práctica de lo representativo.
En la aceleración, profundización o intensificación del cristinismo, camporismo o kirchnerismo recargado, en el que recayó Alberto, no quedaría otro espacio en la historia para él, que un título de un libro escrito por Miguel Bonasso, acerca de Héctor Cámpora; “El presidente que no fue”.
La mayoría que se construyó a tales efectos, con una propagación mayor que la de un virus desconocido y contagioso, se reconstituye con proverbial dinámica y en las próximas elecciones demostrará cuán cerca o lejos puede estar de un poder político, en la actualidad, “borocotizado”.
(*) Por Francisco Tomás González Cabañas.