Opinión
Basta de chistes
NITO (*)
Quisiera poder ironizar diciendo que la agenda de temas que Nito Artaza propone es uno de sus habituales chistes, pero la verdad es que es lamentablemente trágico que un Senador Nacional por Corrientes, cuna de tantos héroes y próceres del federalismo, proponga un temario ajustado a las necesidades bonaerenses y de la Pampa húmeda. Veamos.
NUEVA LEY DE COPARTICIPACION FEDERAL La nueva ley de coparticipación federal es una urgente necesidad de la mayoría de las Provincias para corregir las asimetrías generadas por añares de federalismo unitario. Pero hay que saber un par de cosas, para no caer en trampas. Cuando Néstor Kirchner era presidente quiso avanzar en sacar la nueva ley de Coparticipación Federal, un poco porque hacía rato que se había re-vencido el plazo que fijaron los constituyentes que en el año 94 reformaron la Constitución Nacional; y, otro poco, por hacerse cargo de esa demanda histórica del país del interior. Pasó que para poder avanzar se necesitaba del aval o acompañamiento de Todos los gobernadores del país. Y, como Nito no conoce mucho de los avatares políticos y de los sucesos provinciales, tal vez no sepa que ese intento K no prosperó por oposición de un par de gobernadores: Felipe Solá de Bs. As. y Colombi de Corrientes. La oposición acérrima de los bonaerenses se entiende porque son los más favorecidos por el actual esquema de reparto de recursos públicos “federales”; las razones de Colombi no quedaron muy en claro, pero tenían que ver con que no estaba garantizado que Corrientes mejore sus posiciones actuales, porque provincias como Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Bs. As. querían que el nuevo reparto se haga sobre parámetros que nos perjudicarían ampliamente: número de habitantes, aporte al producto bruto, recaudación tributaria de impuestos federales, etc. En cualquiera de esas hipótesis perderíamos ampliamente si el Congreso, con mayoría absoluta de legisladores de las provincias centrales, iniciaba el tratamiento de cualquier proyecto (sabido es que en el trámite parlamentario se puede modificar a piaccere el contenido normativo de cualquier iniciativa). Ni hablar de un fondo de reparación histórica o de incrementar el porcentual que recibimos. Más bien se avizoraba una posible reducción de hasta un 1% de la masa de recursos que hoy recibe Corrientes. Con gusto retiraré lo dicho si el Senador Artaza demuestra que es parte de un conglomerado legislativo que tiene la vocación de reparar la injusticia eterna, recuperando el punto perdido durante algún gobierno de cuño conservador, o avanzar algunos casilleros más allá de ello. DESENDEUDAMIENTO PROVINCIAL Tal vez sea bueno recordar que ese es un tema que es competencia de las Legislaturas provinciales. Para contraerse un nuevo crédito o refinanciar deudas existentes se necesita la aprobación legislativa, dada por 2/3 de los legisladores. No se puede pasar por encima de tales competencias y prerrogativas y emprender tareas que no le encomendó nadie: ni las Cámaras Legislativas locales ni el gobierno provincial. Sobre qué bases o con qué parámetros va a basar su actuación Nito, cuando no tiene mandato y ni siquiera es un especialista de fuste como para tener “propuestas” viables, que siempre deben ser “consensuadas” y “decididas” en la órbita provincial. Más bien sucedió todo lo contrario. Desde el gobernador para abajo le vienen reprochando a Nito su actitud, el cortarse solo, el desentenderse de lo que pasa fronteras adentro de la Corrientes que lo depositó en una banca senatorial. Rara capacidad la de Nito: todo el arco político está que trinan por su accionar: no solo el radicalismo, también el peronismo encabezado por Camau, Intendente capitalino y recientemente los medios periodísticos locales reprodujeron la demanda de los legisladores conservadores en igual sentido. Y, supongo que Nito ni la claque mediática no se les va a ocurrir pensar que toditísimo el mundo está comprado por los pingüinos. MODIFICACION DE LA FORMA DE DISTRIBUCION DE LO RECAUDADO POR EL IMPUESTO AL CHEQUE Este impuesto se creó durante el gobierno de De La Rúa, allá por el año 2.001 y el 100% iba a las arcas nacionales; luego se estableció la coparticipación del 30% a las provincias. La modificación que propone Nito encuentra sentido únicamente si se modifican los actuales parámetros de distribución secundaria (por aplicación de los parámetros de coparticipación federal), porque aunque se coparticipe el 100% de lo recaudado por impuesto al cheque, solo se consolidaría la desigualdad existente y se beneficiarían nuevamente las provincias centrales y seguirán sin corregirse las asimetrías históricas. Rogelio Frigerio, al analizar el presupuesto nacional del 2009, hace un comparativo sobre la incidencia regional de las trasferencias automáticas de origen nacional, del cual resulta que las regiones más beneficiadas fueron la Región Centro y la Pampeana, evidenciando que cinco provincias (Buenos Aires, Capital, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos) se llevan casi el 45% del total. Del análisis resulta, también, que en términos interanuales se observa una tendencia a aumentar los beneficios que recibían las Regiones NEA y NOA, aunque muy alejadas del volumen total y porcentual que perciben las Regiones Centro y Pampeana. La propuesta de Nito tira abajo estos mínimos avances conseguidos y restablece el orden “alterado” en beneficio de las provincias históricamente favorecidas por el régimen vigente. Además, no se puede dejar de mencionar que el impuesto al cheque es uno de tantos impuestos distorsivos, que incentiva la informalidad. Sería más provechoso, si en lugar de discutir el sexo de los ángeles, se discute de una buena vez el sistema impositivo en su conjunto, abordando las inequidades sociales, geográficas e históricas que tiene el sistema vigente. Son demasiado serias las demandas de la hora, con un gobierno provincial que volvió a hablar de bonos, cuasimonedas y se avivó la memoria de los efectos devastadores del maldito CE.CA.COR., devaluados hasta lo imposible y sobreemitidos por Mestre y Aguad. Va siendo hora de dejar los charrasquillos y las plumas para el vodevil. Pero sobre todo va siendo hora de definirse en serio. O se representa los intereses provinciales o se trasforma en vocero del conglomerado bonaerense y sus socios históricos. (*) Recibido por Corrientes al Día de Araceli Ferreyra (h), diputada provincial (MC)
Dijo en San Juan el presidente Fernández: “lo que nos hace evolucionar o crecer no es el mérito, como nos han hecho creer en los últimos años, porque el más tonto de los ricos tiene muchas más posibilidades que el más inteligente de los pobres”.
Esto es tan falso, tan terriblemente insultante para la inteligencia, que es difícil decidir por dónde empezar a analizarlo. Sólo diré que Steve Jobs (Apple), Bill Gates (Windows), Jeff Bezos (Amazon) y Marcos Galperin (Mercado Libre), son algunas de las fortunas más grandes del mundo y de Argentina, y NINGUNO fue hijo de rico. Este pelotudismo socrático y retrógrado ha sido totalmente superado en los países desarrollados… ¡Y PRECISAMENTE PORQUE LO SUPERARON SON DESARROLLADOS!
Luego invocó a Alberdi y Sarmiento, reinterpretándolos con un pensamiento tan retorcido que los vuelve irreconocibles. Dijo admirarlos porque “vislumbraron la importancia de la educación pública, que nada es más importante que el conocimiento humano” y del sanjuanino aseguró que “en un gesto inigualable de igualdad, resolvió que todos los que estudian en la escuela pública calcen un guardapolvo blanco para que las diferencias sociales allí donde se aprende no aparezcan. Con todo eso nos dijo que el estado debe estar muy presente en el desarrollo humano y que finalmente lo que más vale es la igualdad, es propender a un sistema más igualitario”.
Pobres Alberdi y Sarmiento. Si pensamos cuales referentes históricos argentinos estuvieron absolutamente en contra de la intromisión del estado (que debía ser pequeño) en el quehacer cotidiano de los ciudadanos, fueron sin dudas estas dos inmensas figuras de nuestra patria. Hacer semejantes distorsiones de su pensamiento es una ofensa a sus memorias y, como se hacía en la escuela, debería lavarse la boca con jabón para limpiar sus palabras.
Alberdi decía que “la omnipotencia del Estado es la negación de la libertad individual” y que “la grandeza del vecino, forma parte elemental e inviolable de la nuestra”, LO OPUESTO al igualitarismo y el desconocimiento del mérito.
¿Y qué pensaba Sarmiento?, al que dijo admirar. El sanjuanino dijo: “las cumbres se alcanzan doblando el empeño” y “toda la historia de los progresos humanos es la simple imitación del genio”; Don Domingo era un ferviente defensor del mérito, concepto que el señor presidente denigra.
Es increíble que en la actualidad, con lo fácil que es conocer la realidad de otros países, todavía existan personas “educadas” (en realidad son apenas instruidas, la educación implica pensamiento crítico algo que les es ajeno) que sean tan ciegas como para dejarse engañar así.
El presidente habla de defender el federalismo y a las provincias del “pulpo” del puerto, cuándo el mayor héroe de esta gente fue Rosas, quien prohibió los puertos del Paraná para que todo el comercio exterior pasara por Buenos Aires, empobreciendo a las otras provincias. Obsesión rosista por el monopolio del puerto porteño que condujo a la muerte a valerosos patriotas en la Vuelta de Obligado, sacrificio disfrazado con la mentira de la “defensa de soberanía”.
Valga la apostilla: ese fue el mismo Rosas que le quitó los sueldos a los docentes de las escuelas y universidades estatales, hundiendo en la ignorancia a los pobres y yendo en contra de la tan mentada “igualdad de oportunidades” con la que se llenan la boca.
¿Habla del federalismo y de trato igualitario para todas las provincias?, cuando el peronismo fue el mayor promotor del crecimiento del conurbano bonaerense y que le otorgó tantos subsidios a la luz, el gas y a los combustibles, que hacía que en Buenos Aires se pagara hasta 5 veces más barato los servicios públicos que en el resto del país. ¿En serio? ¿Se puede ser tan caradura? Y lo peor, ¿se puede ser tan idiota como para creerles?
También dijo Fernández: “lo que uno más debería desear como argentino, es que cada argentino tenga la oportunidad de nacer…”, ¿oportunidad de nacer?, ¿de qué oportunidad de nacer habla quien defiende el aborto?, ¿se puede ser más cínico y contradictorio? “…Y de morirse feliz después de haber vivido bien, en la provincia donde ha nacido”, ¿morirse feliz?, ¿Cómo Solange que murió sin ver a su padre?, ¿o Facundo Astudillo?, ¿o Franco Martínez?, ¿o Franco Isorni?, ¿o Luis Espinoza?, todos desaparecidos y muertos en democracia en este 2020.
Entiendo (no comparto) que los que “están prendidos” defiendan “el modelo”… ¿pero el resto?, ¿el laburante que deja más de la mitad de su sueldo en impuestos para mantener punteros y para que le den por sus impuestos la porquería de salud, educación, seguridad y justicia que tenemos?, ¿el profesional que como universitario debería ser capaz de ver más allá de las mentiras de los demagogos? Cómo decía Sarmiento y se aplica a los “educados” que egresan de la universidad: “era el que más sabia… Pero el que menos entendía”.
Lo cierto es que a decir del gran sanjuanino: “la ignorancia es atrevida”, pero aún es más atrevida la avaricia, la soberbia y el despotismo de quienes conducen hoy el destino de nuestra patria y que lejos están de seguir el siguiente principio rector del cuyano: “fui criado en un santo horror por la mentira, al punto que el propósito de ser siempre veraz ha entrado a formar el fondo de mi carácter y de ello dan testimonio todos los actos de mi vida”.
Quienes creemos en la Libertad, en la igualdad ante la Ley y no por la Ley, y en el Respeto por la vida y la propiedad del prójimo, no solo tenemos el deber ético y moral, sino también la impostergable necesidad de oponernos y manifestarnos en contra de los atropellos que se están cometiendo contra los argentinos y contra la República.
El momento es YA… antes de que terminen de hundirnos y de someternos, antes de que no quede nada por salvar.
(*) Rogelio López Guillemain
La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto profundo en nuestras sociedades. Además de la crisis sanitaria, ha afectado la educación, la vida social y los medios de subsistencia. A una economía difícil, esto lo ha profundizado aún más.
Para nuestros jóvenes muchos de estos impactos será a largo plazo y multidimensionales: Por ejemplo, 191 países han implementado el cierre de escuelas a nivel nacional o local, y 1,5 mil millones de personas no pueden asistir a la escuela ya que no disponen de tecnología básica para acceder a las plataformas educativas.
Sin embargo, hay muchos jóvenes liderando esta crisis y no se han quedado de brazos cruzados. Hay una Juventud que está apoyando el diseño y la ejecución de programas sociales pensando en caminos creativos y de respuesta.
También debemos destacar la variedad de emprendimientos que han surgido adaptando propuestas comerciales a estos nuevos tiempos donde se pudo ver la creatividad y el desarrollo de productores locales.
Es fundamental continuar apoyando estos proyectos para que tengan continuidad formulando estrategias competitivas, incentivando y se conviertan en micro empresas sustentables económicamente.
Sumar programas de recuperación en base a economías locales y ver como su fuerza creativa comienza a enriquecer a instituciones, proyectos sustentables y caminos nuevos para salir adelante.
Pienso que un camino de desarrollo es no solo fortalecer las economías regionales sino volver a los oficios, capacitarnos y tener herramientas prácticas para generar recursos propios.
Estamos atravesando un momento de reinvención muy grande y donde más que nunca necesitamos estar unidos, sacar nuestras fortalezas y trabajar juntos como sociedad pensando en lo que queremos construir, diseñando la sociedad futura, poniendo foco en nuestros recursos y liderar.
Es fundamental generar herramientas para crear una sociedad más igualitaria y solidaria y no solo como respuesta a la pandemia sino también pensando a largo plazo y abordando todos el compromiso de crear un cambio duradero.
Recuerda una crónica del diario perfil: “Eduardo Lorenzo Borocotó el 23 octubre de 2005 obtuvo una banca. Pero antes de asumir algo cambió. El 9 de noviembre visitó la Casa Rosada, acompañado por su hijo. ¿Con quién tenía cita? Con el actual presidente Alberto Fernández, quien era jefe de gabinete de Néstor Kirchner. Borocotó se reunió con los dos. A Kirchner no lo conocía. A Fernández, sí.
El mismo día del encuentro en la Rosada, Borocotó anunció su partida del bloque macrista: armó un mono-bloque independiente, afín al kirchnerismo. Alberto Fernández explicó la jugada: "Tenemos que ser amplios. Hay muchos votantes y dirigentes de ARI que están descontentos con Carrió, por ejemplo. Y nosotros estamos abiertos a recibirlos, así como a los radicales, peronistas y a todos los que crean en el proyecto del Presidente".
En nuestras democracias actuales, se debería empezar a pensar en que los ciudadanos, en vez de elegir a personas que encarnen proyectos, ideologías, o letras muertas de lo establecido en partidos políticos, votemos directamente, proyectos, propuestas, modelos o formas de hacer las cosas y que la ejecución de las mismas, pase a ser un tema totalmente secundario, esto sí podría denominarse algo que genere una revalidación de lo democrático, pero no estamos en condiciones de hacerlo actualmente, primordialmente porqué el gobierno de ese pueblo, está en manos de uno sólo, a lo sumo, en cogobierno por un legislativo (con flagrantes problemas en relación a la representatividad, que sería todo un capítulo aparte el analizarlo) y supeditado a un judicial, que siempre falla, de fallar en todas sus acepciones, liberar la opción de ese pueblo, para que elija su gobierno, mediante las ideas que se le propongan, sin que sea esto eclipsado por la figura de un líder o lo que fuere, en tanto y en cuanto siga siendo uno, recién podrá ser posible, cuando su vínculo con la vida y la muerte, no tenga que ser anatematizado mediante la creencia o no creencia, que como vimos son las dos caras de una misma moneda, en un ser único y todo poderoso, creador de este mundo y de todos los otros, los posibles como los imposibles.
La violencia del estado que en la actualidad se traduce en su sobre-presencia en ciertos sectores a costa de la ausencia del mismo en vastas áreas y bolsones, la sobreactuación de un supuesto sentir o hacer democrático, en donde sólo se ejerce una dudosa aclamatoria de mayorías (sistemas de preselección de candidatos cerrada, como internas que no se llevan a cabo, que transfieren el sentido de elegir por el de optar, entre quiénes ellos, de acuerdo a sus reglas disponen que tengamos que optar, es decir elegir condicionados) debería estar tipificado en la normativa, como uno de los delitos más flagrantes contra las instituciones y el pleno ejercicio de la libertad, de tal manera, la ciudadanía no tendría excusas como para no levantarse en puebladas, en manifestaciones que dan cuenta de la total y absoluta anomia, en que la incapacidad de cierto sector de la clase política nos puede volver a conducir en cualquier otro momento u oportunidad. Propuestas es lo que sobra, se precisa de predisposición de estos para hacerles sentir a la ciudadanía que algo determinan, con el pago de sus impuestos y con sus votos. En tiempos electorales, una práctica que debería ser desterrada y que es una muestra expresa del democraticidio, es la compra de votos, sea mediante una dádiva, prebenda, por intermedio de corte de chapas, dinero, mercadería, merca o lo que fuere, como de las mentiras flagrantes e inconsistentes las que ofrecen por doquier. Como también lo es la no sanción de los hechos de corrupción, o la dilación en demasía para resolver los mismos, perpetrados por hombres que hayan pertenecido al funcionariado público.
Si somos presa de políticos corruptos seguiremos encarcelados en el imperativo de una sociedad penalizada y penalizante para sancionar delitos y no para reconvertir conductas que no nos lleven a ellas.
Hasta aquí sí se quiere, nada nuevo bajo el sol, o desconocido para todos aquellos a quiénes, Alfonsín nos prometió que con “la democracia se educa, se come, se cura, no necesitamos nada más, que nos dejen de mandonear…” la nueva modalidad, de estas suertes de “democraticidios” que nos afectan, es que el poder unipersonal del ejecutivo nacional, pasó a un sistema, tal como lo definió un constitucionalista “vicepresidencialista” y por tanto, Alberto, el creador del “borocotismo”, tal como Víctor Frankenstein, pasó a ser víctima de su propia creación, de su mutación práctica de lo representativo.
En la aceleración, profundización o intensificación del cristinismo, camporismo o kirchnerismo recargado, en el que recayó Alberto, no quedaría otro espacio en la historia para él, que un título de un libro escrito por Miguel Bonasso, acerca de Héctor Cámpora; “El presidente que no fue”.
La mayoría que se construyó a tales efectos, con una propagación mayor que la de un virus desconocido y contagioso, se reconstituye con proverbial dinámica y en las próximas elecciones demostrará cuán cerca o lejos puede estar de un poder político, en la actualidad, “borocotizado”.
(*) Por Francisco Tomás González Cabañas.