El Timao ganaba por Nilmar y clasificaba. Pero Coelho, en contra, y dos veces Higuaín lo dieron vuelta y el equipo de Passarella se metió en cuartos. El partido fue suspendido por graves incidentes: los hinchas intentaron entrar al campo de juego y la policía brasileña, en clara inferioridad, reprimió con ferocidad.

Lamentablemente, lo deportivo, la gran actuación de River en Brasil, quedará en un principio al costado. Porque, una vez más, la violencia fue la principal protagonista en el triunfo del equipo de Daniel Passarella ante Corinthians por 3-1, que lo metió en los cuartos de final de la Copa Libertadores. Cuando se desarrollaban los últimos minutos del encuentro, los hinchas brasileños intentaron ingresar al campo de juego para increpar a sus jugadores. Alguno lo logró, pero el accionar de la policía evitó una tragedia sosteniendo en clara inferioridad numérica el masivo avance de la gente por una puerta que ya estaba abierta. Claro, hubo represión y muchos heridos. Hablando del juego, River fue muy superior. En el comienzo del encuentro lo que prometió Passarella, no ir a Brasil a meterse atrás, se cumplió. Se observó a un equipo firme en la marca, presionando en la mitad de la cancha e intentando atacar a los inseguros centrales locales. Corinthians no encontraba la manera de entrarle a una defensa de tres (Tula, Cáceres y Gerlo), que por momentos quedaba mano a mano y defendiendo en línea, algo peligroso ante delanteros veloces como Tevez y Nilmar. El partido era intenso, pero se jugaba de área a área. El Millonario tuvo su primera aproximación con un remate mordido de Santana, mientras que el Timao llegó a los 28m cuando Tevez –Gerlo lo borró de la cancha- exigió una gran atajada de Lux después de realizar una jugada muy parecida a la del gol en Buenos Aires. Los locales perdían por el centro y ganaban por los costados, con Carlos Alberto y Rubens Junior, pero sus centros nunca encontraron la cabeza de un compañero. River no sufría ante un equipo que atacaba con poca gente. Sin embargo, terminó pagando muy caro la primera distracción: llegó un centro desde un tiro libre, Nilmar quedó muy solo y de cabeza marcó el gol, a los 39m, que hasta ahí clasifica a Corinthians a cuartos de final. El propio delantero, en el final, se perdió el segundo entrando por la derecha. En el arranque del complemento River fue a buscar el partido aún más arriba y Corinthians no pudo aprovechar los espacios para definir la serie. Y a los 10m, en uno de los tantos centros que cayeron en el área local, Coelho cabeceó en contra de su arco y marcó la igualdad. Justa. La necesidad llevó al equipo paulista a ir, ciego, sin ideas, con la pelota detenida como única arma. Los de Passarella esperaban bien parados, agazapados, esperando para dar la estocada final, que llegó a los 26m, cuando Gallardo asistió al recién ingresado Higuaín y el joven delantero definió al ángulo derecho de Silvio Luiz. El desarrolló no cambió. Este muy débil Corinthians, que nunca había perdido en el Pacaembú ante un rival extranjero, no encontraba la forma de llegar a inquietar a Lux y los argentinos lo terminaron de liquidar, otra vez por Higuaín, nuevamente tras un centro. Después llegarían los graves incidentes… FORMACIONES Y CAMBIOS CORINTHIANS: Silvio Luiz; Coelho (ST 33m Eduardo Ratinho), Vinicius, Betao, Rubens Junior; Marcelo Mattos, Xavier (ST 20m Roger); Carlos Alberto (ST 32m Rafael Moura), Ricardinho; Carlos Tevez y Nilmar. DT: Ademar Braga. RIVER: Germán Lux; Cristian Tula, Julio Cáceres, Danilo Gerlo; Paulo Ferrari, Jonathan Santana, Oscar Ahumada, Federico Domínguez; Marcelo Gallardo; Gonzalo Abán (ST 20m Gonzalo Higuaín) y Ernesto Farías. DT: Daniel Passarella. Fuente: TyC Sports