Corrientes al Día recibió este comunicado sobre la situación en la Carrera de Arquitectura de la UNNE. Si bien es extenso, lo transcribimos íntegramente para no modificar en nada su espíritu aclaratorio. “Ante la toma de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional del Nordeste por parte de un grupo de estudiantes que justifican tal actitud en el cambio de planes de estudio, es imprescindible aclarar a la comunidad académica y a la opinión pública cuestiones esenciales que no han sido presentadas de un modo completo y objetivo. Las afirmaciones que aquí se expresan están respaldadas por documentación probatoria que puede ser verificada en la sede de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo si es que se desea conocer a fondo y en detalle la cuestión planteada”.

1. La necesidad de cambio curricular a. El cambio curricular se inserta en un proyecto institucional más amplio Desde 1992 la UNNE lleva a cabo procesos de cambio en busca de la mejora integral y paulatina de la universidad. La actualización de la formación de los profesionales es uno de los temas centrales. A la fecha, todas las Facultades han modificado sus planes de estudio, asegurando la incorporación de los adelantos científicos y culturales de las últimas décadas en la formación de los futuros graduados. Del conjunto de planes de la universidad (más de cincuenta), el plan de estudios de la carrera de Arquitectura fue el último en modificarse. b. Los avances científicos y los nuevos contextos exigen cambios en la formación Elaborar un nuevo plan es una obligación de la Universidad para con la sociedad y una exigencia de los nuevos escenarios. Las tres décadas transcurridas entre el plan 1977 y el recientemente aprobado muestran un contexto regional y nacional con diferencias notorias respecto de cómo formar a un profesional de la arquitectura. Los cambios no sólo se presentaron en los avances científicos y tecnológicos y en las necesidades y demandas del medio, sino en las formas de ejercicio de las profesiones: nuevos contextos institucionales, nuevos problemas, conocimientos diferentes para una práctica profesional de calidad. 2. El proceso de cambio en la facultad de arquitectura a. El cambio ha sido gradual y tiene historia La Facultad de Arquitectura inició un proceso de discusiones, análisis, debate, a partir de 1993. No fue un proceso lineal y simple, hubo marchas y contramarchas, acuerdos y desacuerdos, borradores que se volvían a escribir, expertos de otras universidades consultados, distintos grados de participación de la comunidad universitaria y, como en el resto de Facultades, mayor intervención de los docentes que de los estudiantes. La participación es un aprendizaje difícil, largo y muchas veces contradictorio. La historia argentina no ha sido precisamente una facilitadora de tales aprendizajes. Este plan 2004 se escribió no sólo teniendo en cuenta los adelantos científicos y tecnológicos y las exigencias que el medio plantea al profesional. Se escribió también teniendo presentes el diseño del plan 1977, las experiencias que dejó su implementación, y las ideas en germen que tenía dicho plan. Pero además se lo diseñó con quienes participaron en aquel plan, por ser coautores, o profesores que lo pusieron en práctica durante veintiocho años, o actuales docentes arquitectos que se formaron con él. Se lo elaboró, en síntesis, desde una historia institucional, profesional y personal que es importante reconocer, interpretar y valorar. b. El debate y la participación fueron parte de la elaboración Hubo diferentes formas de intervención y diversos actores en los diez años de elaboración del nuevo plan. Algunos de esos actores permanecían en la institución, profesores, otros cambiaban, autoridades y estudiantes. No fue un proceso simple, ni se caracterizó por una participación sostenida en el tiempo o por la ausencia de diferencias y conflictos. Hubo momentos de intensa producción e intervención así como etapas de dudas y de búsquedas. Un proceso de cambio de planes de estudio no es sencillo, afirmar que es sencillo sería distorsionar la realidad. Confluyen y debaten intereses diferentes, visiones y trayectorias también diferentes. Esta heterogeneidad es característica primordial de las universidades. Y se manifiesta con mayor evidencia en los momentos de cambios, cuando ocurre la imprescindible intervención de quienes van a ponerlos en práctica. Tan sólo en los últimos tres años [2000–2003] se realizaron 10 Jornadas de Cambio Curricular, que convocaron a profesores y a estudiantes en recopilación y análisis de planes de estudio de otras Facultades, talleres, encuestas, reuniones de área, seminarios, debates con profesores invitados. Este es uno de los ejemplos de la participación a la que se hace referencia. c. Los órganos de gobierno universitario intervinieron en la aprobación. La aprobación del nuevo plan de estudio supuso la intervención de los órganos de gobierno democráticos de la Universidad, Consejo Directivo y Consejo Superior integrados por docentes, estudiantes, graduados y no docentes. Entre el 2001 y el 2003 estos fueron los pasos: En diciembre de 2001 se puso a consideración de las VII Jornadas de Cambio Curricular de la FAU el Documento de Pautas Para el Diseño Curricular, se publicó en el sito Web de la Facultad y se elevó un Informe al Consejo Directivo. Se elevó el Documento al área técnica del Rectorado que realizó valoraciones de la propuesta. En octubre de 2002 el Anteproyecto de Plan de Estudios se elevó al Consejo Directivo de la FAU y, simultáneamente, a todos los docentes y al Centro de Estudiantes para su análisis. Se recibieron y procesaron todas las opiniones. En noviembre de 2003, el Decano presentó al Consejo Directivo de la FAU el Proyecto de Modificación del Plan de Estudios que se aprobó con el voto favorable de doce de sus miembros (Res. N° 508/03 –C.D.) En diciembre de 2003, previa intervención de las áreas técnicas del Rectorado, fue tratado por la Comisión de Enseñanza y aprobado en sesión del Consejo Superior de la UNNE (Res. N° 525/03 – C.S.). 3. Características y valoración del plan de estudios elaborado a. El nuevo plan de estudios está “aprobado y avalado” por el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación. Luego de ser aprobado por el Consejo Directivo de la Facultad y el Consejo Superior de la Universidad, el plan de estudios fue girado a la Dirección Nacional de Gestión Universitaria del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación, para su intervención. En este organismo, el Área de Evaluación Curricular, analizó el título a otorgar, la carga horaria de la carrera, los alcances del título, el perfil del egresado y las materias y contenidos mínimos de las mismas (todo ello figura en el plan) y emitió el 18 de febrero de 2004 un informe de evaluación curricular por el cual se mantiene el reconocimiento oficial y la validez nacional otorgados al título por la Resolución Ministerial Nº 1904/83. Esto quiere decir que no hay una nueva resolución ministerial sino que se mantiene la anterior y por lo tanto se mantiene el reconocimiento oficial y la validez nacional del título a otorgar. b. Los alcances del título (también llamados incumbencias) se amplían y profundizan en el nuevo plan. Con respecto a los alcances reconocidos al plan de estudios, el de 1977 solo contempla 3 alcances, mientras que el nuevo plan los amplía y profundiza a 19, porque retoma la modificaciones realizadas a los alcances del título de arquitecto aprobados por la Resolución Ministerial Nº 133/87 del Ministerio de Educación de la Nación. Por lo tanto este nuevo plan no “saca incumbencias”, sino que incluye las legalmente reconocidas a nivel nacional y que lejos están de apuntar a un “arquitecto especializado”. c. Con el nuevo plan se garantiza que los egresados tendrán las competencias necesarias para desarrollar las prácticas que prevén los alcances del título. En esto consiste el análisis del plan por parte del ministerio: el aval y la resolución ministeriales citados asegura que los egresados podrán ejercer las prácticas profesionales previstas por los alcances del título cursando la carrera tal como está diseñada, lo que es avalado por los documentos antes mencionados. Se expiden en el mismo sentido el Asesor del Plan y Evaluador Externo, de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU), Arquitecto Cesar Naselli (Profesor Titular de la Universidad Nacional de Córdoba) y los integrantes del Consejo Directivo de la Facultad constituidos en una comisión para estudio del plan. Ya que el nuevo plan garantiza el logro de los alcances del título por parte de los egresados, garantiza también una formación integral de los mismos. Los 19 alcances del título representan una formación integral de los egresados, ya que al cursar y aprobar las 4.080 horas que conforman el trayecto común y obligatorio del plan se garantiza que los estudiantes adquieran los conocimientos y procedimientos detallados en los alcances y no solo una formación en algún aspecto del saber arquitectónico. d. El nuevo plan recupera, amplía y mejora el plan de estudios anterior. El nuevo plan de estudios tiene una fuerte influencia del anterior, esto se puede demostrar en: gran parte de las materias troncales del plan se mantuvieron, actualizándose sus contenidos mínimos, ambos se organizan en áreas, ciclos y asignaturas, el plan 77 también contempla materias electivas, ej.: Organización y Administración de Empresas, Conservación del Patrimonio Arquitectónico, Introducción a la Vivienda Económica, etc. el plan 77 incluye la “formación de profesionales de la arquitectura y la orientación hacia futuras especializaciones”. En el nuevo plan se tomaron algunos de los campos del saber de las materias electivas antes mencionadas, y se transformaron en orientaciones del plan. e. El nuevo plan incluye orientaciones dentro de la formación de grado, algunas ya previstas en el plan 1977. El nuevo plan de estudios contempla 7 orientaciones, algunas de ellas retomadas del plan 1977. Hay que aclarar que el plan atiende con 4.080 horas a la formación integral del arquitecto (que se corresponden con las incumbencias del título) y con 360 horas, es decir menos del 10 % de la carga horaria total que debe cursar el alumno, a tomar contacto con aspectos específicos de la arquitectura que pueden denominarse orientaciones. Un egresado puede regresar a cursar las horas correspondientes a otras orientaciones que le interesen, siempre dentro de la carrera de grado y como un alumno regular de la misma. Hay que diferenciar lo que es una orientación en un plan de estudios de una carrera de grado, de una especialización. La primera de ellas es una carga horaria acotada representada por un número reducido de asignaturas que ponen en contacto al alumno con un aspecto determinado del campo de estudio de la carrera. Las especializaciones, junto con las maestrías y doctorados, son carreras de pos grado de mayor duración y profundidad que una orientación y pueden estar o no relacionadas con esas orientaciones que el alumno siguió en la carrera de grado. Además no es obligación cursar una carrera de posgrado para ser reconocido como profesional de la arquitectura y la matrícula profesional se otorga con el título de grado, no de posgrado. f. Ningún plan de estudios es una obra acabada, perfecta e inmodificable Este plan, y cualquier otro plan de estudios, no es sino “una hipótesis de trabajo reajustable”. Entre otras cosas, esto quiere decir que responde a un momento determinado de la profesión y de las disciplinas involucradas, y a un tiempo específico de una universidad, una región y un país. También que es necesario “echarlo a andar” y seguir sus movimientos, sus bondades y sus problemas (de enseñanza, de aprendizaje, de aplicación), de modo de advertir ambos y corregir los problemas por medio de los mecanismos que se convengan. El Programa de Cambio Curricular de la UNNE postula la necesidad de seguimiento y evaluación de los planes de modo de producir los ajustes necesarios en cada caso. Pero ello implica tiempos, datos y razones, no cortes bruscos e intempestivos que anulen decisiones largamente discutidas y fundadas. g. La Facultad de Arquitectura cuenta con los recursos para implementar el nuevo plan La Facultad cuenta con un plantel docente con la formación académica necesaria para llevar adelante la modificación realizada y existe disponibilidad de recursos presupuestarios y de infraestructura que garantizan la ejecución del plan. 4. Consecuencias directas en la vida universitaria de estudiantes y docentes a. El nuevo plan permite mayor libertad de elección de los estudiantes El plan 2004 prevé algunas materias electivas y optativas, lo que permitirá a los estudiantes cursar asignaturas en función de sus intereses y de las necesidades de formación que surjan a medida que avanzan en su carrera. b. Los alumnos del plan 1977 no pierden materias Los estudiantes del plan anterior tienen asegurada la continuidad de todas las materias que deben cursar, porque los equipos docentes y las cátedras se mantienen normalmente. c. Los docentes tienen garantizados sus cargos La modificación del plan de estudios no implica alterar la situación laboral de los docentes de la Facultad. Continuarán a cargo de las materias en las que han sido designados con anterioridad. d. Este plan es parte de la oferta académica de grado de la UNNE, comprometida con la GRATUIDAD y el INGRESO IRRESTRICTO. En ninguna de las resoluciones que aprueban el plan se sostiene el arancelamiento de algún tramo de los estudios. El último año de la carrera es tan gratuito como los años previos. Tiene una ventaja adicional para los futuros graduados: además de la posibilidad de optar por una de las seis orientaciones (360 horas de asignaturas que se cursan en distintos momentos de la carrera, no precisamente al final), una vez recibidos pueden volver a la universidad. ¿Para qué? Para seguir cualquier otra de las orientaciones, DENTRO DE SU OFERTA DE GRADO, GRATUITA, como corresponde a la universidad pública a la que todos pertenecemos, defendemos y sostenemos.