Cometió muchos errores en la vuelta final y terminó lejos del título (12°), que quedó en manos de Ernie Els.

PALM BEACH GARDENS, Estados Unidos (Especial).- José Cóceres sabe que esto de alcanzar un triunfo tiene que ver con rachas, con encontrar la semana justa para dar el golpe. Y tiene claro que no hay que desesperarse, ni siquiera cuando la victoria parece cercana y se escapa sin remedio en los últimos 18 hoyos. El chaqueño tenía una gran oportunidad de volver al triunfo en el PGA Tour después de siete años, había arrancado la jornada a un solo golpe de los punteros, pero nunca pudo encontrar la solidez necesaria en su juego para dar pelea hasta el final. Fueron 74 golpes en la vuelta decisiva, que lo dejaron en un 12° lugar con gusto a poco, teniendo en cuenta las expectativas que tenía. Cinco golpes lo separaron del campeón, el sudafricano Ernie Els (274), al que le alcanzaron 67 golpes (-3) para saltar del 8° lugar al campeonato. “No se dio. Habrá que seguir esperando esa semana que estoy seguro que va a llegar. Me voy contento, más allá de que estuve cerca, porque pegué muy buenos tiros esta semana y jugando así tengo buenas chances en cualquier torneo”, explicó Cóceres un rato después del final del certamen, al tiempo que se reconfortaba a la distancia con el triunfo de Boca y los 180 goles de Palermo. El viento condicionó a todos en la vuelta final, tanto que entre los primeros 15 de la clasificación final sólo tres completaron el último recorrido bajo el par. Cóceres se mostró impreciso en uno de sus fuertes, esos tiros desde el tee que casi siempre van derecho al fairway. Y también en los segundos tiros a la bandera, algo que prácticamente le quitó chances de birdie. Arrancó con un bogey en el 2 (falló para par de 3 metros) y cedió gran parte de sus posibilidades con tres bogeys seguidos en el 6, 7 y 8. Insinuó una recuperación con dos aciertos (birdies en el 10 y 12), pero en el cierre llegaron dos bogeys más, en el 15 y 17. “Se me escapó en los primeros nueve. Cada vez que erré un green lo pagué, y después se me hizo muy cuesta arriba remontarlo, a pesar de que mejoré en la última parte. Lástima ese bogey en el 17, porque quería terminar bien. La tiré al único lugar donde se podía jugar, porque el viento era muy fuerte y había peligro de caer al agua, pero me quedó enterrada contra el borde del búnker y no pude hacer approach y putt como esperaba”, comentó el chaqueño, que hoy partirá rumbo a Tampa, donde participará del PODS Championship, un certamen en el que también estará Angel Cabrera. Más allá del peso de su apellido, pocos tenían en cuenta a Els en las especulaciones previas a la definición. Desde los primeros hoyos, fue el veterano Mark Calcavecchia el que insinuó que tenía con qué aspirar a la victoria. Con dos rápidos birdies (1 y 3) les sacó una luz de ventaja a sus compañeros de vanguardia, pero en el par 3 del 5 la tiró al agua y empezaron sus desventuras. Matt Jones, que jugaba con Cóceres, también se acomodó para dar pelea, y sin embargo cayó víctima de un flojo final (bogey en el 15 y doble bogey en el 17). Mientras tanto, Els trepó al primer lugar con un recorrido de ida impecable (birdies en el 1, 4, 5 y 7), y nadie pudo atraparlo a pesar de que cometió su único bogey cerca del final (17). El inglés Luke Donald tiró de cinco metros para ir al desempate en el 18, pero no pudo. Así, el sudafricano, que la semana última se despidió casi humillado en la primera rueda del Accenture Match Play, demostró lo que pueden los grandes cuando ven la oportunidad y cosechó su 16a victoria en el PGA Tour, tras una sequía de cuatro años. UN PREMIO PARA ANDRÉS ROMERO EN EL TOUR DE ASIA Andrés Romero fue distinguido como el Jugador Joven del Año 2007 por el Tour Asiático, gracias a su excelente actuación en el Abierto Británico y el Campeonato de Jugadores de Europa. El tucumano superó a otros candidatos como Martin Kaymer, Tadd Fujikawa y Rory McIlroy. El coreano K. J. Choi recibió el premio al mejor jugador del año último en la ceremonia realizada durante el Johnnie Walker Classic.