Promovido por la Secretaría de Agricultura, Pesca y Alimentación de la Nación, se llevó a cabo este martes un Taller Regional sobre Desarrollo Rural, con la participación de las Provincias del NEA, con el objeto de analizar la postura de estos Estados en relación con la elaboración de una estrategia global para el combate de la pobreza y el crecimiento de las poblaciones rurales.

Este taller es el quinto realizado en distintas zonas del país; las respectivas conclusiones serán debatidas en la próxima reunión del Consejo Federal Agropecuario previsto para mediados de mayo, en Iguazú, Misiones, y responde a la demanda de las provincias acerca de ser partícipes en todas las decisiones políticas y estrategias que se elaboren en sus territorios. Este planteo fue realizado en el último encuentro del CFA en Bariloche, donde se perfiló además la idea de crear la comisión permanente de Desarrollo Rural en su seno y elevar desde allí las propuestas consensuadas en forma federal a las autoridades nacionales del área. A su vez, en el ámbito de la SAGPyA funciona la Comisión de Desarrollo Rural (CDR), integrada por organismos estatales con decisión y ejecución en las áreas de salud, educación, seguridad, infraestructura y otros, ampliándose ahora con la representación de las distintas regiones del país. La propuesta de la Secretaría es que en cada provincia exista institucionalmente un organismo de Desarrollo Rural que articule las acciones que se definan para esta estrategia. Por otra parte, esta dependencia nacional está llevando a cabo reuniones especializadas de agricultura familiar, con la idea de integrar al sector a este foro y fortalecer los lazos con el sector a través de su participación en la definición de políticas sobre el tema. De este encuentro participaron por la Nación el coordinador de la CDR (SAGPyA) Alejandro Lotti; la coordinadora del subcomponente apoyo al Desarrollo Rural Susana Soberna; el coordinador de los talleres Alfredo Pais; el coordinador nacional del PROINDER Gastón Bordelois; Eliseo Monti de la Gerencia de Extensión del INTA; el representante del subsecretario José De Urquiza ing. Julio Jaime; por Corrientes: el secretario de Producción Miguel Angel Bazzi; el subsecretario del área Mario Voss y los técnicos Luis Almirón y Felipe Escobar y el coordinador provincial del Programa Social Agropecuario Alberto López; representantes del Ministerio de Trabajo de la Nación, de las carteras productivas y agencias de extensión del INTA de las provincias del NEA, entre otros. POBREZA Durante el taller de ayer, se habló de los índices de pobreza y pobreza extrema existentes en el área rural de América Latina y el Caribe que, según la CEPAL, en 1997 englobaban 204 millones de personas. Asimismo, su población rural disminuyó de 122 a 111 de personas, con una tasa media ponderada de crecimiento anual de 0,87%, lo que habla del fenómeno de urbanización provocado por la búsqueda de satisfacer sus necesidades básicas. Según el INDEC, los pobres representan el 38,5% de la población urbana censada en 28 aglomerados urbanos de Argentina. La situación de pobreza en el campo argentino está ligada a condiciones de hacinamiento, mala calidad de la vivienda, problemas de acceso al agua potable, serios problemas de salud, mortalidad infantil, desnutrición. Todas estas carencias llevan a la población a migrar a los centros urbanos. Entre 1988/2002 las explotaciones agropecuarias disminuyeron en 125.000 unidades sobre un total de 421.221 (un 25%), acentuando la concentración en pocas manos y hasta provocando impactos ambientales por la proliferación de cultivos extensivos. De las 297.425 explotaciones agropecuarias que hoy existen en el país, 246.947 tienen menos de 500 hectáreas, sumando una superficie de 23.212.207 has. Las propiedades que exceden las 500 has son 50.478 y ocupan una superficie de 151.596.357 has. DESARROLLO RURAL La utilización de los criterios censales para distinguir lo rural de lo urbano, contribuyó a la pérdida de la visión de las relaciones sociales y económicas entre las concentraciones humanas de la ciudad y los espacios desconcentrados en el campo y por ende, la riqueza de las interacciones y correlaciones de mercados de productos y servicios, ejes locales de la dinámica económica y de las redes de relación social urbano-rurales tan importantes para el sector de la economía campesina. Al introducirse el concepto de desarrollo rural, se amplía la definición de “lo rural” para insertar en forma explícita la amplia gama de interrelaciones sociales y económicas urbano-rurales, incorporando el sentido de “territorialidad” que abarca todo el espectro de injerencia de las actividades que se desarrollan tanto en el campo, como en las poblaciones insertas en el medio y que incluyen otras fuera de lo específicamente agrícola. Durante el taller, se analizaron los conceptos de desarrollo rural, desarrollo territorial y desarrollo local para acordar códigos comunes entre las provincias y la CDR; conocer sus lineamientos de estrategia identificados por las provincias de cada región tratando de encontrar denominadores comunes; conocer las propuestas y las demandas de los Programas de la SAGPYA que integran la CDR y de las provincias y elaborar un programa de trabajo de corto y mediano plazo. Del trabajo en grupo surgieron las coincidencias: las provincias son soberanas en sus decisiones políticas y el rol del Estado nacional es acompañar y apoyarlas; también, orientar a los gobiernos para fortalecer sus estructuras y la eventual falta de capacidad instalada, en todos sus estratos. En este sentido las provincias subrayaron (y defendieron) su territorialidad y su necesaria participación en todas las decisiones que se adopten desde la nación y que afecten sus economías, incluyendo la estrategia de desarrollo rural que se elabore para el país. Por otra parte, las provincias consideraron la necesidad de descentralizar el manejo de los fondos que se destinen a programas de desarrollo rural, entendiendo que de esta forma se ejecutarán con mayor eficiencia