Rural
El girasol frente a la nueva campaña
REFERENTES CUENTAN SU EXPERIENCIA
ASAGIR realizó un relevamiento para conocer los desafíos que enfrenta el cultivo de cara a la próxima campaña en cada una de las principales zonas productoras del país.
El estudio, realizado entre abril y mayo de 2007, incluye varios aspectos vinculados al comportamiento del girasol y los cambios de manejo que serán tenidos en cuenta para encarar el próximo ciclo agrícola. Uno de los referentes consultados fue Daniel Sorrentino, técnico de la zona de General Roca (Córdoba), Rancul (La Pampa) y Gobernador Pedernera y Gobernador Dupuy (San Luis). Allí, el clima no fue favorable para el girasol en la última campaña, pero los buenos precios lo mantienen como una opción firme para la actual. Para la nueva siembra, Sorrentino sostuvo que le prestará “mayor atención a la elección de cultivares tolerantes a verticilium y a roya negra y a la programación de siembras de octubre, ya que los perfiles de suelo entrarán a la primavera con un mayor contenido de humedad que la pasada”. Al referirse a la región Este de La Pampa y Noroeste de Buenos Aires, Gustavo Duarte sostuvo que durante la última campaña, así como los resultados de la soja estuvieron por debajo de las expectativas, tanto el maíz como el girasol respondieron acorde a lo esperado. Duarte expresó que “el cultivo de girasol tuvo un desarrollo muy normal, con buen porte de plantas, razón por la cual los entresurcos se cubrieron con cierta rapidez facilitando el control de malezas. Incluso los preemergentes y herbicidas de acción total tuvieron un efecto muy satisfactorio. No se manifestó problema alguno de difícil diagnóstico”. Para Duarte, la próxima campaña va a venir en su caso con cierta modificación del portfolio de híbridos, con mayor proporción de alto oleico e híbridos de alto potencial. También trabajará sobre el monitoreo de plagas nuevas, enfermedades y aplicación de fungicidas. A su turno, Esteban Bajcetic, referente del Centro-este de La Pampa y oeste de la provincia de Buenos Aires, expresó que ” el girasol fue el que menos diferencias tuvo entre lo estimado y lo efectivamente obtenido en materia de rendimiento”. De cara a la nueva campaña, el productor planea aumentar los tiempos de barbecho, evitando lotes que vengan de verdeos o de pasturas. “Es probable que trabaje dándoles un tratamiento diferencial, atrasando las siembras (con la reducción en potencial de rinde que eso conlleva). En años como los que venimos teniendo, sin precipitaciones abundantes en primavera que hacen que los perfiles no se recarguen, el hecho de utilizar durante el invierno los lotes no es nada barato para la agricultura”, sostuvo. Francisco Fernández Candia, del Sudoeste de Buenos Aires, con sede en Necochea, sostuvo que los girasoles anduvieron por los 1800 kg. /ha en lotes con limitantes de tosca y en el resto 2500 kg/ha, con rindes superiores a los cultivos de soja. Fernández Candia no planea introducir modificaciones tecnológicas para la nueva siembra. “Miraré roya, ya que hay ensayos de este año que aún no he visto de funguicidas en girasol. Me parece que habría que monitorear y aplicar”, expresó. Para Eugenio Ducos, del Sudoeste de la provincia de Buenos Aires, con sede en Coronel Suárez y General La Madrid, “el cultivo de girasol se implantó relativamente bien, llovió en octubre y si bien noviembre fue seco, no fue una limitante para lograr buen stand de plantas”. Para el asesor, las altas temperaturas y el stress hídrico de enero y febrero, sumado al voraz ataque de isoca con un control dudoso o tardío, fueron los responsables de un rendimiento a cosecha menor al esperado y con grano muy liviano. En tanto que los lotes en siembra directa bien manejados marcaron una diferencia notable a favor del rendimiento. “Hay que difundir la siembra directa en girasol”, enfatizó Ducos. “Es una gran aliada para estabilizar los rendimientos. Permite no depender de una lluvia para poder sembrar y evitar los efectos negativos en años como éste, de altas temperaturas y déficit de humedad”, agregó. Para Ducos, si la directa en girasol no se difunde más de lo esperado, “es por falta de dedicación del productor a ser un poco más “prolijo” (la soja permite desprolijidades), disponer de una buena sembradora y también porque la convencional perdona más los errores que la directa”. De cara a la próxima campaña, este productor se propone una mejor elección de cultivo en zonas bajas, donde si bien la soja prospera muy bien, el girasol da más seguridad a cosecha (cosechas tempranas). También una mejor ubicación o uso de los girasoles CL en la elección de lotes, ya que quedó comprobado que un buen control de malezas no es el único problema a solucionar en el cultivo de girasol. Para Ducos, el cultivo de girasol está muy arraigado en la zona, pero la soja pareciera que cada vez es más fácil de hacer y cada vez rinde más. “Hay campos que son netamente girasoleros porque presentan riesgo de cosecha para la soja. Pero para el resto, buenas y seguras señales del valor futuro comparativo con la soja, le permitirán al cultivo mantener su terreno”, sostuvo. En el Chaco, Federico Varela recomienda tratar de implantar el cultivo con buena humedad en los lotes de siembra convencional, manejando la duración de los barbechos y la alternancia de labores culturales y aplicaciones de herbicidas totales. “Los barbechos largos de girasol a girasol son los que mayor estabilidad de rendimiento proporcionan, como alternativa de rotación es posible alternar con soja primavera, pero dado los variables rindes obtenidos en la ultima campaña y la baja superficie destinada a esta oleaginosa no representa una alternativa de rotación muy utilizada”, relató Varela. “Ajustar la fertilización en los lotes de acuerdo a años de agricultura del campo”, es otro de los aspectos destacados por el asesor. “La fertilización puede realizarse en forma parcial: en el caso de la urea, 30 kg/ha a la siembra y 50/60 kg/ha al escardilllo o bien 80/90 kg/ha directamente al escardillo”, explicó. En tanto, en los planteos de girasol en SD no se cambiará mucho respecto al manejo, dado que la implantación del cultivo está casi siempre determinada por la ocurrencia de lluvias en el mes de julio, algo que tiene baja probabilidad de ocurrir. Sólo el manejo de barbechos de sorgo temprano cosechado en febrero tal vez permita implantar girasol en julio. A diferencia de los lotes de siembra convencional, los planteos en directa sufren más las heladas tempranas y tienen una emergencia en general más despareja y lenta”, expresó.

Rural
Pobreza intelectual en la sanción de la modificación de la ley de Manejo del Fuego
COMUNICADO DE CARBAP
La reciente sanción en el Senado Nacional de las modificaciones a la Ley de Manejo del Fuego 26.816, las cuales prohíben por el término de treinta (30) años desde la extinción del fuego cualquier actividad agropecuaria que sea distinta al uso y destino que la superficie tuviera previo al momento del incendio, independientemente si el incendio fuera provocado o accidental, claramente atenta contra el productor agropecuario y su seguridad jurídica.
Esta nueva prohibición, además, se aplica a las superficies con bosques implantados o nativos, sumando nuevas restricciones a las ya existentes en la ley de bosques por hasta sesenta (60) años.
Es de destacar que estas restricciones afectan profundamente el derecho de propiedad, además de ser aplicadas incluso a aquellos individuos que no son culpables de estos incendios en el caso de situaciones naturales, provocados por terceros o accidentales, tan comunes en el sur de nuestras provincias de Bs As y La Pampa en campos lindantes a vías del ferrocarril en tiempos de seca. Se trata de una situación insólita e inconstitucional, porque se impide disponer del inmueble alterando el derecho a la propiedad.
Del mismo modo los propietarios deben soportar las consecuencias de la ineficiencia de un Estado que no es capaz ni de prevenir incendios tanto accidentales o como consecuencia de actos de vandalismo como así tampoco de aprehender y someter a la justicia a quienes lo hubieran originado.
Estas modificaciones a la ley, que limitan el uso privado y comercial de tierras incendiadas, plantean una mirada prejuiciosa y muy injusta sobre el productor agropecuario, en quien recae la culpabilidad del hecho aun no siendo responsable, afectando la garantía constitucional de presunción de inocencia, quien además de haber perdido su capital de trabajo o sus inmuebles por estos hechos debe enfrentar una condena por un evento sobre el cual no tiene responsabilidad alguna y restricciones por décadas.
Desde la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), entendemos que esta nueva ley es el resultado de la incapacidad intelectual de los legisladores en la búsqueda de herramientas lógicas, inteligentes y realistas para atender una problemática seria y compleja, ante la fácil y sencilla receta de aplicar políticas partidarias en temas legislativos nacionales, actitudes revanchistas y castigos en lugar de reales soluciones autosaboteando al país al condenar previamente al productor impulsando normas que promueven incertidumbre sectorial .
Rural
Elaboran mapa de aptitud de tierras para el cultivo de mandioca en Corrientes
Departamento de Comunicación Institucional del Rectorado de la Universidad Nacional del Nordeste
Un proyecto conjunto entre investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y de INTA avanza en la elaboración de un mapa de tierras aptas para el cultivo de mandioca en la provincia de Corrientes. Recientemente se relevó un área de 915 mil hectáreas al norte de la Provincia de Corrientes, y se identificó que bajo el sistema de manejo tradicional solamente el 3 % de esa zona posee tierras muy aptas y el 18 % de aptitud moderada, pero con manejo tecnificado el área de tierras muy aptas podría ampliarse al 13%.
La superficie cultivada con mandioca en Argentina ha decrecido los últimos años. La reducción del área cultivada puede estar ligada al desconocimiento de la distribución de las tierras aptas para su cultivo, base estructural de la productividad de este cultivo.
La provincia de Corrientes posee clima subtropical homogéneo pero una gran diversidad de suelos. Si bien Corrientes ha sido tradicionalmente productora de mandioca, sin embargo también el área ha disminuido considerablemente a nivel provincial.
En ese contexto, investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y del "Grupo Recursos Naturales" del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), consideraron pertinente evaluar la aptitud de las tierras para el cultivo de mandioca en la provincia.
En una reciente publicación, presentada en el “XXVII Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo”, dieron a conocer los resultados de aptitud para el cultivo de mandioca en un área de 914.195 hectáreas ubicadas al norte de la Provincia de Corrientes.
Este relevamiento, se suma uno anterior en el cual los investigadores ya habían identificado las tierras de aptitud para la mandioca en una zona de 913 mil hectáreas en el noroeste de la provincia, desde Bella Vista y San Roque hacia el norte.
"La información generada representa un aporte disponible para los actores involucrados en el territorio" destacó la Ing. Agr. (Mgter) Ángela Burgos, investigadora de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y referente del proyecto en el que además participaron la Ing. Agr. Silvia Perucca (INTA), el Dr. Ricardo Medina (UNNE), el Licenciado Raúl Barrios (INTA) y el Dr. Ditmar Kurtz (INTA y UNNE).
En el caso del relevamiento del área de 914.195 hectáreas ubicadas al norte de la Provincia, de acuerdo a lo observado, bajo el sistema de manejo tradicional solamente el 3% del área posee tierras muy aptas y el 18% de aptitud moderada.
Pero haciendo camellones el área de tierras muy aptas se amplía al 5 % y con manejo tecnificado pasa al 13 %, 120.536,57 hectáreas que podrían ser muy aptas para el cultivo, cuadriplicándose la superficie muy apta al dejar el manejo tradicional.
DETALLES DEL ESTUDIO
Para la evaluación de aptitud de tierras, los investigadores de la UNNE e INTA utilizaron un modelo que confronta los requerimientos del tipo de uso (demanda) con la información edafo climática (oferta).
Los resultados se categorizaron en tierras de clase "Muy Apta" (sin limitaciones o leves, que no afectan el uso sostenido, ni los rendimientos; "Moderada" limitaciones moderadas con rendimientos entre el 75-50% por debajo del esperado; "Marginal" con importantes limitaciones con reducción de rendimientos esperados entre 50-25% del potencial; y "No Apta" cuyo uso no es recomendable con la tecnología descripta.
Se evaluaron tres Tipos de Utilización de la Tierra: "Manejo Tradicional", "Manejo Tradicional y plantación en lomos" y "Manejo Tecnológico adecuado para la zona, bajo labranza reducida". Los Requisitos de Utilización de la Tierra (RUT) se seleccionaron de bibliografía existente y los datos de suelos a escala 1:50.000 se tomaron de trabajos anteriores.
Para elaborar los árboles de decisión se usaron textura del horizonte superficial, riesgo de exceso hídrico, riesgo de erosión, profundidad efectiva, drenaje, índice de encostramiento, contenido de materia orgánica, fósforo, pH, conductividad eléctrica y sodio intercambiable.
Los resultados de la evaluación se volcaron en un Sistema de Información Geográfica.
RELEVANCIA DEL TRABAJO
La Ing. Burgos explicó que las principales limitaciones que se presentan en el área corresponden a riesgos de excesos hídricos por inundaciones, encharcamientos y/o anegamientos.
Remarcó que la realización del Mapa de Suelos con aptitud puede transformarse en una herramienta clave para los productores en la selección de los sitios para el cultivo, así como de las estrategias de manejo del cultivo.
Señaló que el modelo desarrollado está disponible para ser utilizado en otras áreas, incluso en provincias vecinas, según destacaron los investigadores de UNNE e INTA.
Los resultados del proyecto de aptitud de tierras para el cultivo de mandioca en Corrientes fueron presentados en el marco del XXVII Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo, organizado por la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE en formato virtual del 13 al 16 de octubre.
El trabajo de investigación se enmarca dentro del Proyecto de Investigación denominado “Sistemas de Producción y Agregación de Valor en Cultivos Industriales Regionales” incentivado por la Secretaría General de Ciencia Técnica de la UNNE (PI 18A/001) que se lleva adelante bajo la dirección de la Ing. Agr. (Mgter) Ángela Ma. Burgos.
Un proyecto conjunto entre investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y de INTA avanza en la elaboración de un mapa de tierras aptas para el cultivo de mandioca en la provincia de Corrientes. Recientemente se relevó un área de 915 mil hectáreas al norte de la Provincia de Corrientes, y se identificó que bajo el sistema de manejo tradicional solamente el 3 % de esa zona posee tierras muy aptas y el 18 % de aptitud moderada, pero con manejo tecnificado el área de tierras muy aptas podría ampliarse al 13%.
La superficie cultivada con mandioca en Argentina ha decrecido los últimos años. La reducción del área cultivada puede estar ligada al desconocimiento de la distribución de las tierras aptas para su cultivo, base estructural de la productividad de este cultivo.
La provincia de Corrientes posee clima subtropical homogéneo pero una gran diversidad de suelos. Si bien Corrientes ha sido tradicionalmente productora de mandioca, sin embargo también el área ha disminuido considerablemente a nivel provincial.
En ese contexto, investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y del "Grupo Recursos Naturales" del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), consideraron pertinente evaluar la aptitud de las tierras para el cultivo de mandioca en la provincia.
En una reciente publicación, presentada en el “XXVII Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo”, dieron a conocer los resultados de aptitud para el cultivo de mandioca en un área de 914.195 hectáreas ubicadas al norte de la Provincia de Corrientes.
Este relevamiento, se suma uno anterior en el cual los investigadores ya habían identificado las tierras de aptitud para la mandioca en una zona de 913 mil hectáreas en el noroeste de la provincia, desde Bella Vista y San Roque hacia el norte.
"La información generada representa un aporte disponible para los actores involucrados en el territorio" destacó la Ing. Agr. (Mgter) Ángela Burgos, investigadora de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y referente del proyecto en el que además participaron la Ing. Agr. Silvia Perucca (INTA), el Dr. Ricardo Medina (UNNE), el Licenciado Raúl Barrios (INTA) y el Dr. Ditmar Kurtz (INTA y UNNE).
En el caso del relevamiento del área de 914.195 hectáreas ubicadas al norte de la Provincia, de acuerdo a lo observado, bajo el sistema de manejo tradicional solamente el 3% del área posee tierras muy aptas y el 18% de aptitud moderada.
Pero haciendo camellones el área de tierras muy aptas se amplía al 5 % y con manejo tecnificado pasa al 13 %, 120.536,57 hectáreas que podrían ser muy aptas para el cultivo, cuadriplicándose la superficie muy apta al dejar el manejo tradicional.
DETALLES DEL ESTUDIO
Para la evaluación de aptitud de tierras, los investigadores de la UNNE e INTA utilizaron un modelo que confronta los requerimientos del tipo de uso (demanda) con la información edafo climática (oferta).
Los resultados se categorizaron en tierras de clase "Muy Apta" (sin limitaciones o leves, que no afectan el uso sostenido, ni los rendimientos; "Moderada" limitaciones moderadas con rendimientos entre el 75-50% por debajo del esperado; "Marginal" con importantes limitaciones con reducción de rendimientos esperados entre 50-25% del potencial; y "No Apta" cuyo uso no es recomendable con la tecnología descripta.
Se evaluaron tres Tipos de Utilización de la Tierra: "Manejo Tradicional", "Manejo Tradicional y plantación en lomos" y "Manejo Tecnológico adecuado para la zona, bajo labranza reducida". Los Requisitos de Utilización de la Tierra (RUT) se seleccionaron de bibliografía existente y los datos de suelos a escala 1:50.000 se tomaron de trabajos anteriores.
Para elaborar los árboles de decisión se usaron textura del horizonte superficial, riesgo de exceso hídrico, riesgo de erosión, profundidad efectiva, drenaje, índice de encostramiento, contenido de materia orgánica, fósforo, pH, conductividad eléctrica y sodio intercambiable.
Los resultados de la evaluación se volcaron en un Sistema de Información Geográfica.
RELEVANCIA DEL TRABAJO
La Ing. Burgos explicó que las principales limitaciones que se presentan en el área corresponden a riesgos de excesos hídricos por inundaciones, encharcamientos y/o anegamientos.
Remarcó que la realización del Mapa de Suelos con aptitud puede transformarse en una herramienta clave para los productores en la selección de los sitios para el cultivo, así como de las estrategias de manejo del cultivo.
Señaló que el modelo desarrollado está disponible para ser utilizado en otras áreas, incluso en provincias vecinas, según destacaron los investigadores de UNNE e INTA.
Los resultados del proyecto de aptitud de tierras para el cultivo de mandioca en Corrientes fueron presentados en el marco del XXVII Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo, organizado por la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE en formato virtual del 13 al 16 de octubre.
El trabajo de investigación se enmarca dentro del Proyecto de Investigación denominado “Sistemas de Producción y Agregación de Valor en Cultivos Industriales Regionales” incentivado por la Secretaría General de Ciencia Técnica de la UNNE (PI 18A/001) que se lleva adelante bajo la dirección de la Ing. Agr. (Mgter) Ángela Ma. Burgos.