Signos Literarios
Eugenio Montale (1896 -1981)
XENIAS (*)
La crítica literaria y sobre todo poética entendida como ejercicio de espejo, como reflejo de la propia interioridad en un Yo poético ajeno, es el motor de esta breve reflexión para intentar una aproximación al mundo de Eugenio Montale, a la dimensión de sus Xenia (1964-67), y a las imágenes que el tiempo nos devuelve desde sus críticos.
El texto que ha disparado este pequeño ensayo, su magdalena proustiana, es un estudio introductorio a los Xenia de Raffaele Pinto, editado en Barcelona -Edicions 62, Els Llibres de l´ Escorpí, Poesia Universal del Segle XX- , que cita -en nuestra traducción-, la respuesta del poeta genovés a sus críticos, en Satura (1971): Los críticos repiten/ por mí despistados/ que mi tú es una institución/ Sin este mea culpa habrían sabido/ que en mí las palabras son una/ aunque aparezcan multiplicadas en un espejo/ El mal es que el pájaro preso en la jaula/ no sabe si es él mismo/ o uno de sus muchos duplicados. El contexto de la respuesta de Montale puede entenderse como réplica a los defensores de la “poesía pura” -¿los mismos que hablaban del poeta “en zapatillas” tras la primera edición de Satura?-, que interpretaron el título de su primera sección -El tú-, como un artificio formal o “institución retórica” que no admitiría lecturas realistas; debate situado en el punto álgido de las polémicas duras de Montale con sus críticos y algunos poetas de las corrientes herméticas. El punto de la polémica, ahora como entonces, giraba en torno a la posibilidad del lenguaje poético como comunicación con el Otro, o en sentido diametralmente opuesto, su reducción a mundos a los que el lector debe ser capaz de ascender, a su cuenta y riesgo. Los reiterados intentos de encasillar a Montale en categorías y escuelas que le resultaron siempre ajenas encontrarían diversas y en ocasiones cáusticas respuestas en poemarios posteriores, en Satura y en el Diario del ´71 y del ´72 Con todo este panorama, la crítica de los años ´60 y ´70, sobre todo italiana, no pareció casi nunca reconocer algunos aspectos sutiles de la poética de Montale, de su trasfondo -por más que el mismo, acaso con ironía, lo negara-, filosófico, lo que el mismo Raffaele Pinto denomina con acierto “antisimbolismo”, en referencia a la sistemática tarea de los trabajos y los días de Montale de buscar un denominador común entre el lenguaje poético y el cotidiano. Esa búsqueda, plasmada inicialmente en I limoni y otros poemas de Ossi di Sepia, continuó por cierto escapando a la sagacidad de los críticos. En cuanto a los Xenia, el lector puede descubrir una suerte de compleja composición de luz entre espejos que recorre los poemas, escritos pocos meses después de la muerte de su esposa, Drusilla Tanzi -por su apodo familiar Mosca-, evocada en la inolvidable melancolía de aquel “Caro, piccolo insecto”. Desde el ostracismo del poeta, y en múltiples facetas, la segunda persona, gramatical o real, se va transfigurando. Las formas en que la aparente multiplicidad de lo real se resuelven en una única figura femenina fantasmal, con ecos de Beatrice, son parte de ese equilibrio único de sus momentos más altos, como el inicio del poema 14 que cierra el primer libro de Xenia: Dícono che la mia/ sia una poesia d´ inappartenenza/Ma s´ era tua era di qualcuno/ di te che non sei più forma, ma essenza. (Decían que la mía era una poesía de no pertenencia/ Pero si era tuya era de alguien/de ti que no eres ya forma/sino esencia) versos que retratan como pocos el desapego de los recuerdos que se esfuman, junto con el dilema de Platón y Croce, del ser navegando entre la forma terrena y la esencia, tan imposible de captar como la imagen del pasado en el espejo. El poeta sobrevivirá en sus lectores, en el reflejo de sus obras, mucho después de su muerte aparente, en estos textos únicos. Quizá evocado a la distancia, en algún café de Milán, con su amado Félix Krüll ante sí, un poco distraído por las historias de los camareros que tan bien conociera. O bien muchos años antes, con una Biblia deshecha entre las manos y los ojos del alma muy lejos. Como la huella de luz en ciertos cuadros, pasando y permaneciendo en la memoria con la que interpretamos sus imágenes. Pero el espejo por momentos parece curvarse, y les da a los críticos -nos da una vez más, a la luz de la mirada poética-, una extraña imagen – siempre cambiante, como el espejo de los cielos-, de nosotros mismos. © Alejandro Drewes Alejandro Drewes es poeta y narrador, con premios nacionales en prosa y poesía y obras publicadas en antologías, la primera de ellas Confluencia Poética (Tomo I), editada en Buenos Aires (1997) por Ediciones Nubla y las últimas en Madrid y Buenos Aires:: Vivencias Secretas (Centropoético, 2004; la Antología 55° Aniversario (1950-2005) del Ateneo Poético Argentino y la antología Pura luz contra la noche. Tres generaciones de poetas, editada por De Los Cuatro Vientos (Buenos Aires, 2006). Moderador del Foro Azulypalabras y Coordinador (2005-2007) de lecturas del grupo AERA en el Ateneo Poético de la S.A.D.E. y colaborador permanente de la revista internacional de arte y literatura Francachela, dirigida por la poeta y ensayista Norma Pérez Martín. Poemas de su autoría han sido editados en diversas revistas y webs literarias, incluyendo las revistas Ser en la Cultura, Paradoxas, Rampa, LaBarcadePapel y Axolotl. Notas de crítica de poesía publicadas por Gibralfaro (Facultad de Letras, Universidad de Málaga) y obra en prosa por Adamar – Revista de creación (Madrid). (*) Por Alejandro Drewes
En honor a los 120 años del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación firmado entre Argentina y Japón el 3 de Febrero de 1898, se lanzará el jueves próximo desde el Jardín Japonés (Buenos Aires) el primer concurso internacional de Poesía Japonesa “Tierra de Haikus”. La iniciativa es impulsada por la Fundación E Jendú Arte y Cultura, Imagen Diplomática, la Fundación “Andresito de las Misiones” y el Observatorio Social por la Paz y cuenta con el auspicio de la Embajada Japonesa en Argentina.
Las organizaciones que impulsan el certamen desarrollan sus actividades con miras a la reafirmación y expansión en todo el mundo de la Cultura de paz, con especial atención a la filosofía y los objetivos de Naciones Unidas, representados en sus distintos estamentos y agencias, como así también en sus diversos Programas, Fondos y Organismos, que tienen por principal causa el derecho de todos los pueblos del universo a la paz duradera y definitiva.
Este Primer Concurso Internacional tiene como objetivo principal la exaltación de la poesía en general y de la poesía japonesa en particular; al mismo tiempo que busca reafirmar el espíritu de confraternidad y amistad entre el Japón y la Argentina, en Honor y Homenaje a los 120 años del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación firmado entre ambos países el 3 de Febrero de 1898
Vale señalar que el milenario Haiku, es una composición poética japonesa que consta consecutivamente de tres versos de cinco, siete y cinco sílabas (diecisiete en total).
Signos Literarios
Otra publicación en revista internacional para teórico correntino
FRANCISCO TOMÁS GONZÁLEZ CABAÑAS
La propuesta de reforma democrática, “El voto anticipado” del autor Francisco Tomás González Cabañas fue publicada por la prestigiosa Revista española de la transparencia, ISSN-e 2444-2607, Nº. 6, del año 2018, en las págs. 102-104. Para el creador del índice democrático, herramienta que mide las prácticas democráticas en los distintos poderes de los distritos auditados, se trata de la publicación número quince por parte de revistas internacionales que imponen estándares de exigencia y de calidad para publicar desarrollos teóricos, que como en otras elaboraciones de González Cabañas (voto compensatorio, gabinete ciudadano, cámara de dipunadores) sostienen novedosos criterios o categorías para remozar la democracia como la experiencia que puede, o debe, seguir siendo mejorada para representar, palmariamente, el gobierno del pueblo o de los ciudadanos.
“Al establecer la posibilidad de un voto anticipado, se conseguirían modificaciones sustanciales, giros copernicanos en la política cotidiana, que al constituirse en concomitantes, complementarias o en paralelo, con el voto o sufragio clásico y tradicional, de ningún modo significara una ruptura conflictiva, una instancia revolucionaria traumática, sino simple y llanamente la consolidación de la democracia misma, resignificando, desde lo electoral su definición histórica como etimológica.
El voto anticipado, permitirá que el ciudadano, en los tiempos actuales en donde considera un valor positivo el compartir sus gustos, preferencias y elecciones, ante sus semejantes, por intermedio de plataformas virtuales o de redes, haga lo propio con su preferencia electoral o política. El voto o sufragio clásico, que en varias aldeas occidentales, sigue amparado por ley, para que se lo respete en su condición secreta, fungió con utilidad hace décadas atrás, cuando las realidades sociales y existenciales no habían sido gravitadas por la explosión del mundo digital y de la cada vez más influyente inteligencia artificial. Sería más que una falta de tino el señalar, como se vio modificada la vida diaria del occidental promedio, de dos décadas a esta parte, más bien, es incomprensible como aún no se haya generado, hasta esta oportunidad, la posibilidad para que el ciudadano moderno, pueda hacer visible, pueda exteriorizar sus elecciones políticas, y en el caso de que lo decida que lo comparte y difunda, tal como lo hace con todos los otros (al menos tiene tal posibilidad) aspectos de su vida que no solo son considerados públicos, sino también áreas o zonas privadas”.
Estos párrafos que hacen mención al desarrollo teórico de Francisco Tomás González Cabañas, publicados por la revista internacional de marras, evidencian el grado de audacia teórica, de arriesgada creatividad, sostenidas en giros arguméntales y en razonamientos acendrados en la historia del pensamiento que lo preceden al correntino, construyendo para sus consideraciones y categorías un sendero en donde seguramente tantos más que vengan con él o detrás suyo, erigirán bajo estos pilares una nueva consideración de lo político como de lo democrático.
El texto “Crónicas de Bosque” de Francisco Tomás González Cabañas, fue publicado en la Revista editada en el Perú “Dúnamis”, en su número 8 del año 9, correspondiente a Septiembre del año en curso.
Con la presente el autor suma 8 publicaciones en revistas internacionales (la mayoría de ellas especializadas en filosofía) en menos de un año, como dos libros de filosofía política publicados, uno de ellos (El Voto Compensatorio) editado en Alemania, y la aceptación a más de una veintena de diferentes congresos internacionales de diversas ponencias oportunamente enviadas y aceptadas.
Crónicas de Bosque, es un relato ficcional, que vislumbra una crítica social que encierran al autor en sinuosos laberintos de persecución e indiferencia por parte de quienes pretenden una sociedad sesgada, en donde las decisiones son tomadas por facciones con poder circunstancial y por tanto el ejercicio ciudadano y la vida democrática, pasan también a ser literatura o filosofía ficcional.
CRÓNICAS DE BOSQUE
Se estima que tiempo antes de la existencia de los guaraníes nuestras tierras fueron habitadas por una civilización que ha dejado muy pocos rastros de su existencia. Alcanzando el grado de mito, como la célebre Atlantis, daremos cuenta, de la información que contamos acerca de la cultura que podríamos dar en llamar como de los “Gentereí”.
En un tiempo no precisado de la historia, en lo que actualmente se conoce como el litoral argentino, una cultura de peculiares características, tuvo su apogeo y extinción, bajo sinuosidades sociales y políticas, que en la actualidad nos pueden parecer, casi familiares y cotidianas, por lo que no es demasiado arriesgado suponer, que pese a los siglos transcurridos y por más que las evidencias materiales no sean contundentes, tenemos una carga genética o arrastramos signos de quiénes serían nuestros antepasados directos; los Gentereí.