Con una técnica sencilla, la energía vital universal puede circular a través de sus manos. Conozca todos los secretos de esta técnica milenaria, reiki es una palabra japonesa compuesta por “ki”, la energía vital que anima cada ser vivo, y “rei”, universal, entonces, reiki es la energía vital universal, todos los seres vivos recibimos energía vital del universo permanentemente, aunque a veces nuestras “antenas” se desintonizan y no recibimos la cantidad suficiente.

La enfermedad, la angustia, el estrés, el dolor, la depresión, el enojo, etcétera, son consecuencia de una desarmonización del ki. A través del reiki puede volverse a cargar la energía perdida y equilibrar el aspecto que sea necesario. Al elevar el ki, las defensas del cuerpo se elevan y aumenta su capacidad autocurativa, mejora el estado de ánimo, la salud en general y la claridad mental. LA HISTORIA El reiki es un arte milenario que fue adaptado por el médico japonés Mikao Usui en la década de 1920. Él quería unir las medicinas orientales tradicionales con la medicina occidental. En esa época, en Japón se buscaba abrirse a la cultura occidental y Usui creó este sistema para favorecer la recuperación de los pacientes en los hospitales. Asimismo, a partir del 13 de julio de 2000, el reiki fue reconocido por decreto del ex presidente de los Estados Unidos Bill Clinton como terapia energética complementaria. Además, Clinton creó una comisión donde se trabaja con distintas medicinas alternativas, dentro de las cuales está el reiki. En este momento hay cerca de cien hospitales estadounidenses que dan reiki como parte de sus servicios. Asimismo, en Alemania hay cerca de un millón de practicantes. ¿CÓMO HACER REIKI? Una persona puede acercarse al reiki por dos caminos: a través de una sesión o recibiendo el aprendizaje de la técnica. Para tomar una sesión de reiki, la persona se quita sólo los zapatos y se acuesta en una camilla. El reikista usa sus manos como herramientas para transmitir esta energía vital universal. Para ello, las coloca muy cerca del cuerpo de la persona, sin tocarla, sobre algunos puntos clave según las necesidades del caso. Por ejemplo, puede usarse para aliviar enfermedades como la artritis y dolores en los huesos, contracturas, estrés o problemas emocionales. La sesión dura aproximadamente una hora luego de la cual la persona se siente como si hubiera descansado profundamente durante tres horas. Durante la experiencia pueden aparecer sensaciones de frío o calor. Estas corresponden al tipo de energía que usted necesita y su cuerpo absorbe. El reikista no tiene poder sobre esta energía y no puede enviar la energía equivocada. Si percibe frío, se trata de energía yin. En cambio, el calor indica el paso de la energía yang. Cuando la temperatura es templada, la energía es yin yang, el equilibrio. Por otra parte, cualquier persona, sin necesidad de contar con dones o poderes especiales, puede aprender la técnica y aplicarla sobre sí misma o los demás. Para ello tendrá que realizar un curso de tres niveles. Cada nivel dura aproximadamente 10 horas y se realiza generalmente en un fin de semana. En algunas escuelas, el tercer nivel se hace más extenso. En el primer nivel, el maestro usa el poder de sus manos para “resintonizar” uno de los canales de energía para que la persona pueda recibir el reiki y transmitirlo. Esta “antena” está ubicada en la coronilla, pasa por el corazón y sale por las manos. Además, el maestro fabrica un “filtro” para que la persona no reciba ni emita energías negativas a través de ese canal. Todo esto se hace con la energía reiki que fluye a través de las manos y a partir del conocimiento adquirido. No se trata de pases mágicos ni poderes ocultos. No es dañino, no tiene contraindicaciones y no duele. Los expertos explican que se trata de dar a la persona más de lo que ya tiene: energía vital, y permitirle canalizarla para brindarla a otros seres vivos. Como a partir de ese momento la persona no da su propia energía, sino que funciona como un canal, no importa si el reikista o la persona que recibe la sesión están enfermas, malhumoradas, enojadas, tristes o distraídas. El reiki pasa igual, sin esfuerzo ni concentración y las energías negativas se van, pero no se transmiten de uno a otro. Con estos conocimientos puede brindarse energía positiva a las plantas, los animales y las personas en forma directa. Además, puede mejorarse la armonía del agua, los alimentos o los medicamentos. En el segundo nivel, se aprende a usar también los “símbolos de reiki”. Estos incluyen una figura que se dibuja en el aire con las manos y un nombre. Con ellos puede enviarse energía vital universal a personas que están lejos, por ejemplo internadas en un hospital, a zonas de desastres naturales, a zonas de guerras. Incluso puede ayudarse a mejorar el equilibrio del planeta. También se puede armonizar la energía de una casa, un negocio, el lugar de trabajo, un automóvil o cualquier lugar. El tercer nivel está destinado más que nada a aquellas personas que desean dedicarse a enseñar reiki. Aquí se aprende también a usar la energía de los cristales y piedras. Y se perfeccionan y complementan los conocimientos anteriores y se amplían las capacidades. ¿ES PELIGROSO? El reiki no representa ningún riesgo, ya que se trata de una energía que ya está en el organismo en forma natural. Sólo agrega vitalidad, por lo que pueden recibirla sin problemas plantas, animales, chicos, ancianos, mujeres embarazadas, personas sanas o enfermas, casas, autos y hasta el mismo planeta. Además, en las sesiones de reiki la persona absorbe sólo la cantidad de energía que necesita. Cuando ya cubrió sus necesidades, el reikista también percibe que “se cerró la puerta”. Por lo tanto, no existe el riesgo de “sobredosis”. Greta Frankenfeld Asesoramiento: Claudio Márquez, presidente de AAR; Miguel Angel Devalle, reikista, y Nidia Santa Cruz, master de reiki. ¿A dónde acudir? Si está interesada en conocer más del tema o empezar a estudiarlo puede dirigirse a los siguientes lugares. Asociación Argentina de Reiki (AAR). Todos los jueves a las 19.30 se brindan charlas gratuitas con demostraciones. Allí puede conocerse el método y sacarse todas las dudas. Por otra parte, también pueden realizarse los tres niveles del método y practicar en distintos días y horarios. Aguilar 2612, Buenos Aires, tel. (011) 4552-1378/4555-4117. El reikista Miguel Angel Devalle da sesiones de reiki. Tel. (011) 4808-0743. Nidia Santa Cruz. Es master de reiki Usui y otras variantes. Además es terapeuta floral y auroterapeuta. Tel. 4219-5755. Consejos de alimentación El reiki es una técnica independiente de filosofías, religiones y estilos de vida. Sin embargo, el reikista Miguel Angel Devalle aconseja acompañarla con una alimentación balanceada de acuerdo con las siguientes pautas. Recuerde que la carne, el pescado y los mariscos frecuentemente contienen antibióticos, hormonas y toxinas en forma de pesticidas y metales pesados, que pueden dificultar el equilibrio corporal. Minimice el consumo de café, té o bebidas con cafeína, que alteran el sistema nervioso y endocrino (glandular). Reduzca o evite por completo el alcohol al menos el día que recibe reiki. Minimice el uso de endulzantes y chocolate. Fume lo menos posible o nada. Para eliminar toxinas, realice un día de ayuno por semana a base de agua o jugos, en especial si usted ya es vegetariano o tiene cierta experiencia con dietas de este tipo. Consulte al médico antes. Los 5 mandamientos A partir de la “resintonización” del canal de reiki, muchas personas aseguran que están más sensibles al mundo que las rodea, redescubren el placer de las pequeñas cosas y reducen la cantidad de preocupaciones. Teóricamente, estas sensaciones se basan en los preceptos del reiki. Si bien están formulados como “mandamientos”, no se trata de leyes que se deban cumplir, sino situaciones que se generan naturalmente con la práctica a partir de convertirse en un imán de lo positivo. Sólo por hoy no te enojes. Sólo por hoy no te preocupes. Demuestra aprecio. Sé bondadoso con todos los seres vivientes. Trabaja duro sobre ti mismo. A la distancia Cuando no es posible acercarse a la persona o el lugar que necesita energía, el reiki puede practicarse a distancia. Aunque es imposible dañar o manipular al receptor, los maestros aconsejan pedirle permiso. Esta técnica puede realizarse con una fotografía o simplemente visualizando el destino de la energía universal. También se utilizan los símbolos de reiki incorporados en el segundo nivel del curso. Existe un vínculo poderoso entre la imagen fotografiada y su modelo real. Sólo hay que mantener presente en la mente que el tratamiento utiliza la fotografía como un medio. Los tiempos de aplicación del reiki simbólico son más cortos que los del reiki físico, pues la mente alcanza los planos sutiles con mayor inmediatez. Entre diez y veinte minutos puede ser una buena medida para un tratamiento personal. Fuente: “Revista Mia”