Educación
“La Universidad debe romper su esquema academicista y crear puentes con la escuela media”
FERNANDO LAPROVITTA
El proyecto “Turismo, Escuela y Desarrollo Sustentable” se viene llevando a cabo desde el año 2006 en distintas escuelas de esta provincia. La iniciativa surge como una propuesta de la Secretaria de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación de la Nación y ha sido canalizada por la Carrera de Turismo de la UNNE. Fernando Laprovitta, profesor de la carrera y coordinador del proyecto relata los pasos y conclusiones que se realizaron para ponerlo en práctica.
Se trata de un trabajo realizado por profesionales de la Carrera de Relaciones Laborales, Comunicación Social y Turismo de la UNNE, dirigidos por la Lic. Viviana Godoy, responsable general del Proyecto; Griselda Kennedy , Coordinadora General; y Fernando Laprovitta, profesor de Geografía Turística de dicha carrera y coordinador del Proyecto que tuvo como objetivo el mejoramiento de la escuela media a partir de la construcción de puentes con la Universidad. “Uno de los grandes problemas que tiene la escuela media es afrontar el desafío de preparar a los jóvenes de manera adecuada para la inserción en el mundo universitario. “Los profesores que trabajan en los primeros años en las facultades son los que padecen esta situación ya que existen baches muy profundos que deberían ser trabajados para poder subsanarlos”, sostiene Laprovitta. ¿De que manera es posible cubrir la brecha entre la Escuela Media y la Universidad? No se puede mejorar la escuela media si desde la Universidad no se bajan los lineamientos suficientes para que ese ensamble sea perfecto. Este proyecto tendía a eso, por supuesto acomodándose a las especialidades de cada carrera y a los proyectos que se presentaron (participaron cinco facultades de la UNNE). ¿Cualquier institución de nivel medio califica para participar del proyecto? Qué instituciones de nivel medio participaron del proyecto? Las bases del proyecto contemplaban escuelas prioritarias, es decir aquellas que tienen como alumnos chicos en condiciones socioeconómicas desfavorables. Por eso, las escuelas que participaron de este proyecto fueron: la escuela Normal de Mercedes, la Escuela de Comercio de Ita Ibaté, la Escuela Secundaria de Puente Pessoa, la Escuela Leconte de Santa Ana y la escuela Favaloro del barrio Dr. Montaña de esta ciudad. Pero la idea original no fue pretender que los alumnos, a partir de involucrarse en este trabajo, estén en condiciones óptimas de ingresar a la universidad sino que por lo menos logren una apertura mental interesante para que puedan ver otras alternativas. El colegio secundario no los prepara para una vida laborar ni tampoco alcanza a ser, suficientemente profunda la formación para que estén en buenas condiciones para insertarse en el mundo universitario. ¿El proyecto tenía los mismos objetivos en todos los establecimientos involucrados? Cual fue el objetivo que se propusieron para trabajar en cada escuela? El objetivo final era valorizar el patrimonio local por parte de los actores y las escuelas; y fomentarlo para que tenga un valor a nivel comunitario. Es decir otorgarle valor al recurso patrimonial cultural y natural de cada pueblo en función del conocimiento y de trabajos alusivos a esos patrimonios. ¿Pudieron determinar que valor se le asigna a los patrimonios culturales? Con qué se encontraron en cada experiencia? Nos encontramos con recursos que son patrimonios de cada pueblo y que tienen un valor patrimonial relativo, porque si tuvieran un valor patrimonial real, serio y concreto no estarían en esas condiciones de conservación. Una plaza, por ejemplo, o la casa de un personaje histórico determinado en cada pueblo, que se consideran patrimonio del lugar, no alcanzan a tener valor trascendental. Y esto es consecuencia del desconocimientos profundo que hay respecto de ese asunto, porque se sabe que fue “la casa de fulano” pero no saben qué hizo, en qué se destacó, etc. ¿Ajustaron el trabajo a un proceso metodológico? Cuál fue el modo de trabajo in situ? El trabajo contaba con tres etapas. La primera de educación ambiental, que tuvo que ver con la valorización; una segunda etapa de puesta en valor y la última pretendía asociar a nivel comunal todos esos logros. Es decir involucrar a las ONGs municipios, etc. Primero trabajamos a modo de taller con lo docentes de cada colegio. Ellos son los encargados de llegar a los chicos. Pero el trabajo in situ lo desarrollaban los alumnos de la carrera de turismo, en calidad de pasantes, que se comprometieron con el proyecto. Ellos hacían el trabajo directamente con los profesores. En la tercera etapa, el tema de la gestión operativa fue un eje fundamental porque se explicaron los mecanismos y procedimientos para canalizar las inquietudes. ¿La gente se involucró de acuerdo a lo que ustedes preveían? Qué respuestas obtuvieron? Las respuestas no fueron todas iguales ya que los canales de comunicación no siempre fueron fluidos. Pudimos sentir el choque que se produce entre el sistema educativo medio y el universitario. Al encontrarse dos culturas distintas, la unión debía ser amigable y para eso tiene que haber un trabajo mucho más profundo y, con dos años, que fue el tiempo de duración del proyecto, eso no alcanza. ¿Están en condiciones de medir la repercusión del proyecto en los establecimientos con los que trabajaron? Cuál fue el producto final de todo ese proceso? Hay escuelas que han logrado más que otras. Itá Ibaté por ejemplo ha logrado consolidar este año una estudiantina que se consagró como el evento turístico más importante del pueblo. El proyecto le dio un impulso con el que han sabido consolidarse. Ese fue nuestro objetivo final, porque no logramos la valorización del patrimonio por la valorización misma sino que la idea es encontrar una utilidad o una puesta en valor adicional para que otra gente se acerque y conozca. Para eso juega el turismo, y en el caso de la estudiantina se ha generado una movilización de todos los pueblos de alrededores. El pueblo entero se volcó a eso; y el ensamble fue armonioso y perfecto. En el caso la escuela Dr. Favoloro del barrio Dr. Montaña, fue la más conflictiva desde el punto de vista socioeconómico. En un barrio extremadamente carenciado con necesidades básicas insatisfechas, se hizo mas complicado afrontar el desafío de cómo y cuando podíamos llevar adelante este proyecto. Luego de tantas desavenencias se ha logrado encontrar la vuelta a través del trabajo manual, de artesanías, a tal punto que superaron nuestras expectativas. También desarrollaron folleterías de la ciudad de Corrientes, videos y city tours. Lo mismo hizo la escuela de Santa Ana, con la diferencia que allí se trabajo en el área artística a través de la construcción de murales. En definitiva, cada escuela supo descubrir la parte patrimonial del lugar donde vive y ponerlo en valor. ¿Cuál fue el balance al terminar el proyecto? El balance es más que positivo. Una de las conclusiones a las que arribamos es que este tipo de proyectos necesitan un mayor tiempo, ya que la causa por la cual estamos trabajando es de largo aliento. Lo que buscábamos era generar el mejoramiento de la escuela media. Pero, todo proyecto tiene un final y esto, si bien puede tener un principio, no tiene final. La pregunta que nos cabe ahora es cómo sigue este proceso y que sucederá con los años que vienen. Porque pudimos tener un éxito interesante en las 5 escuelas pero el nivel medio sigue, y los que hoy están iniciando la escuela media llegan a 5to año y se van a encontrar con ese problema y nosotros también desde la universidad. Por lo tanto, no estamos tendiendo a una solución radical del problema; de igual manera es mas que loable la intención de poder propender a generar ese cambio con este proyecto. La universidad no está aislada de lo que sucede en el nivel medio sino que esta preocupada de lo que pasa en el nivel inferior porque tarde o temprano tiene que hacerse receptiva de esa situación y esta es una forma de generar ese mejoramiento ya que el resultado positivo lo va a tener la universidad. La universidad tiene la necesidad de generar capacidades de adaptación a los distintos niveles y romper ese esquema tradicional extremadamente academicista que produce la gran brecha entre aquel que es el verdadero receptor del conocimiento que se genera en el nivel superior y aquel que lo va a aplicar en el nivel medio, sostiene Laprovitta. ¿Sería como flexibilizar el aprendizaje? Si, romper las barreras tradicionales de los sistemas de enseñanza flexibilizando esa educación y bajarla a los niveles adecuados para que se produzcan estos entendimientos. Es como que desde el nivel universitario estamos produciendo una suma descomunal de conocimientos pero que no tienen puntos de aplicación en la escuela media.
Cuando el 17 de marzo del 2020 la Universidad Nacional del Nordeste adoptaba una serie de medidas para fortalecer las acciones de prevención ante el avance del COVID-19, la institución ingresaba a un escenario de total incertidumbre en cuanto al cumplimiento de sus funciones académicas, científicas y de extensión.
A nueve meses de esa fecha y en este momento de balance sobre lo realizado, toman valor las acciones y gestiones que de manera creativa, pero con sustento, mantuvieron de pie a la Casa de Altos Estudios más grande del Nordeste en el contexto de una pandemia como nunca vivió en su historia.
Esto mismo lo expresó la Rectora profesora María Delfina Veiravé, cuando en la última reunión del Consejo Superior de este año manifestó su reconocimiento a todos los actores universitarios y dijo sentirse “orgullosa de pertenecer a una universidad que es capaz de tener una respuesta a tanto impacto y que pudo cumplir con el compromiso de las funciones sustantivas que la sociedad le demanda”.
Cuando el 17 de marzo del 2020 la Universidad Nacional del Nordeste adoptaba una serie de medidas para fortalecer las acciones de prevención ante el avance del COVID-19, la institución ingresaba a un escenario de total incertidumbre en cuanto al cumplimiento de sus funciones académicas, científicas y de extensión.
A nueve meses de esa fecha y en este momento de balance sobre lo realizado, toman valor las acciones y gestiones que de manera creativa, pero con sustento, mantuvieron de pie a la Casa de Altos Estudios más grande del Nordeste en el contexto de una pandemia como nunca vivió en su historia.
Esto mismo lo expresó la rectora María Delfina Veiravé, cuando en la última reunión del Consejo Superior de este año manifestó su reconocimiento a todos los actores universitarios y dijo sentirse “orgullosa de pertenecer a una universidad que es capaz de tener una respuesta a tanto impacto y que pudo cumplir con el compromiso de las funciones sustantivas que la sociedad le demanda”.
En la sesión del pasado 30 de septiembre, la Legislatura de la Provincia del Chaco aprobó la Ley Nº 3228, por la cual se autoriza escriturar el inmueble fiscal ubicado en el departamento Almirante Brown a favor de la UNNE. Con ese paso histórico, la institución podrá avanzar con el proyecto que contempla la construcción del Centro de Investigación y Desarrollo Sustentable del Impenetrable Chaqueño (CIDIC), destinado a docencia, investigación, extensión, desarrollo tecnológico e innovación y desarrollo de proyectos que involucren a las comunidades de la zona, así como espacio de formación para estudiantes; y la generación de una reserva de bosque nativo.
No fue un año más, no fue un año de paso, se enfrentó la emergencia sanitaria con espíritu de construcción y dando continuidad a las políticas institucionales.
Como Balance de Gestión del 2020 se remarcarán algunos de los logros de esas políticas institucionales, para lo cual se los agrupó en tres ejes: Continuidad Pedagógica; Compromiso desde la Investigación y Universidad al Servicio de la Región.
Continúa…
Educación
La UNNE cierra un año de intenso trabajo en materia de cooperación internacional
CON MÁS INTERCAMBIOS
Las restricciones impuestas por el contexto mundial obligaron a suspender movilidades físicas y pusieron en jaque diversos encuentros de nivel internacional. Pese a esto, los equipos técnicos de la Secretaría General de Relaciones Interinstitucionales (SGRI) continuaron trabajando en nuevas líneas que se tradujeron en mayores posibilidades y más apertura para la comunidad universitaria.
La UNNE cierra un año intenso en materia de cooperación internacional con múltiples actividades que mitigaron el impacto de la pandemia sobre el trabajo institucional.
Junto a las redes y consorcios internacionales que integra, la UNNE, a través del Área de Cooperación Internacional, dependiente de la SGRI, impulsó movilidades virtuales que convocaron a cientos de estudiantes a cursar asignaturas en casas de estudios del exterior, oferta que se amplió exponencialmente en comparación a la de los intercambios presenciales.
Dos de los programas tradicionales: ESCALA Estudiantil, de la Asociación de Universidades Grupo Montevideo (AUGM), y PILA, iniciaron sus caminos hacia la virtualidad, otorgando mayor acceso y oportunidades al ampliarse la oferta.
La reconfiguración de las plazas por estudiante hacia cupos por asignatura hizo que los postulantes aumenten exponencialmente. En el caso de ESCALA son 50 los cupos máximos que cada universidad puede ofrecer, más del doble ofrecido en época de pre-pandemia. Y por el lado de PILA, que otorgaba ocho plazas para México y Colombia, son 24 los puestos que cada institución puede ofertar a sus estudiantes internacionales en modalidad virtual.
En este contexto la UNNE fue además la primera universidad del Cono Sur en integrar el programa Espacio de Movilidad Virtual en la Educación Superior (eMOVIES) de la Organización Universitaria Interamericana (OUI), cuya Presidencia Regional está a cargo de la rectora Delfina Veiravé. Este programa tuvo 10 becarios en el segundo semestre de 2020 y duplicará los cupos en el primero de 2021.
Además de los programas tradicionales, se concretó por primera vez una movilidad exclusiva para estudiantes de pueblos indígenas. En el marco del Programa que los engloba (PPI), un estudiante de la UNNE pudo viajar a México para cursar en la universidad Veracruzana Intercultural y, a su vez, un alumno de la institución mexicana llevó a cabo su intercambio en la Argentina.
Dentro de las acciones fundamentales para garantizar la seguridad sanitaria, se repatriaron 26 estudiantes argentinos y se asistió a 17 extranjeros para regresar a sus respectivos países en coordinación con los consulados y embajadas, poniendo a disposición vehículos oficiales de la UNNE como también apoyo económico para su traslado.
A su vez, la Universidad mantuvo sus compromisos durante todo el período con los estudiantes recibidos, garantizando alojamiento y comedor.
En cuanto a la planificación, se profundizaron acciones del Plan Estratégico de Internacionalización de la Educación Superior en la UNNE, que fuera aprobado por el Consejo Superior, con actividades que involucran a actores de las diferentes redes y programas que la universidad integra a nivel continental.
En este sentido se coordinaron diversos encuentros virtuales de relevancia nacional e internacional en conjunto con la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU), la Organización Universitaria Interamericana (OUI) y la UNESCO sobre la internacionalización del Currículum, el Posgrado e interculturalidad.
Se realizaron de manera virtual los encuentros de Becarios Internacionales, en los que estudiantes de la UNNE y el exterior compartieron sus experiencias de movilidad tanto presencial como virtual.
Desatada la pandemia y decretadas las medidas de aislamiento, el escenario requirió una reconfiguración muy diferente. Es por eso que se lograron construir espacios con universidades del continente y el mundo y avanzar en el intercambio de experiencias, opiniones y vivencias.
Educación
La ministra Susana Benítez participó de la 101ª asamblea del Consejo Federal de Educación
VÍA VIDEOCONFERENCIA
La Ministra de Educación, Susana Benítez participó esta mañana por videoconferencia de la 101º Asamblea del Consejo Federal de Educación, junto al ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta y representantes de todas las jurisdicciones provinciales.
El encuentro, tuvo dos ejes temáticos centrales: los acuerdos establecidos con Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y el Consejo de Rectores de Universidades Privadas (CRUP) para organizar y articular el tramo egreso-ingreso de las y los estudiantes secundarios que finalicen sus estudios durante los primeros meses del 2021; y las prácticas profesionalizantes de la carrera de enfermería.
De esta manera, los certificados definitivos de estudios secundarios podrán ser presentados hasta noviembre 2021, así lo acordó el Consejo Federal de Educación (CFE) con el CIN y el CRUP. La medida busca que las y los alumnos puedan asistir como estudiantes condicionales hasta que se regularice su situación y arbitrar medios y recursos para fortalecer el inicio de sus trayectorias en el ámbito superior. También se firmó la resolución que da marco a las prácticas profesionalizantes de la carrera de enfermería y se reafirmó el compromiso de que la presencialidad sea el ordenador del ciclo 2021.
Terminada la reunión, la ministra Benítez señaló: "Hemos estado trabajando mancomunadamente durante todo el año, para la construcción de una educación federal y en este caso la reunión y despedida con la aprobación de tres resoluciones".
Sobre el calendario 2021, la titular de la cartera educativa dijo que se contemplará la continuidad pedagógica: "En nuestra provincia como en el resto del país, se ha garantizado el ciclo lectivo 2020 a pesar de la situación de pandemia, hemos priorizado contenido qué tendrá su continuidad en el 2021", dijo en tanto agregó:" Se ha realizado un cambio para el año que viene, habrá dos trimestres en lugar de tres, estas modificaciones están enmarcadas en la continuidad pedagógica. Tuvimos un año muy difícil, los alumnos tienen que dar continuidad a los contenidos, por eso nos pareció extender los periodos de evaluación para que los docentes puedan ir teniendo mayor contacto y continuidad con los alumnos, tanto en la escuela primaria y secundaria permitiría una evaluación cuatrimestral".
Finalizando, la ministra de Educación hizo referencia al comienzo de clases en marzo: " Aún no sabemos la modalidad ya que la pandemia será el factor determinante para esta situación, nuestro deseo tanto del Gobierno de la Provincia como el de la Nación es volver a la presidenciabilidad, de todas maneras el calendario contempla la bimodalidad es decir que los chicos puedan estar también en forma combinada algunos días en la casa y otro en la escuela. Estamos esperanzados y conformes con el trabajo que hemos realizado en este ciclo lectivo 2020, gracias a los directivos, docentes, alumnos, tutores y familias que han construido en cada hogar una escuela y a retomar las fuerzas para que el 2021 podamos estar presentes en las aulas".
Participaron de la reunión el subsecretario de Gestión Educativa, Julio Navias; el subsecretario de Gestión Administrativa, Mauro Rinaldi; la asistente técnica pedagógica, Mónica Alegre; la directora de Educación Superior, Susana Nugara y el director de Sistemas, Carlos Encina.
