Alejandro Reinick y Gustavo Oroná, flamantes jugadores del Club de Regatas Corrientes, llegaron hoy a la ciudad con vistas al inicio de la pretemporada “Fantasma” que comenzará el lunes 8 de agosto en el Parque Mitre.

“La idea era llegar lo antes posible para poder instalarnos con mi mujer y esperar que llegan las cosas (muebles) este jueves. No te olvides que en la última temporada estuve en Puerto Madryn (Conarpesa) y el tema del flete y el traslado a Corrientes se hace complicado”, dijo entres sus primeros conceptos el flamante pívot del Club de Regatas Corrientes, Alejandro Reinick, quién supo ser campeón de la Liga Nacional, con Atenas de Córdoba, en la temporada 2002-03; y campeón de la Liga Sudamericana, también con el equipo “Griego”, en 2004. Además de ser el mejor rebotero ofensivo y defensivo de la Liga Nacional de 2001-02 en Pico FC. “Estoy muy contento de venir a Corrientes, ya en la temporada anterior estuve cerca de arreglar pero no se dio. Tengo una gran expectativa en torno del equipo y la verdad que necesitaba un cambio de clima –se ríe-, no quiero saber nada de frío por un buen tiempo”, dijo el pívot, que nació el 20 de mayo de 1978 en Rosario (Santa Fe) y mide 2.03 metros de altura, que jugó la Liga 2004-2005 con Conarpesa, llegando a semifinales, en dónde fue eliminado por Ben Hur de Rafaela, actual campeón, por 3 a 0. Regatas será su cuarto club en Liga, ya que jugó para Pico (2000-01 y 2001-02), Atenas (2002-03 y 2003-04) y Conarpesa (2004-05). Su historia más recientemente cuenta que jugó para el seleccionado de Santa Fe en el Campeonato Argentino en Misiones, en donde logró el subcampeonato (junto a otro Regatas Corrientes Hernando Salles) y después de la competencia fue operado de amígdalas. En este sentido comentó que “fueron veinte días de cama, un infierno. Me dijeron que era una pavada y los dos primeros días casi me muero de dolor; quería volver todo para atrás. Por suerte todo eso quedó atrás y no veo la hora de comenzar a entrenar con mis compañeros”. Claro que para eso deberá esperar muy poco dado que recién el próximo lunes 8, Regatas comenzará su pretemporada pensando en su segunda participación en la máxima categoría del baloncesto nacional, hoy campeón olímpico. Mientras tanto Reinick se someterá a los estudios médicos de rigor y comenzará a moverse con el técnico asistente Eduardo Pfleger, con quién ya tuvo su primera charla. ORONA, EL PRIMER ADELANTADO El escolta Gustavo Oroná, junto a su mujer e hija, llegó a Corrientes hoy, muy cerca del mediodía, convirtiéndose en un verdadero adelantado del “nuevo” Regatas, que al igual que Reinick, quiere tener todo en orden para antes de iniciar los entrenamientos, especialmente por la aclimatación de su familia, según sus propios dichos. Oroná, que nació el 15 de junio de 1975 en Cinco Saltos, Río Negro, y de 1.96 metros de altura, jugó en Independiente de Neuquén, en sus inicios como juvenil (dos temporadas), para luego recalar en Andino de La Rioja (siete), Deportivo Roca (una) y en Gimnasia y Esgrima de La Plata (tres). Sus excelentes condiciones lo llevaron a integrar los seleccionados argentinos Sub-22 en el Sudamericano ’96 y en el Panamericano ’96; además de jugar dos Ligas Sudamericanas, en 1977 con Andino y en 2005 con Gimnasia La Plata. Teniendo en cuenta sus antecedentes y experiencia en la Liga Nacional, la palabra de Oroná es autorizada para opinar a cerca de la competencia que se viene y en este sentido se animó a pronosticar que “la temporada va a ser muy dura. Los equipos se están armando muy bien, incluido Regatas, por lo que te podría decir que será una de las mejores Ligas de los últimos tiempos. No va a ser fácil para nadie”. Al igual que Reinick, Oroná se realizará los chequeos médicos y hoy comenzará a entrenar con Pfleger.