Nacionales
Matrimonio Kirchner. Los buitres de la década de los ´80
LA MASCARADA DEL RELATO
Es indudable que el relato kirchnerista tiene no solo toda una carga de simbología fascista, monumentalista y mentirosa, sino que además, modifica el pasado para garantizar por lo menos un presente acorde a sus propias necesidades e intereses. Los primeros buitres argentinos fueron Néstor y Cristina y la 1050 de la Dictadura Militar.
Desde 2012, todo el aparato mediático kirchnerista, lubricado con inmensas fortunas de dinero público, pretende mostrar a inversores “aceptados en el mundo”, cuando por encima de los países sobrevuela una crisis económica, como “buitres buscando carroña”.
Sin embargo, esos fondos, tal el caso ya paradigmático de Paul Singer y su NML Capital Ltd. arriesgan inmensas fortunas comprando barato lo que después podrán vender a su valor nominal, tal el caso de bonos de países en default.
Claudio Scaletta, en Página/12, el 18 de noviembre de 2012, trababa de opinar que Paul Singer, titular del fondo NML Elliot, admonisaba al decir que, los títulos de deuda pública adquiridos cuando el default era un hecho, se compraron por su bajo precio frente al potencial de la economía argentina, “que a fines de la Segunda Guerra Mundial era la sexta economía del mundo”, pero la que ahora se estaría deteriorando porque el Gobierno está “expropiando activos de empresas y ciudadanos para llenar las arcas oficiales, imponiendo severas medidas proteccionistas, impidiendo que sus ciudadanos accedan a pequeñas cantidades de dólares para viajar al exterior”.
Sin embargo esa definición de inversionista en nada escapa a la realidad. Un país en default, puesto por un presidente que duró dos días y que muchos de los ahora kirchneristas en el Congreso de la Nación aplaudieron, son los mismos que ahora, transforman al que quedó fuera, “holdouts”, como buitre.
Estos holdouts o bonistas es apropiado y aceptable, porque quedaron fuera del proceso de reestructuración de la deuda pública de 2005, impuesta pretendidamente desde una posición de soberbia y autoritarismo, similar a la ocurrida en 2010, cuando el primer megacanje kirchnerista fracasó.
Ahora la Argentina deberá pagar la soberbia de un modelo de gobierno que solo piensa en tratar de mostrar que la tiene más grande, cuando en realidad no se da cuenta que su relato es más parecido a Hollywood, puro cartón pintado, que a un país con una economía sólida y sustentable en el tiempo.
LOS BUITRES DEL SUR
La famosa 1050 de Martínez de Hoz durante la última dictadura militar, tan criticada por el matrimonio Kirchner desde que llegaron al poder es lo que les permitió acumular 22 propiedades compradas a precio de saldo y ahora muchas de ellas vendidas a Lázaro Báez por valores inmensamente más elevados.
El 27 de diciembre de 2013, www.lanacion.com.ar publicaba justamente una nota asegurando que “la fortuna de los Kirchner creció gracias a la célebre circular 1050” y trae a colación una frase de Carlos Saúl Menem que sostenía en 2009 que, “el 24 de marzo de 1976 a mí me detuvieron los militares y Kirchner se fue al Sur con su mujer y empezaron a trabajar en su profesión a partir de la memorable y deplorable circular 1050”.
“Hay que leer el libro Kirchner, el amo del feudo de Daniel Osvaldo Gatti”, decía el ex presidente, “que cuenta todo lo que hizo Kirchner mientras yo estaba preso. Mientras yo estaba preso, Kirchner se puso bajo el ala de los militares y también hizo plata”.
Lo cierto es que no cabe ninguna duda de que con el golpe de Estado de 1976, Néstor y Cristina Kirchner se marcharon de La Plata, donde a ella le restaban todavía algunas materias para recibirse de abogada y se radicaron en Río Gallegos donde abrieron un estudio de abogados.
Pero sin embargo, los Kirchner, luego transformados en paladines de los derechos humanos, no concentraron justamente sus mayores esfuerzos jurídicos en la defensa de presos políticos o desaparecidos, sino que se abocaron y con éxito, a los negocios inmobiliarios.
Por aquellos años, merced a las ejecuciones hipotecarias y la tristemente célebre circular 1050 del Banco Central de la República Argentina (BCRA), el matrimonio Kirchner acumuló 22 propiedades compradas a precio de saldo, se vendieron muchos años después al empresario Lázaro Báez, a valores descaradamente elevados.
Hay que recordar en los ´80, Río Gallegos era una ciudad que tenía apenas 43.479 habitantes, según el censo de 1980 y se encontraba bajo el mando político directo de un militar.
Adoptada por el BCRA en 1980, durante la gestión de José Alfredo Martínez de Hoz al frente del Ministerio de Economía, la 1050 resultó letal para miles de deudores. ¿Por qué? Porque las tasas de interés de sus créditos hipotecarios pasaron a ajustarse por los valores vigentes en el mercado y miles de propietarios que a partir de ese momento no pudieron afrontar los vencimientos se vieron forzados a malvender sus inmuebles a inversores con pocos escrúpulos, los Kirchner.
Pero no son fábulas urbanas y relatos que se cuentan con el fin de hacer terrorismo político contra la familia que preside el país desde hace ya más de diez años. En Río Gallegos se recuerda bien lo ocurrido en aquellos años y cada uno de los casos lleva una historia personal, con nombre y apellido.
Como el caso de Ana Victoria de Aaset, por ejemplo, quien sufrió un proceso judicial que, si bien no llegó a dejarla en la calle, la llevó a tener que enfrentar la situación de que le embargaran parte de los muebles de su familia.
Con el patrocinio del abogado Rafael Flores, inició una demanda penal contra los Kirchner, quienes se habrían quedado con los pagarés de la señora de Aaset, en vez de romperlos después del cobro. Afortunadamente para esta humilde señora, el juicio prosperó y logró un fallo favorable.
Un episodio que se produjo entonces es memorable. Cuando el abogado Flores se cruzó con Cristina Fernández en la vereda de los tribunales locales, Flores la inquirió y le dijo Decime, ¿para qué hacen esto? ¿Cuál es la necesidad?; “Queremos hacer política y para hacer política en serio se necesita platita”, le contestó quien hoy se queja de la decisión del máximo órgano judicial de los Estados unidos de Norteamérica.
El presidente chino Xi Jinping visitó la Rosada. Se anunció un mecanismo para reforzar las reservas del BCRA. También habrá créditos para represas y el Belgrano Cargas. China quiere ganar peso comercial y financiero en la región. Acuerdos que generan deudas.
(www.clarin.com) Fueron palabras del presidente Xi Jinping: este es el año del Caballo, y la Argentina es conocida -dijo- como el país de los caballos. Por eso, formuló sus deseos de que sea un “caballo galopante” la profundizada relación estratégica con la Argentina.
De estilo muy sobrio, con esta gráfica alusión al calendario chino sorprendió Xi a la hora de los discursos, tras encabezar con Cristina Kirchner el acto de firma de acuerdos bilaterales por más de US$ 7 mil millones, que aportarán los chinos para financiar obras de infraestructura.
Estos aportes eran muy ansiados por el Gobierno, con problemas para financiarse, caída de reservas y el fallo adverso de la Justicia de EE.UU. que obliga a pagarle a los fondos buitre y al menos demoró el plan oficial de “regreso al mundo” para buscar fondos en los mercados internacionales de crédito.
Los acuerdos con China incluyen, tal como se había anticipado, US$ 2.099 millones para revitalizar el Belgrano Cargas (el Estado nacional aportará otros US$ 370 millones); y US$ 4.714 millones para la construcción de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic en Santa Cruz, obras largamente postergadas y acaso último megaproyecto de la era kirchnerista. El otro acuerdo con números a la vista es el aporte chino para la compra de 11 buques de dragado, por 423 millones de dólares.
En total se suscribieron una veintena de acuerdos, y una declaración conjunta que elevó el vínculo bilateral a “asociación estratégica integral”, un estatus que China sólo tenía en América latina con Brasil, México y Perú, y supone la decisión de profundizar la cooperación mutua.
A estos acuerdos se sumó más temprano –sin presencia de los presidentes– la firma de un segundo swap (el primero fue en 2009), un intercambio de yuanes y pesos por US$ 11 mil millones que podrán usarse para reforzar las reservas del Banco Central. Cristina celebró este punto en un momento de “ataques especulativos” de los fondos buitre.
Xi Jinping llegó a las 17.20 a la Casa Rosada, donde fue recibido con honores militares por los Granaderos. Caminó por la alfombra roja y en el Salón Blanco lo aguardaba Cristina para el saludo, los himnos nacionales y la presentación de delegaciones. Luego pasaron al despacho presidencial, donde estuvieron reunidos a solas y luego sumaron a sus ministros, durante una hora.
La última visita de un presidente chino fue la de Hu Jintao, en 2004. Allí se estableció una asociación estratégica, se firmaron memorándums de entendimiento y el gobierno kirchnerista había generado un singular clima de furor previo al propalar la versión de que llegarían US$ 20 mil millones, que nunca se concretaron.
Ayer, el presidente Xi tuvo su inmersión en el estilo de los actos K: hubo una videoconferencia con El Calafate, por las represas santacruceñas, con el gobernador Daniel Peralta; y otra con Maciel, Santa Fe, donde el secretario de Transporte Alejandro Ramos y Wang Hong, vicepresidenta de la empresa estatal china que canalizará los créditos, hablaron de las obras del Belgrano Cargas.
La jornada terminó con una cena en el Museo del Bicentenario. A la hora de los regalos volvieron los caballos. Cristina mostró las fotos –“No podíamos traerlos acá”, se excusó– de los que regaló. A la primera dama china, un caballo de silla, y a Xi, uno de polo. “Ambos son reproductores, sementales”, enfatizó. “Ahora sí, brindo por el año del Caballo de Madera, a brindar por la Argentina, por la amistad con China”, cerró la Presidenta antes de chocar copas con Xi.
Nacionales
Municipio de la Costa. Otra denuncia contra Boudou de sus días como funcionario municipal
CASAS QUE NUNCA SE REALIZARON
La denuncia tomó nuevo impulso cuando en las últimas semanas la oposición del Concejo Deliberante de la Municipalidad de la Costa impulsó una denuncia contra Amado Boudou (secretario de Hacienda local en 2005), Juan de Jesús (por entonces intendente y actual diputado provincial) y su hijo Juan Pablo (ahora a cargo de la comuna) por presunta “defraudación al Estado nacional”.
(www.perfil.com) Según reseña la publicación La Tecla, en 2005 se firmó un convenio para la construcción de viviendas con Nación, el cual fue firmado por los funcionarios mencionados, entre ellos vicepresidente procesado en la actualidad por la causa Ciccone.
La licitación la ganó la firma Cantera FC y debía terminar la obra en 2006; pero para agosto de 2007 se había abonado más de dos tercios del monto total y más de la mitad de las casas estaba sin terminar, según consigna la revista.
Proveedores de Cantera FC denunciaron haber recibido cheques sin fondos. Tras esto, la empresa entró en convocatoria de acreedores pese a presuntamente haber cobrado hasta ese momento unos 24 millones de pesos.
Cantera cedió los créditos al Banco Hipotecario, y éste emprendió una causa judicial contra el municipio para cobrar la supuesta deuda de 1.930.000 pesos” por las casas que nunca se terminaron”, dicen desde la oposición. Y éste fue el puntapié para su tratamiento y denuncia la cual fue impulsada por Marcos García, concejal del bloque A toda Costa.
Según García, Boudou “fue quien firmó los cheques, que además no estaban a la orden, cuando los cheques en la administración pública deben estar cruzados” y porque “él firmó eso y firmó los cheques por 24 millones de pesos”, sostuvo García. Los denunciantes buscan investigar hasta qué punto llegaba la relación entre Cantera FC y el vice.
Familiares acusaron al canciller por negociar en secreto con Irán y dijeron que “nuestros muertos piden justicia, no acuerdos”. Del piquetero K aseguraron que “debería ocupar un banquillo ante la Justicia”. Y criticaron que tenga espacios en TV y radio.
(www.clarin.com) El vicepresidente de la AMIA, Thomas Saiegh, exigió hoy al Gobierno nacional “medidas concretas” para conseguir la captura de los iraníes acusados del atentado contra la mutual judía AMIA y que “sean sometidos a juicio en Argentina”.
También reclamó al Congreso de la Nación “la derogación expresa” de la ley que habilitó el memorándum con Irán, que fue declarado inconstitucional por la Cámara Federal. Fue el primer orador de un acto que incluyó duras críticas al canciller Héctor Timerman y al piquetero oficialista Luis D’Elía.
Luego de Saiegh habló el periodista Alfredo Leuco, quien comenzó diciendo que “los muertos no tienen ni paz ni justicia”. El conductor de Radio Mitre recordó diferentes historias de víctimas del atentado, como la de Sebastián, un niño de 5 años y repasó la evocación de sus compañeros en el colegio.
“La impunidad no es producto de un fenómeno natural sino producto de la ineficacia de ocho presidentes que pasaron y pasaron”, dijo Leuco. Y acusó al ministro Timerman por el memorándum con Irán.
“Será recordado como el canciller responsable del delito de lesa impunidad. Quedará grabado en la historia por esta traición al pueblo hebreo y argentino”. Y también le apuntó a Luis D’Elía, a quien acusó de antisemita.
Finalmente, habló el familiar Luis Czyzewski, quien perdió a su hija en la masacre. Czyzewski dijo que, “En cada una de nuestras casas hay una silla vacía”. Luego, criticó el acuerdo del Gobierno nacional con Irán y calificó de “mal gusto” al denominar ese arreglo como un memorándum de entendimiento.
“Señor ministro Timerman, si el memorándum fuera tan bueno ¿por qué lo negoció en secreto? Usted parece que no tuvo en cuenta que negociaba con un gobierno repudiado por la comunidad internacional”, fustigó el familiar. “Parece que para usted, señor canciller, esto no era trascendente. El gravísimo error diplomático de acordar con Irán no es gratuito”, indicó.
Czyzewski agregó que, “Nuestros muertos piden justicia, no acuerdos”. Y se preguntó: “¿Por qué nunca se denunció a Irán como un país terrorista?”. También criticó al gobierno menemista y dijo que “´¿Cómo la Justicia no pudo encontrar pruebas contra Corach?”, en referencia al ex ministro del Interior de Carlos Menem, bajo cuyo mandato sucedió el atentado.
Y criticó que Luis D’Elía tenga espacios en radio y televisión para difundir su pensamiento antisemita. “D’Elia debería ocupar un banquillo ante la Justicia”. Y también dijo que en el programa “Fútbol para Todos” no mostró un homenaje hecho por las víctimas de la AMIA y agradeció, por el contrario, a los clubes Boca y Estudiantes.
Además, Czyzewski pidió a Julio Schlosser (presidente de la DAIA) que aclare los contactos que tuvo con Timerman antes de la firma del memorándum de entendimiento con Irán. Y también añadió que, “Apoyamos la creación de una CONADEP para la causa AMIA”.
Minutos antes de las 11, se emitió un mensaje en video grabado del Papa Francisco.
El año pasado los cuestionamientos pasaron por el memorándum firmado por el Gobierno con Irán, que prometía poder tomarles declaración a los funcionarios iraníes sospechosos de ser autores intelectuales de la masacre pero a cambio de hacer caer las circulares rojas de Interpol. El pacto fue declarado inconstitucional por la Cámara Federal y el Gobierno apeló a la Corte empantanando la polémica idea de Cristina.
Con el sonar de la sirena, comenzó a las 9.53 el acto central para recordar a las víctimas del atentado que en 1994 destruyó la sede de la AMIA, provocando la muerte de 85 personas y más de 300 heridos.
Bajo el lema “Ni un día de olvido”, se recordó a las víctimas del ataque perpetrado hace 20 años en la mutual judía ubicada en Pasteur 633, en pleno barrio de Once. Mario Pergolini fue el maestro de ceremonias.