En la última reunión del año la comisión directiva de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad de Corrientes, el gremio elaboró, a modo de balance, un fuerte documento respecto de las gestiones que se llevaron adelante durante este 2006 en reclamo por recomposición salarial y mejoras para el sector en la provincia de Corrientes.

Participaron del encuentro, delegados de esta capital, y de las localidades de Saladas, Empedrado, Goya, Ituzaingó, Gobernador Virasoro, Mercedes, San Roque, San Luis del Palmar, General Paz, entre otros. Durante el debate en torno al desarrollo de las acciones llevadas a cabo a lo largo del año los trabajadores de la sanidad coincidieron en que a pesar de las asambleas de afiliados, paros en los hospitales, medidas de fuerza, retenciones y marchas masivas a los distintos organismos provinciales no pudieron lograrse como se esperaba la aflicción de leyes que rigen para el área, en particular en lo que se refiere a la defensa de los derechos de los empleados del sector. Consideraron que la única respuesta que recibieron en todo momento fue siempre la misma: la dilación y demora de soluciones concretas, y lo tomaron como un claro mensaje de falta de seriedad y responsabilidad por parte de los funcionarios provinciales. Los objetivos siempre fueron claros para el gremio de la Sanidad y sus afiliados: “hablar sobre la situación actual del personal contratado, la distribución racional de los recursos humanos, la Ley de Salud y la Ley de Carrera Sanitaria, entre otros; como así también la necesidad de una Mesa de Concertación permanente para debatir sobre el salario y su proyección y no terminar con paliativos tan exiguos en comparación con el proceso inflacionario en el país”, a la vez que vuelven a hacer hincapié en que todos los inconvenientes que plantearon una y otra vez “se podrían ir solucionando tan solo con una norma escalafonaria”. El plan de lucha junto con todos pedidos sobre los que viene insistiendo el gremio y los empleados de la salud, continuarán reclamándose desde el último minuto de este 2006 y a partir del primero del 2007, inclusive expresaron que seguirán manifestando su repudio “y continuaremos denunciando ante la opinión pública qué poca importancia se le asigna a la salud y a la vida humana en esta provincia”. DOCUMENTO FINAL En las postrimerías de este 2006, año difícil y conflictivo la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina quiere expresarle a sus afiliados, trabajadores y a la opinión pública en general, que durante este período de tiempo hemos puesto todo nuestro esfuerzo y sacrificio personal en procura de la defensa de nuestros derechos, la aplicación de las leyes vigentes y el logro de ciertas reivindicaciones que lamentablemente, y muy a pesar nuestro, no pudo lograrse en un clima de paz y tranquilidad, tal como lo hacen las sociedades civilizadas. Fueron necesarias asambleas de afiliados, paros en los hospitales y medidas de fuerza en algunos sanatorios, retenciones de servicios, marchas masivas ante Casa de Gobierno, Legislatura y organismos en donde se dice que están nuestros representantes; todo esto como consecuencia de una falta de diálogo y consenso por parte de las autoridades de los funcionarios de gobierno y de instituciones privadas que representan; sin embargo en forma virtual proclaman a los cuatro vientos que se está negociando y cuando lo hacen es a través de mesas de “amigos” que parecen charlas de café. La estrategia fue siempre la misma: dilatar y demorar, pero a esta altura de las circunstancias a nadie engañan ni convencen, es una vil parodia; la falta de responsabilidad y seriedad es más que evidente, y nos lleva a preguntarnos a dónde fueron a parar sus promesas electorales. Por favor que el afiliado, el trabajador y el pueblo tenga memoria de esto. Esta Asociación durante este año 2006 solicitó audiencia al Poder Ejecutivo en cuatro oportunidades, y una de ellas inclusive con el aval de la Federación Nacional (F.A.T.S.A.), y ni siquiera tuvieron la cortesía de contestar. Nuestros objetivos eran plantearle la situación de la Salud Pública en toda la provincia de forma y de fondo. Poder hablar sobre la situación actual del personal contratado, la distribución racional de los recursos humanos, la Ley de Salud y la Ley de Carrera Sanitaria, entre otros; como así también la necesidad de una Mesa de Concertación permanente para debatir sobre el salario y su proyección y no terminar con paliativos tan exiguos en comparación con el proceso inflacionario en el país. Todos estos inconvenientes se podrían ir solucionando tan solo con una norma escalafonaria. La falta de políticas de salud en el contexto de la provincia es notorio -ya que la mayoría son nacionales- y con la falta de contralor, no rinden los resultados esperados, pues la estadísticas hablan por si mismas mostrando cifras desesperantes y pavorosas; estamos hablando de la salud del pueblo, es decir la vida, lo más preciado en esta tierra. Quien está en el sistema es indudable que aprecia una política antiguamente conocida por su característica de “dejar hacer, dejar pasar”, ¿Qué país y qué provincia vamos a construir? Por lo visto las agendas de prioridades de nuestras autoridades y de algunos dirigentes políticos, van por otro camino. Para ellos las prioridades, en primer lugar, están en ganar espacios de poder, en cuestiones económicas personales e intereses políticos, poco les importa Juan Pueblo, que significa el “bien común” ; sólo viajes de placer, banquetes ostentosos, actos sociales que solo sirven para entretener y distraer a la opinión pública donde verdaderamente no se cristaliza nada; y sumado a todo esto: la falta de oposición política donde se busque alternativas, un equilibrio donde se sienta identificado el ciudadano común y donde pueda recurrir para hacer valer sus legítimos derechos. Dirigentes y Sectores políticos que ayer fueron oposición, hoy hablan como parte integrante del Frente de Todos y del gobierno. Indudablemente de esa manera seguirá predominando el descrédito en todos los aspectos, mientras tanto no se ocupan de revertir esta triste realidad. Es patético ver la mediocridad que existe en la dirigencia: van de un lado a otro y no se ocupan verdaderamente de la gente. Un nuevo funcionario asumió en el Ministerio de Salud, esperemos que después de tantos años las nuevas autoridades no resulten tan ineptas, tan torpes, miopes y autistas, sino sería mas de lo mismo; en esta “Democracia” jamás tuvimos un diálogo, ni hablar de consenso; solo soberbia, mediocridad y atropello de quienes decían representar al pueblo. ¿Cuál pueblo? ¿El de los amigos tal vez? Así nos fue con la salud pública a los correntinos. Lo concreto son los índices alarmantes en mortalidad infantil y desnutrición, altos índices de mortalidad materna, deficiencia en la prestación del servicio sanitario en los hospitales del interior por falta de recursos humanos e insumos, inestabilidad laboral y psicológica del 40% del total del personal en la provincia bajo el perverso sistema de “contratación basura” cada tres meses. Seguiremos manifestando nuestro repudio y continuaremos denunciando ante la opinión pública qué poca importancia se le asigna a la salud y a la vida humana en esta provincia. Bien dice un proverbio “una mentira mil veces repetida se convierte en verdad” parece ser la consigna o norma de gobierno, mientras el pueblo esta ausente. En pocos días se celebra el acontecimiento máximo de la humanidad: el nacimiento del niño Jesús, aprovechamos este medio para hacer llegar a todos nuestros afiliados y trabajadores de la sanidad, como así también a quienes participaron y acompañaron los reclamos a lo largo de este año, para que cumplamos con nuestra misión; a la vez rogamos a ese Niño que vino a salvar al mundo que con su amor pueda transformar los corazones de los que detentan el poder, para que sean más humanos, más solidarios, sinceros y honestos, que piensen más en el prójimo que en sí mismos. Sólo así podremos tener esperanza de un mundo mejor. Felices Fiestas y venturas personales, Dios lo permita.