Los amiguísimos Bill Gates y Bono se unen a Richard Gere, el actor de Hollywood. Apoyan a Tony Blair en declarar este año para África.

(EFE).- El primer ministro británico, Tony Blair, apoyado por el magnate Bill Gates y la estrella de rock Bono, afirmó hoy que 2005 es un año crucial para Africa, y que ése será uno de los asuntos centrales de la próxima cumbre del Grupo de los Ocho (G-8). Mientras, los presidentes de Sudáfrica, Thabo Mbeki, y de Nigeria, Olusegun Obasanjo, afirmaron que tener paz y estabilidad en Africa es un requisito vital para el desarrollo del continente y para lograrlo pidieron la cooperación de los países más ricos, reunidos en el G-8. “Este año tenemos que dar el gran paso adelante en favor de Africa”, dijo Blair durante uno de los debates del Foro Económico Mundial, al tiempo que subrayó que “lo más importante es tener un plan práctico para ayudar a Africa”. En él incluyó propuestas para “duplicar la ayuda y el comercio, además de para la resolución de los conflictos y atacar las enfermedades mortales”, como el sida o la malaria. A ese respecto el ex presidente de EEUU Bill Clinton señaló que hay 13 millones de africanos que necesitan tratarse con antirretrovirales, pero sólo 300.000 lo consiguieron en 2004. Blair, que este año preside el G-8, ha incluido los problemas de Africa y sus propuestas sobre los “mecanismos prácticos” para resolverlos en la agenda de la cumbre prevista para julio próximo con los jefes de Estado o de Gobierno de esos países. Mbeki insistió en que las prioridades africanas para 2005 son, además de paz y estabilidad para tener desarrollo, profundizar en la democracia y en las normas de buen gobierno, reforzar las instituciones del continente, generar recursos propios e ir hacia una asociación con el G-8. “La prioridad para Africa es la paz y la seguridad. Sin ellas no se puede avanzar en otros aspectos. Ellas nos permitirán tratar las injusticias existentes y sólo a través de ellas se puede lograr un buen gobierno”, agregó el presidente nigeriano, Olusegun Obasanjo. Subrayó, además, que Africa “no recibe suficiente masa crítica de recursos para crear cambios y que el desarrollo se convierta en una realidad”, en referencia a que el flujo de ayuda internacional llega al continente en caso de desastre natural o crisis humana. Obasanjo se refirió también a que la impresionante solidaridad internacional desplegada a favor de las víctimas del tsunami del sudeste asiático le ha dado “esperanza en que Africa puede conseguir sus objetivos”. “Hay que convertir el esfuerzo desplegado en el caso del maremoto asiático en un esfuerzo más global”, dijo Clinton que ante las preguntas de por qué la Administración de EEUU no aumenta su ayuda al desarrollo internacional, al que dedica el 0,1 por ciento de su PIB, señaló que durante su mandato (1993-2001) el Congreso (de mayoría republicana) lo rechazó, y “ahora entran poco a poco”. Precisó que si se les pregunta a los estadounidenses, “hay un 70 por ciento de ellos que están dispuestos a ayudar en lo que se les pida”. El presidente del imperio informático Microsoft, Bill Gates, se refirió a que la imagen de la ayuda “es a veces bastante negativa”, pues se confunde con la caridad, y en otras muchas hay preocupación de los donantes por que no sea absorbida por la corrupción. “Hay que presentar los lugares en los que el dinero se gasta bien”, señaló Gates, que sugirió a los empresarios allí reunidos que “si pueden acumular riqueza, tienen también que donarla”. Gates ha donado a Africa 750 millones de dólares, una cantidad que supera el presupuesto de asistencia al desarrollo de muchos países. El rockero Bono, líder del grupo musical U2, más radical que sus compañeros de debate y menos políticamente correcto, señaló que de manera general “el tono del debate” le preocupa porque “se habla razonablemente de situaciones que no tienen razón de ser”. “Hay 6.000 africanos que mueren cada día por enfermedades que se pueden prevenir. Eso no es una causa, es una emergencia”, dijo Bono, que pidió a los países ricos eliminar por completo la carga de la deuda bilateral externa de los países pobres y a la Unión Europea reformar su Política Agrícola Común. Respecto a la propuesta del presidente de Francia, Jacques Chirac, de crear nuevos impuestos sobre transacciones financieras internacionales o sobre carburantes para transporte aéreo y marítimo, los participantes la consideraron como “interesante” para ser debatidos en foros internacionales vinculantes como el G-8. (Infobae)