Los Gobiernos de Nicaragua y Honduras siguen de cerca la trayectoria por el Caribe del huracán “Beta”, que amenaza con afectar a estos dos países centroamericanos en las próximas horas.

El presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, dijo hoy que están listos para que el fenómeno afecte lo menos posible a su país. El gobernante pidió hoy a los delegados de su gabinete y Ejército que se encuentran en el Caribe Norte, que brinden apoyo a todos los hondureños que podrían ser afectados por el impacto del huracán “Beta”. “Hay comunidades hondureñas ligadas familiarmente con nosotros, estemos listos y dispuestos a socorrer vidas también en esos lugares y pongan a disposición todas las cortesías de fronteras para con esas comunidades de Honduras”, dijo Bolaños. “La vida humana no tiene fronteras y si tenemos que llegar a socorrerlos, pues lo vamos a hacer”, agregó el gobernante. Bolaños decretó desde el pasado jueves alerta “amarilla” (prevención) en todo el país y se prevé que podría decretar alerta “roja” (vigilancia extrema) para el Caribe esta noche. En Honduras, el presidente Ricardo Maduro declaró el viernes el estado de emergencia para prevenir el impacto de “Beta” y dijo hoy que el huracán podría dejar unos 125.000 evacuados en su país, y que ha comenzado a solicitar ayuda a países amigos como España, EEUU y México, entre otros. La Comisión Permanente de Contingencias de Honduras (COPECO) decretó hoy alerta “roja” (vigilancia extrema) en la región oriental del país, y “amarilla” (prevención) en el norte, centro y sur, a causa del huracán “Beta”. La alerta “roja” abarca los departamentos de Gracias a Dios, Colón, Olancho y El Paraíso, mientras que la “amarilla” incluye a Atlántida, Yoro, Comayagua, Francisco Morazán y Choluteca. Las autoridades costarricenses informaron que “Beta” se ha alejado de su territorio, pero que aún se mantienen en alerta. El huracán “Beta” se fortaleció en las últimas horas y sus vientos alcanzan los 145 kilómetros por hora mientras se acerca a la costa caribeña de Nicaragua. El Centro Nacional de Huracanes de EEUU (CNH), con sede en Miami, insistió a las 18.00 horas GMT en la posibilidad de que se convierta en un ciclón de categoría dos en la escala de intensidad de Saffir-Simpson (de cinco grados) antes de chocar la costa este de Nicaragua, si sus vientos sostenidos superan los 153 kilómetros por hora. La jefa de Meteorología de Nicaragua, Milagros Castro, informó a EFE de que “Beta” puede estacionarse al menos 24 horas frente al Caribe Norte, por la influencia de un anticiclón que lo fortalecería y convertiría en un poderoso fenómeno categoría tres o cuatro. Se prevé que el huracán impacte con tierra a unos 30 kilómetros al norte de Puerto Cabezas y afecte de manera directa al municipio de Waspán, en la ribera del río Coco, fronterizo con Honduras. A las 18.00 GMT de hoy, “Beta” se encontraba aproximadamente a 135 kilómetros al este de Puerto Cabezas (Nicaragua) y 165 kilómetros al sureste del cabo de Gracias a Dios, según el CNH. Bolaños se comunicó directamente con los ministros de su Gabinete que se encuentran desde el pasado miércoles en Puerto Cabezas, quienes le brindaron un informe detallado de los pasos que han dado para que el fenómeno natural cause el menor daño posible. El presidente señaló han enviado suficiente comida y medicinas a las zonas donde se han preparado albergues para que no haga falta nada a esas personas. Agregó que la representación de la ONU en Nicaragua ya han dispuesto alimentos para que sean enviados a los posibles afectados. Bolaños señaló que han proporcionado más de 45.000 litros de combustibles y aceite para que el Sistema Nacional de Prevención, Atención y Mitigación de Desastres (SINAPRED) desplegado en la zona cuente con los recursos suficientes para atender a los afectados. El jefe del Ejército, general Omar Halleslevens, informó hoy a medios locales de que han sido evacuadas por prevención cerca de 3.000 personas en el Caribe, aunque se tiene previsto trasladar a zonas más seguras a unas 8.900 personas en total. Mientras, “Beta” se aleja de ese Costa Rica, pero las autoridades mantienen la alerta, según un portavoz de la Cruz Roja. La fuente dijo hoy a EFE que la influencia de “Beta” ha sido indirecta en Costa Rica, donde las lluvias afectaron el viernes pasado a la zona del Pacífico pero hoy ya no se registran precipitaciones. Según el portavoz, en Costa Rica no se ha presentado ninguna emergencia a causa de las lluvias y “todo está bastante tranquilo”. Fuente: Terra