Signos Literarios
La Levinson de Oscar Portela
MARÍA DEL CARMEN SUÁREZ (*)
Interpretar lo interpretado. Un desafío que vuelve a movilizar los códigos de la obra literaria de Luisa Mercedes Levinson a través de este brillante trabajo de Oscar Portela. La búsqueda de la unidad en la polaridad es sustento de la narrativa de esta autora que transita antiguos mitos como apoyatura para el desarrollo de sus ficciones.
El mito, su potencia, que al decir de George Steiner “desde el Renacimiento ningún período se ha preocupado y se ha dirigido con mayor insistencia a la naturaleza de lo mítico que el nuestro”, es así que asevera que el estudio descriptivo y analítico de los mitos y la indagación de las funciones de lo mitológico en la conciencia humana y en las instituciones sociales asumieron ellos mismos una configuración mítica. Oscar Portela indaga lúcidamente en los libros de Luisa Mercedes Levinson, en esa idea de la integración de los contrarios y la repetición, y cuando alude a Heidegger, en cuanto e que no existe más porfiado enemigo del pensar que la razón, “en ese vacío desierto de la razón “, (Hegel), arriba a que el dualismo, los opuestos irreconciliables, verdad-error, bien-mal, dios-demonio, sustentan todavía el andamiaje en que se mueve el pensamiento occidental. Y profundo conocedor de la narrativa de Luisa Mercedes Levinson, sabe de la insistencia de la autora, en acudir a mitos en los cuales se diluye la diferenciación para arribar a esa Nada que es el “aishop” de los cabalistas, el Tao de los chinos, la vieja paradoja de que en la nada está la plenitud. Oscar Portela escribe: “estar sentado en la dicha del desgarramiento, donde la nada es la posibilidad de alumbramiento”, y agrega, “los mitos son uno y el mismo, vueltos a repetir ahora y convertidos en obsesión a lo largo de casi cincuenta años de actividad creadora”. Porque Luisa Mercedes Levinson trabajó en esas aguas profundas, hasta acercarse a lo no diferenciado, pues su percepción la llevaba más allá, como acertadamente vislumbra Portela cuando afirma, “no se trata de un retorno mitologizante hacia un pasado irrevocable”. Y menos de una posible recuperación de lo ancestral, sino de la posibilidad de fabular, en que el pasado o lo no sucedido de éste subviene a la voluntad creadora de mundos”: cita en la que sigue fielmente el espíritu de Klossowski. El acierto de este ensayo reside en la captación de la parodia a través de toda la obra de la autora, la cual, partiendo del mito del Andrógino, de Edipo o Lilith, los diluye en lo burlesco, en la parodia, haciéndolos devenir en poesía. En el capitulo “El problema del mal, Dualismo y Monismo”, Portela vuelve a la obsesión de la escritora, que consiste en encontrar en el entramado del texto, la revelación, la redención, la unidad en el todo. Citamos a Portela: “Por un lado Luisa Mercedes Levinson se inclina hacia un monismo en el cual se borran falsamente todas las diferencias, hacia una unidad anterior a la “diferencia” entre ser y ente… y por el otro, al permitir encontrar la constitución maravillosa del tejido de la escritura reconoce la imposibilidad del nombre único”. El escritor ausculta todos los polos que se tensan hasta el estallido, registra los escondrijos y túneles, los misterios del sexo y el erotismo sagrado, que irradian los textos de esta extraordinaria escritora autora argentina. Intérprete apasionado y agudo lector también se sumerge en lo no-dicho y sale a la superficie con su idea de “son los contrarios que coexistiendo hacen la unidad de la que proviene el hombre el hombre”. En su libro de poemas “Senderos en el Bosque”, Oscar Portela ya preanunciaba un camino de similitudes en la búsqueda del sentido mediante mitos velados por la luminosidad poética escribiendo: “Y abierta repetición del agua en un cuerpo sobre otro” o “nunca sabrás el origen del canto pero hallarás el canto del origen”. De ahí la fascinación por la obra de Luisa Mercedes Levinson, quien también horadó en la cantera del mito, tratando de encontrar el signo o la sombra del signo. Como respondiendo al poeta, ella escribió en el “Último Zelofonte”: “la realización de un sueño se interpone al otro sueño llamado realidad” o “se acerca el momento de hacer eterno lo mortal”. Es este un texto abierto, de espirales ascendentes, que iluminan la obra de Luisa Mercedes Levinson, con un viraje hacia el centro de su creación, de su estética peculiar, que la llevaba del absurdo carnavalesco, al más alto riesgo poético, el de bucear , tal como escribiera en “Las tejedoras sin hombres”: “Intentar el gran sueño, la unión total, y mientras los dos persisten, ensañados para alcanzarlo, son el monstruo nuevo, con dos cuerpos todavía, pero con una sola desesperación que vuela más alto que el mástil, más hondo que el río, al ritmo salvaje de la tempestad”. Este excelente ensayo de Oscar Portela, cuya obra ensayística – filosófica, sigue creciendo, a la par que su obra poética, – y paradójicamente nutre a aquella, permaneciendo casi desconocida -, incita a seguir develando los enigmas, las diversas pistas, que desde su textualidad, Luisa Mercedes Levinson nos ha dejado para siempre, como medio de interpretar el sentido de este viaje insondeable: una obra, que incomprendida en su país, espera aún su tiempo, que será el del Adviento, que ella esperó en su vida, y encarnó en su obra, como pocos escritores argentinos lo hicieron. (*) Buenos Aires; para Corrientes al Día María del Carmen Suárez (Los Dientes del Lobo): poeta excepcional, novelista, periodista y ensayista, analiza a su vez el modo de enfocar de obra de la excepcional creadora Argentina desde los ojos de Oscar Portela.
En honor a los 120 años del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación firmado entre Argentina y Japón el 3 de Febrero de 1898, se lanzará el jueves próximo desde el Jardín Japonés (Buenos Aires) el primer concurso internacional de Poesía Japonesa “Tierra de Haikus”. La iniciativa es impulsada por la Fundación E Jendú Arte y Cultura, Imagen Diplomática, la Fundación “Andresito de las Misiones” y el Observatorio Social por la Paz y cuenta con el auspicio de la Embajada Japonesa en Argentina.
Las organizaciones que impulsan el certamen desarrollan sus actividades con miras a la reafirmación y expansión en todo el mundo de la Cultura de paz, con especial atención a la filosofía y los objetivos de Naciones Unidas, representados en sus distintos estamentos y agencias, como así también en sus diversos Programas, Fondos y Organismos, que tienen por principal causa el derecho de todos los pueblos del universo a la paz duradera y definitiva.
Este Primer Concurso Internacional tiene como objetivo principal la exaltación de la poesía en general y de la poesía japonesa en particular; al mismo tiempo que busca reafirmar el espíritu de confraternidad y amistad entre el Japón y la Argentina, en Honor y Homenaje a los 120 años del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación firmado entre ambos países el 3 de Febrero de 1898
Vale señalar que el milenario Haiku, es una composición poética japonesa que consta consecutivamente de tres versos de cinco, siete y cinco sílabas (diecisiete en total).
Signos Literarios
Otra publicación en revista internacional para teórico correntino
FRANCISCO TOMÁS GONZÁLEZ CABAÑAS
La propuesta de reforma democrática, “El voto anticipado” del autor Francisco Tomás González Cabañas fue publicada por la prestigiosa Revista española de la transparencia, ISSN-e 2444-2607, Nº. 6, del año 2018, en las págs. 102-104. Para el creador del índice democrático, herramienta que mide las prácticas democráticas en los distintos poderes de los distritos auditados, se trata de la publicación número quince por parte de revistas internacionales que imponen estándares de exigencia y de calidad para publicar desarrollos teóricos, que como en otras elaboraciones de González Cabañas (voto compensatorio, gabinete ciudadano, cámara de dipunadores) sostienen novedosos criterios o categorías para remozar la democracia como la experiencia que puede, o debe, seguir siendo mejorada para representar, palmariamente, el gobierno del pueblo o de los ciudadanos.
“Al establecer la posibilidad de un voto anticipado, se conseguirían modificaciones sustanciales, giros copernicanos en la política cotidiana, que al constituirse en concomitantes, complementarias o en paralelo, con el voto o sufragio clásico y tradicional, de ningún modo significara una ruptura conflictiva, una instancia revolucionaria traumática, sino simple y llanamente la consolidación de la democracia misma, resignificando, desde lo electoral su definición histórica como etimológica.
El voto anticipado, permitirá que el ciudadano, en los tiempos actuales en donde considera un valor positivo el compartir sus gustos, preferencias y elecciones, ante sus semejantes, por intermedio de plataformas virtuales o de redes, haga lo propio con su preferencia electoral o política. El voto o sufragio clásico, que en varias aldeas occidentales, sigue amparado por ley, para que se lo respete en su condición secreta, fungió con utilidad hace décadas atrás, cuando las realidades sociales y existenciales no habían sido gravitadas por la explosión del mundo digital y de la cada vez más influyente inteligencia artificial. Sería más que una falta de tino el señalar, como se vio modificada la vida diaria del occidental promedio, de dos décadas a esta parte, más bien, es incomprensible como aún no se haya generado, hasta esta oportunidad, la posibilidad para que el ciudadano moderno, pueda hacer visible, pueda exteriorizar sus elecciones políticas, y en el caso de que lo decida que lo comparte y difunda, tal como lo hace con todos los otros (al menos tiene tal posibilidad) aspectos de su vida que no solo son considerados públicos, sino también áreas o zonas privadas”.
Estos párrafos que hacen mención al desarrollo teórico de Francisco Tomás González Cabañas, publicados por la revista internacional de marras, evidencian el grado de audacia teórica, de arriesgada creatividad, sostenidas en giros arguméntales y en razonamientos acendrados en la historia del pensamiento que lo preceden al correntino, construyendo para sus consideraciones y categorías un sendero en donde seguramente tantos más que vengan con él o detrás suyo, erigirán bajo estos pilares una nueva consideración de lo político como de lo democrático.
El texto “Crónicas de Bosque” de Francisco Tomás González Cabañas, fue publicado en la Revista editada en el Perú “Dúnamis”, en su número 8 del año 9, correspondiente a Septiembre del año en curso.
Con la presente el autor suma 8 publicaciones en revistas internacionales (la mayoría de ellas especializadas en filosofía) en menos de un año, como dos libros de filosofía política publicados, uno de ellos (El Voto Compensatorio) editado en Alemania, y la aceptación a más de una veintena de diferentes congresos internacionales de diversas ponencias oportunamente enviadas y aceptadas.
Crónicas de Bosque, es un relato ficcional, que vislumbra una crítica social que encierran al autor en sinuosos laberintos de persecución e indiferencia por parte de quienes pretenden una sociedad sesgada, en donde las decisiones son tomadas por facciones con poder circunstancial y por tanto el ejercicio ciudadano y la vida democrática, pasan también a ser literatura o filosofía ficcional.
CRÓNICAS DE BOSQUE
Se estima que tiempo antes de la existencia de los guaraníes nuestras tierras fueron habitadas por una civilización que ha dejado muy pocos rastros de su existencia. Alcanzando el grado de mito, como la célebre Atlantis, daremos cuenta, de la información que contamos acerca de la cultura que podríamos dar en llamar como de los “Gentereí”.
En un tiempo no precisado de la historia, en lo que actualmente se conoce como el litoral argentino, una cultura de peculiares características, tuvo su apogeo y extinción, bajo sinuosidades sociales y políticas, que en la actualidad nos pueden parecer, casi familiares y cotidianas, por lo que no es demasiado arriesgado suponer, que pese a los siglos transcurridos y por más que las evidencias materiales no sean contundentes, tenemos una carga genética o arrastramos signos de quiénes serían nuestros antepasados directos; los Gentereí.