En las primeras elecciones después de la transferencia del canal, los panameños acuden este domingo a las urnas para elegir al que será su nuevo presidente por los próximos cinco años, entre un veterano y varios jóvenes en la política que prometen lo mismo: combate a la corrupción y el desempleo. Según pudo saber Corrientes al Día de un parte informativo de la Agencia CNN, Martín Torrijos, de 40 años e hijo del fallecido general Omar Torrijos y abanderado de una alianza encabezada por el Partido Revolucionario Democrático (PRD), realiza un segundo intento por la presidencia después de su revés de hace cinco años ante la actual presidenta Mireya Moscoso.

Su rival más cercano es el ex presidente Guillermo Endara, que busca nuevamente la silla presidencial que ocupó entre 1989 y 1994. Los otros dos candidatos son el ex canciller José Miguel Alemán, de una alianza de gobierno, y el empresario Ricardo Martinelli. Además de un presidente y sus dos vicepresidentes, en los comicios se elegirán 78 legisladores, 75 alcaldes, 619 representantes de corregimientos y 20 diputados del Parlamento Centroamericano. Alrededor de 1.900.000 ciudadanos, sobre un total de casi tres millones, están habilitados para acudir el domingo a las urnas, aunque algunos analistas avizoran un abstencionismo de 23 por ciento por una pérdida de confianza de los electores en los políticos. Quien resulte ganador sustituirá a la presidenta Moscoso y asumirá sus funciones el 1 de septiembre próximo por un período de cinco años, por primera vez sin la presencia del ejército de Estados Unidos, que se retiró del país en 1999 tras la cesión del Canal de Panamá. Al nuevo presidente le tocará la tarea de llevar a debate y consulta nacional la necesidad de expandir el canal, uno de los motores de la economía de servicios de este país. Los cuatro candidatos han dicho que será necesario lograr que los beneficios de la vía lleguen más a la gente necesitada. “En cinco años, el canal ha aportado 1.053 millones de dólares a la economía”, dijo Torrijos recientemente. “Queremos que la mayor parte de esos recursos vayan a proyectos a combate a la pobreza y educación”. Torrijos, que hace cinco años se quedó con las ganas de recibir el canal, parece tener esta vez los vientos a su favor. Torrijos podría beneficiarse del hecho de que esta vez el Partido Arnulfista de gobierno, acérrimo rival del PRD, ha resentido la candidatura de Endara, otrora miembro de la vieja guardia “arnulfista”, según los analistas. Endara, un abogado de 67 años que presidió la transición a la democracia después de la caída del régimen de Manuel Antonio Noriega en 1989, fue postulado por el Partido Solidaridad, ex colaborador del “arnulfismo”. Endara, que considera a Torrijos como un muchacho inexperto, se presentó como el hombre de la experiencia, que sacó al país del hueco económico tras la invasión. A diferencia de Torrijos y Endara, el ex canciller Alemán, de 47 años, parece tener las cosas mucho más difíciles. El debió cargar con el desgaste del gobierno de Moscoso y las críticas por la alta percepción de corrupción en el país. De hecho, la corrupción fue uno de los temas predominantes durante la campaña junto al desempleo y la pobreza. Torrijos, Endara, Alemán y Martinelli prometieron castigar la corrupción con mano fuerte. “Mi compromiso es cero tolerancia con la corrupción porque afecta las inversiones, el desarrollo y la convivencia del país en todos los niveles”, dijo Torrijos, cuyo partido PRD va ahora de la mano del Partido Popular, otrora Demócrata Cristiano y acérrimo rival de los “perredistas”. CUIDAR EL VOTO La mañana del sábado cientos de trabajadores desfilaron por las calles de la capital como parte de las celebraciones del Día Internacional del Trabajo y para exigir “no a un fraude” en las elecciones, que serán vigiladas por unos 1.500 observadores internacionales. A sólo unas horas de los comicios, la oposición presentó ante la Fiscalía Electoral de Panamá varias denuncias sobre compra de votos en diferentes puntos del país en contra de la coalición del gobierno integrada por los partidos Arnulfista y MOLINERA, acusaciones que fueron negadas. Las autoridades han dicho que investigarán las denuncias y, de ser reales, los culpables podrían ser retirados de la contienda si resulta ser que son candidatos a algún puesto, según declaró el fiscal electoral, Gerardo Solís. A pesar de esos problemas, la capital panameña gobernada por la oposición luce en completa calma, aunque invadida por la propaganda electoral de los partidos políticos, que han llamado a la población a “votar a conciencia y cuidar su voto” para evitar un fraude. Desde la medianoche del viernes rige una veda de propaganda a nivel nacional y el sábado se comenzó a prohibir la venta de alcohol hasta el fin de los comicios la noche del domingo, según lo establecen las leyes electorales.