El gobierno israelí permitió a varios peregrinos cisjordanos y de la Franja de Gaza participar de la procesión hacia la mítica cuna del Mesías. El presidente de la OLP asistió a la misa.

(EFE).- Las celebraciones navideñas en Belén han contado con la presencia este año de los nuevos dirigentes palestinos a la Misa del Gallo en la Iglesia de Santa Catalina, además de la de centenares de peregrinos. El presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y candidato favorito a los comicios presidenciales del próximo 9 de enero, Mahmud Abas (Abú Mazen), asistió a la tradicional misa acompañado por otros dirigentes de la cúpula palestina. Es la primera vez que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) participa en esta celebración religiosa en los últimos cuatro años de conflicto. Desde las Navidades de 2001 Israel impedía que el presidente Yaser Arafat, fallecido el pasado noviembre, viajara a Belén para participar en los ritos cristianos a causa de su confinamiento en Ramala, que Israel condicionaba a que liberase a militantes que el líder palestino supuestamente escondía en las oficinas gubernamentales de la “Mukata”. Desde entonces, una “kefía”, el pañolón árabe con el que Arafat solía cubrir su cabeza, era colocada en una silla vacía en la Iglesia de Santa Catalina, donde se oficia la Misa del Gallo, en memoria del presidente palestino. Pero este año la asistencia de Abú Mazen ha dado un espaldarazo al dirigente palestino, candidato a los comicios a la presidencia por el movimiento Al Fatah, quien fue ovacionado a su llegada anoche a la ciudad donde la tradición cristiana sitúa el nacimiento de Jesús. El presidente de la OLP, de confesión musulmana, se detuvo a orar en una mezquita antes de asistir a los ritos cristianos que marcaron el comienzo de la Navidad. “Rezamos a Dios y pedimos que todas las religiones en este país convivan en paz y seguridad”, manifestó Abu Mazen a la prensa y agregó: “Espero que el próximo año sea mejor que los anteriores”. En un acto de reconciliación con Israel, el que con toda probabilidad será el futuro presidente palestino refirió: “Tendemos la mano a los israelíes. Queremos negociar y alcanzar una paz basada en la justicia”. Más de 1.000 personas acompañaron horas antes al Patriarca Latino en Tierra Santa, el palestino Michel Sabah, en su tradicional recorrido entre la ciudad vieja de Jerusalén y Belén ayer, viernes. Tras llegar a la ciudad de la natividad, Sabah llamó a israelíes y palestinos a poner fin a la violencia y dejar el pasado atrás. “Nuestra situación sigue siendo de conflicto, de violencia, inseguridad, miedo, ocupación militar, el muro de separación, de ciudades prisiones y demoliciones”, recordó. “Palestina e Israel deben reducir al demonio de la violencia y dar comienzo a una nueva sociedad de hermanos y hermanas en la que ninguno controle al otro, ninguno esté ocupado por el otro, ninguno cause inseguridad al otro, nadie se tome la libertad por el otro”, agregó Sabah. A la tradicional misa en la Iglesia de Santa Catalina, regida por la orden franciscana, siguió la colocación de una imagen del niño Jesús en la contigua Basílica de la Natividad que pertenece a la orden de los greco-ortodoxos, que festejan la navidad el 6 de enero (Día de Reyes). Se calcula que más de 170.000 cristianos pertenecientes a las 17 iglesias diferentes viven en la zona- lo que incluye a palestinos de Cisjordania y Gaza y a ciudadanos árabes y extranjeros de Israel- fueron autorizados por este país a asistir a la celebración de la Navidad en Belén. La misa navideña también se celebró la Basílica de la Anunciación en la ciudad israelí de Nazaret, donde residen el 20 por ciento de los 144.000 cristianos que viven en el territorio israelí. El primer ministro israelí, Ariel Sharón, y el presidente Moshé Katsav felicitaron las fiestas navideñas a los cristianos residentes en Israel. A pesar de que las autoridades israelíes autorizaron a levantar las restricciones a palestinos, israelíes y peregrinos extranjeros a Belén, la ciudad contó con una escasa presencia de visitantes en comparación con años anteriores. Según un informe de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) titulado la “Imagen cambiante de Belén”, el número de turistas que visitaron Belén desde el año 2000 a este año ha descendido de 91.726 a 7.249. Asimismo la falta de opciones económicas y sociales ha empujado a un 9,3 por ciento de la comunidad cristiana a emigrar desde el año 2000. El informe destaca que Israel ha completado 10,4 kilómetros de los 63 previstos del muro de separación que construye en torno al distrito cisjordano y de hecho rodea su perímetro con 78 obstáculos físicos entre los que se incluyen 10 puestos de control, el tramo de la barrera y 55 montículos de tierra. (Infobae)