El embajador en Buenos Aires, Lino Gutiérrez, aclaró que su gobierno “no pide disculpas” por los dichos de Noriega sobre la amenaza piquetera. Hoy, el Ejecutivo, a través del canciller Bielsa y los ministros Alberto Fernández y Aníbal Fernández, rechazó los dichos porque “se condice poco con la realidad”. “Estados Unidos no pide disculpas por reportes que aparezcan atribuidos a un “alto funcionario”, advirtió hoy el embajador de ese país en Buenos Aires, Lino Gutierrez, en una directa respuesta al canciller Rafael Bielsa. (Infobae)

El diplomático dijo tener por Bielsa “mucho afecto y respeto” pero advirtió que “no me entendió bien” cuando ambos conversaron telefónicamente anoche, tras conocerse afirmaciones atribuidas al secretario de Asuntos Latinoamericanos, Roger Noriega. En una conferencia de prensa convocada en la sede de la Embajada en esta capital, Gutiérrez comentó que durante el contacto telefónico que mantuvo con Bielsa solamente “le dije que ibamos a obtener la transcripción de las declaraciones” que publican hoy distintos medios porteños. Aclaró que “en ningún momento pedí disculpas por eso”, y ante una pregunta sobre si Estados Unidos reconocía que el autor de esas declaraciones era Noriega, recordó que se trató de una conversación “en off” con periodistas latinoamericanos, y por lo tanto “hay que seguir esas reglas de juego”. RECHAZO OFICIAL Alberto Fernández opinó también sobre los dichos de Noriega: “No estamos ni enojados ni no enojados, ni sorprendidos. Nos tiene acostumbrados a que finalmente se condice poco con la realidad, nos duele mucho porque nos parece que estamos haciendo un gran esfuerzo, logrando enormes avances. Porque esos grupos terminan opacando todo lo que la Argentina está avanzando. Parece casi atrevido que alguien de Estados Unidos nos diga algo así, y no es la primera vez que lo hace. Terminamos entendiendo que hay que tomar las cosas como de quien viene y se ve que Noriega tiene cierto placer en decirnos qué tenemos que hacer”. DESDE CANCILLERÍA “A este señor Roger Noriega, que al Gobierno argentino lo tiene harto, tiene una situación de violencia en su propio país en la cual preocuparse. Entonces, los piqueteros deberían ser una preocupación menor para el subsecretario de Estado de los Estados Unidos”, manifestó en Radio 10 el canciller Rafael Bielsa. “Lo que me llama la atención es lo siguiente. En primer lugar, la irrupción de este caballero. Que no es la primera vez, siempre lo hace en escenarios informales, porque la otra vez lo había hecho en la Cumbre de las Américas y ahora lo hace en un club de prensa, y que hace reflexiones sobre cuestiones argentinas”, analizó el funcionario. En ese sentido, se preguntó: “¿Qué tiene que decir sobre la relación entre (Néstor) Kirchner y (Eduardo) Duhalde?, sobre la popularidad del Presidente y lo que debería hacer con ella. ¿Qué tiene que comparar Roger Noriega la situación de Kirchner con la de (Hugo) Chávez (de Venezuela)? Usted se imagina haciendo consideraciones personales, delante suyo, sobre las torturas, sobre las acusaciones de Guantánamo, sobre el caso Padilla, yo me pregunto “¿cómo tomaría Estados Unidos si yo hiciera esto?” Nosotros no lo hacemos eso”. Para el canciller, las declaraciones de Noriega no fueran hechas de buena fe. Justificó: “Hay una cosa que se llama diplomacia. Uno puede ir a los EE.UU. o Roger Noriega puede venir al país, y si tiene una buena idea, innovativa, nos la trasmite para ver cómo hacemos frente al problema social que tenemos. Estas cuestiones luego no se hacen públicas, por las interpretaciones que siempre hay. Eso es actuar de buena fe. Cuando uno reúne, a pedido de un think thank, en el Centro de Investigaciones Internacionales Estratégicas, a siete periodistas, y se pone a hablar como si fuera un funcionario, me parece que la buena fe que se puede presumir, se desbarata”. El canciller reconoció: “En la Argentina, como sociedad, tenemos una patología, la necesidad de que todo el tiempo pasen cosas mayúsculas, y cuando no hay cosas de esta naturaleza, se siente angustia, un vacío. En un segundo sentido, nuestro problema no es la señora Hebe de Bonafini, ella se expresa en términos que considera adecuados, y habría que ver si son adecuados desde el punto de vista del fiscal, porque nosotros tenemos un aparto jurisdiccional para actuar”. Al respecto, Bielsa aseguró: “Si uno hiciera ahora una encuesta on line sobre si hay o no que tomar masivamente las comisarías, la afirmativa representaría el 1% o 3% de la opinión pública”. “Nuestro problema no es la señora de Bonafini –reiteró-. Es una expresión fuerte, pero no es el sentido de los argentinos”. “La función del Presidente no es ponerle un bozal a la señora de Bonafini, sino explicar su manera de ver la realidad y luego contrastarlo con el de la señora. Ahora, uno no se transforma en extremista por continuidad, por lo que si, en un hipotético caso, el Presidente recibiera cada 15 minutos a la señora de Bonafini, no lo transforma en extremo”, consideró. “Con un enorme esfuerzo personal, institucional, el Gobierno está tratando de llevar adelante una política en materia de relaciones internacionales, en comercio, muy activa. Los resultados de la visita a España, a Portugal, a Rusia, a China, son extraordinariamente importantes. Entonces, ¿cómo el Gobierno no se va a enojar cuando un señor, apoltronado en un club, habla de cuestiones internas, haciendo un diagnóstico como si fuese un médico clínico, sin aportar una mínima idea sobre lo que piensa acerca de lo que deberíamos hacer para mejorar la situación que él tanto dice que tanto el preocupa”. “Yo no me enojo por si alguien común me dice lo mismo. Ahora, me parece inaceptable que un funcionario estatal se entrometa en asuntos internos de otro país. Esto es grave e inaceptable, además usando algo como el “off the record”, que es como tirar la piedra y esconder la mano”, añadió. “Espero una respuesta con enorme entusiasmo. Pero como sucedió la vez pasada, no fuimos nosotros los que empezamos con esto”, agregó. El canciller Bielsa aclaró que la Argentina no tiene problemas con los Estados Unidos. “Estamos en plena negociación con el Fondo Monetario, que nos acaba de elogiar, estamos haciendo esfuerzos extraordinarios para salir de la crisis, entonces, no es grato que salgan a la esquina, hagan malabares y se lleven algunas monedas”. En ese sentido, el diplomático afirmó que se puso en contacto con el Gobierno de los Estados Unidos para aclarar esta situación y que habló con el embajador norteamericano. “Me dijo que iban a pedir una grabación con las expresiones, que se disculpaba por la situación creada. Yo no creo que sea la opinión del Gobierno de los Estados Unidos, porque no carece de inteligencia, no carece de sutileza, de mecanismos para aportar positivamente a una situación de conflicto como la que existe hoy en la Argentina”. “Ahora, de lo que dijo Noriega, poder extraer un miligramo de inteligencia, es muy difícil”, aseguró. “Hubo un profesor de Derecho muy importante, que escribió un libro que se llama “Un país al margen de la ley” y la Argentina es un país al margen de la ley. Son pocas las posibilidades que tenemos de ser un país serio. Donde hay una comisión flagrante de un delito, deben intervenir los aparatos institucionales y constitucionales y eso no significa criminalizar la protesta social ni la pobreza, sino que la ley está vigente”, manifestó. Al respecto, añadió que es una cosa objetiva y que nadie se siente feliz cuando tiene que esperar 45 minutos en una esquina porque esta totalmente cortada. “Ahora ese problema no se arregla con palos solamente sino abordando, aplicando la ley pero para todos, para quienes cortan y para quienes tienen gatillo fácil”. “El día que la Argentina tenga una generación de trabajo como la que tiene Pekín y Shangai no vamos a tener piqueteros. La izquierda y la derecha no se discute más en el mundo. Este país (refiriéndose a China) comunista está haciendo un esfuerzo grande para que el mundo lo reconozca como una economía de mercados. Este año exportó u$s860 M, entonces no tiene sentido hablar de izquierda y de derecha si uno quiere entender al mundo”, completó. OTRA RÉPLICA A NORIEGA El ministro del Interior, Aníbal Fernández, enfatizó hoy que la Argentina “es soberana en la toma de decisiones”, al cuestionar que el subsecretario de Estado para Asuntos Hemisféricos, Roger Noriega, haya expresado preocupación por la política oficial ante los piqueteros. “La verdad es que no es la primera vez que Roger Noriega tiene actitudes atrevidas de opinar sobre Argentina. Uno se tienta de decirle por qué no se fija lo que Estados Unidos está haciendo en Irak, en lugar de con los piqueteros en Argentina”, enfatizó Fernández. El funcionario, en declaraciones televisivas, destacó que la administración Kirchner “tiene una conducta reivindicable en todo momento” porque “quiere poner a la Argentina en su lugar, tras la “animalada” de 2001”. “El camino elegido es el correcto, por ahí toma más tiempo, pero no hay sangre, ni heridos, ni muertos, nuestra gente es lo más importante”, enfatizó Fernández.